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El Legado de la Conquista


Enviado por   •  5 de Noviembre de 2017  •  Apuntes  •  2.121 Palabras (9 Páginas)  •  378 Visitas

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El Legado de la Conquista

Esta historia la han hecho los “hombres de corazón de fuego”, quienes tenían grandes ambiciones, creando así un nuevo mundo.

El fin de la conquista significó el comienzo agónico del mundo aborigen, el cual, muere lentamente al quedar excluido del dominio de sus tierras y no poder resistir el poder de la Evangelización. No se trataba del triunfo de un mundo sobre otro, sino, sobre las bases impuestas por el vencedor.

América era el eje sobre el que giraba la vida del nuevo mundo, y es allí donde nacen los valores de la identidad cultural iberoamericana.

Las cúpulas de las iglesias barroco-americanas, eran un símbolo del mestizaje y la Conquista. Cada conquistador se sintió en la obligación de honrar a la historia dejando un linaje, y además, a las ciudades poblándolas y embelleciéndolas. Maravillosas ciudades serán el símbolo de la memoria histórica del hombre americano.

La naturaleza y el callado aborigen fueron los elementos con los que debieron enfrentarse estos hombres en este nuevo mundo, el cual aún seguía atado, umbilicalmente,  a España.

Este cordón umbilical son los principios de la fe cristiana y el pensamiento europeo, sobre estas se conformó una vida social. Tanto la fe como lo histórico, es el concepto de vida del Conquistador.

El mundo aborigen queda afectado y detenido por estos principios.

El mestizo ya no es el creador del linaje. La escasez de mujeres hizo que ambas razas se buscaran con el ansia de amor fértil, como ocurrió con el apogeo de la conquista. El mestizaje posterior no es por medio de españoles y aborígenes, sino por intermedio del mestizo. El mestizo se unió al blanco en las primeras generaciones como al indio, en las siguientes.

Aguilar, perdido en una expedición, vivió varios años con los indios y aprendió su lengua, como diacono era su tarea que se abran los frailes de la Conquista, además les enseño a los indios la fe cristiana, como también lo hicieron los Jesuitas en Paraguay.

En la Conquista se incorporan a occidente más de doscientos pueblos distintos, que abandonan su religión, idioma y costumbres. Los hispanoparlantes piensan tanto como occidental, que como aborígenes. Aprende a razonar con los sentimientos, y por eso su originalidad se expresa en las artes. Estas serían el primer intento de construir un mundo distinto al occidental, que luego será la esencia de la cultura criolla.

El hecho de que esta cultura se haya podido actualizar no es óbice para negar su existencia. Un nuevo pensar sin dejar de ser occidental y sin dejar de ser afectado por la indómita Naturaleza en la sangre del mestizo. Es por eso, que la Conquista adquiere caracteres validos como proceso histórico, la más importante de todas las realidades que ofreció la Conquista, es a través del mestizaje.

La Conquista le ha ofrecido a América Hispana una cultura criolla original, hecha por hombres que nacieron en España y se hicieron en América.

La Conquista fue una obra del pueblo español, la actitud del conquistador es la misma que la de la España mora.

 Una sociedad basada en el valor, en la hazaña; nunca en los títulos o en la sangre. El culto al valor engendra al caudillo, al jefe, al dominador carismático, con fieles partidarios que lo siguen y apoyan. Se cree en él porque es valiente o posee una personalidad avasallante o porque es agradable, el problema es que se lo considera el mejor sin ninguna atadura moral.                                   De allí el mundo hispano, hereda el caudillismo de España.

Esta mentalidad se ve en los aventureros, que van a hacer historia confiados en el destino y en sus fuerzas. Estos hombres creen que los galardones se merecen, no se ganan; la riqueza se gana, no se merece. Estos no regresaron a España a gozar de la fama o riqueza, sino que vivieron y murieron en las tierras conquistadas para fundar un señorío.

 Emerge la necesidad de poner un control político en las nuevas tierras para aprovechar mejor sus riquezas. El cruce del atlántico es peligroso por la cantidad de piratas. Además, los hombres de América se sienten manipulados y aparecen las primeras luchas internas, de quienes quieren su independencia movidos por sus propios intereses.

Las nuevas expediciones fundan asentamientos, que en su mayoría se rebelan contra las autoridades asignadas por la corona. No faltan aventureros con la ilusión de formar un nuevo linaje.

Igualmente, siempre quedan resentidos que se acoplan a los principales para hacer exploraciones, fundar nuevas ciudades, ya que es la forma de adquirir una nueva “merced”, de realizar un ideal de vida.

Así surgen muchas ciudades, siempre en montañas, cerca de un rio y donde haya aborígenes que trabajen la tierra. Así varios grupos parten en compañía de un caudillo  y una autorización legal, en busca de un buen lugar para asentarse. Lentamente se van construyendo pueblos en los que el elegido pretende tener un señorío, construyendo un eventual estamento con el derecho al mando; un derecho por la conquista y el planteo de la evangelización.

Una vez fundada una ciudad se invita gente, curas y clérigos y se hacen comunicaciones protocolares para lograr el reconocimiento real; el éxito de la fundación depende de la capacidad del fundador para afirmar su logro. Con el tiempo la gente comienza a asentarse en estos pueblos y a reconocer la autoridad del señor quien los defiende de los indios que se rebelen.

La comunidad  se estamentiza y empieza a emerger la fundación de ciudades por gente que buscó el señorío. Esta nueva forma de vida ampliaba el conocimiento del territorio; así abandonar la proeza y justificar el asentamiento en las ciudades.

Los asentamientos necesitaban a las mujeres españolas para su verdadero éxito, dado que estas consolidaban el linaje a través de una familia. Además, instituciones políticas y religiosas comenzaron a imponerse y las tierras comenzaban a ser colonias, dado que los indios eran mansos. Solo quedaban tierras en las llanuras fértiles donde no habían indios mansos y solo algunos labradores que buscaban el éxito económico la trabajaban.

Comienzan a llegar a estas nuevas ciudades funcionarios y prebendarios  para administrar la riqueza. Se comienza a consolidar una estratificación en el origen de la fundación de las ciudades y tenencia del señorío que se manifiesta en el linaje, en una estratificación de castas entre blancos e indios.

La mujer española pasa también a ser un elemento de discriminación al aclarar la raza mestiza, los indios quedan relegados a una casta, el mestizo solo quiso acercarse al blanco o al mestizo, pero no al indio.

Felipe segundo busco establecer “pacificación y poblamiento”, limitando la creación de nuevas ciudades y enviando funcionarios a las ciudades. Los puestos públicos se los daban a españoles o se ponían a la venta y se producía un cambio en el otorgamiento de las tierras. Las tierras ya no eran una retribución a la conquista, sino que eran compradas. Comenzó una nueva forma de poder que se asentaba en la desigualdad social y una nueva forma de legitimar el poder y obtener riquezas.

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