El renacimiento es una gran época para la mentalidad histórica
Enviado por jorge_075 • 23 de Agosto de 2015 • Documentos de Investigación • 733 Palabras (3 Páginas) • 88 Visitas
El Renacimiento
El renacimiento es una gran época para la mentalidad histórica. Lo estampan la idea de una historia nueva, global, la historia perfecta, y los importantes progresos metodológicos de la crítica histórica. La historia del humanismo y el renacimiento asume una doble y contradictoria actitud ante la historia.
Por una parte, el sentido de las diferencias y del pasado de la relatividad de las civilizaciones, pero también la búsqueda del hombre, de un humanismo y de una ética donde paradójicamente la historia se vuelve vitae.
Por otra parte la historia se alía en este periodo con el derecho, y esta tendencia culmina con la obra protestante, el objetivo de esta alianza es la unión de lo real con lo ideal, de las costumbres con la moralidad, que sueña con una historia integral, pero la visión de la historia sigue siendo utilitaria.
En este periodo se da la conciencia histórica de vencedores y de vencidos: la historia parece entonces racional solo a los vencedores, mientras que los vencidos la viven como irracional. Se pone en manifiesto una última astucia de la historia, los vencidos se constituyen una tradición como medio de rechazo.
La historia lenta que se encuentra en la cultura popular en esta época, es un efecto, una especie de antihistoria en la medida en que se opone a la historia que ostenta y animan los dominadores.
La historia del renacimiento depende estrechamente de los intereses sociales y políticos dominantes, en este caso del Estado. Y el protagonista de la producción historiográfica ha sido en el ambiente señorial y monárquico.
Historia en la Revolución Francesa
Francia es un ejemplo de como la monarquía intento domesticar la historia, especialmente en el siglo XVII, durante el cual los defensores de ortodoxia católica y los partidarios del absolutismo real condenaron como libertina.
Una función de la historia en Francia era robar los derechos del rey y el reino, alabar, las buenas acciones, dar ejemplos a la posteridad, todo ello para gloria del rey y el reino. Sin embargo, el puesto seguirá siendo relativamente oscuro.
En el siglo de la luces en Francia los pensadores tenían otro pensamiento sobre la historia. La historia es un arma contra el fanatismo y las épocas en que este reino, especialmente la Edad Media, solo son dignas de desprecio o de olvido: no hay que conocer la historia de ese tiempo sino para despreciarla mencionaba Voltaire. La historia es el campo donde se enfrentan la razón y los prejuicios.
Los revolucionarios no se interesaban por la historia, la hacían, querían destruir un pasado aborrecido, y no pensaban en dedicarle el tiempo que podía emplearse mejor en tareas creativas.
La obra principal de la revolución francesa en el campo de la mentalidad histórica fue constituir una ruptura y dar a muchos, en Francia y en Europa,
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