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¿En qué estado se encuentra la educación de México hoy en día?


Enviado por   •  18 de Abril de 2017  •  Ensayos  •  1.783 Palabras (8 Páginas)  •  387 Visitas

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UNIVERSIDAD DE GUADALAJARA

Departamento de Filosofía

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Materia: Desarrollo de ambientes de aprendizaje.

¿En qué estado se encuentra la educación de México hoy en día?

María Alejandra Apodaca Aguirre

210520266

Lic. Filosofía

Cuarto semestre

Antonio Sandoval

Maestro

1ero de junio de 2012, Guadalajara, Jal.

Introducción

        En el presente ensayo pretendo responder a la pregunta ¿En qué estado se encuentra la educación de México hoy en día? Dado que ya arrastramos una historia impresionante llena de altibajos, que nos han proporcionado las bases de lo que hoy tenemos por educación.

Mencionaré a un pensador de la educación mexicana que es muy importante para reflexionar un poco a cerca de lo que queremos para nuestro futuro. Son muchos los factores que impiden que se logre una educación satisfactoria que van desde una simple reforma, hasta los problemas sociales que nos rodean en cada contexto.

Es importante destacar que me baso en algunas reflexiones de Freire y Weber para contrastar nuestra actualidad con lo que en realidad debería de ser.

Espero que al final quede contestada la pregunta de una manera agradable y se de a entender lo que pienso de ello.

        

El problema

        La mayoría de las veces hablamos de educación sin saber en realidad como se maneja este tema en nuestro país, nos quejamos de los maestros, de la escuela, de las tareas, de que en realidad la educación está mal, sin embargo no somos capaces de ver que hay detrás de todo eso, si es verdad que todo lo malo está en los maestros o la escuela. Pero hay mucha posibilidad de que también nosotros como estudiantes tengamos cierta responsabilidad acerca de lo que pasa con esto.

Es bueno recordar que si heredamos algunos problemas es porque vienen desde nuestros antepasados, para empezar, en la época prehispánica había distinciones de clases para los niños que estudiaban; estaba el “calmecac”, que era la escuela de los nobles, donde estudiaban para ser sacerdotes o lideres; y estaba el “tepochcalli”, una escuela en donde se educaba a los guerreros, campesinos y cazadores.[1]

En realidad esto no ha cambiado mucho, hasta la fecha sigue habiendo distinciones entre clases sociales, de hecho hay muchas instituciones privadas que exceden en sus cuotas mensuales y solo dejan que la calidad educativa esté en personas que pueden pagar dichas cuotas. Ya lo decía nuestra constitución en el artículo tercero (y lo sigue diciendo), la educación debe de ser laica y gratuita, pero al parecer es imposible que se cumpla al cien porciento este mandato y eso se debe principalmente a las políticas educativas que se han ido implementando al paso de los años.

        “En los textos constitucionales, la misión de la escuela es educar al pueblo, no sólo proporcionarle habilidades y destrezas y reproducir el conocimiento, sino educarlo en el sentido profundo de formar una persona culta, apta para vivir en sociedad y ser productiva”.[2] Emile Durkheim ya lo planteaba de esta manera muy parecida: “La educación tiene, pues, en función suscitar en el niño: 1ro. cierto número de estados físicos y mentales que la sociedad a que pertenece considera que no deben estar ausentes en ninguno de sus miembros; 2do. algunos estados físicos y mentales que el grupo social particular (casta, clase, familia, profesión) considera igualmente que deben estar presentes en todos aquellos que la integran. De ese modo, son la sociedad en su conjunto, y cada medio social particular, los que determinan ese ideal que la educación realiza”.[3] De este modo si somos capaces de revisar nuestra constitución el artículo 3ro. nos daremos cuenta que todo lo que dice parece perfecto y hasta utópico porque se plantea la educación dada por el Estado completamente gratuita, así también se señala que tenemos el derecho de profesar las creencias que mejor nos parezcan y esto no influirá en nuestra educación. Poniendo esto en el contexto actual ¿Qué tanto se respetan nuestros artículos constitucionales?, al parecer nada y me atrevo a asegurar que día a día va empeorando, la política se ha convertido en un espacio de poder, el sindicato encargado de la educación es una mafia a la que le importa poco el futuro académico de México. En realidad no se si pareceré una patriota desquiciada, pero creo que no es justo que nuestros “héroes” (por decirlo así) hayan luchado por un país independiente sólo para que las personas que lo manejan no piensen en hacer algo verdaderamente favorable para actualizar las políticas educativas que nos rigen.

        Vasconcelos es uno de estos “héroes”, él intentó rescatar al país, pensaba unificar de nuevo al Estado mexicano para que no olvidara su identidad y sus raíces, y hacer que con la educación nuestras opiniones tomaran voz. La educación la consideró como el motor que genera conciencias, y además la que despierta el espíritu: “La verdadera novedad consistió en concebir la educación como una palanca para remover conciencias, como un despertar del mexicano, que se realizaría no sólo por la experiencia escolar, sino por la difusión de la cultura, de los libros”[4]

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