Ensayo sobre Las Malvinas

   «Soldado Argentino Sólo Conocido por Dios». La frase que da pie a las 123 placas que marcan la sepultura de ex combatientes en el Cementerio Argentino de Darwin, en las Islas Malvinas con otros 177 cuerpos reconocidos en fosas comunes dándoles honores militares. Cada tumba está señalizada y marcada por una cruz de madera blanca teniendo un rosario envolviéndola. Las mismas contienen la misma altura que las otras y tienen inscriptas el nombre del soldado en ellas si es que se conoce o con la frase anteriormente dicha. Este cementerio está conformado por 3 sectores; Norte; Este y Oeste. Posee placas de granito con el nombre de los 649 argentinos que fallecieron en esa batalla, sin ninguna indicación de rango militar o de servicio. Son alrededor de 89 cuerpos que fueron sepultados en otros lugares o en su gran mayoría no fueron recuperados

   Este conflicto bélico resuena como una sentencia o como una cuenta pendiente de un país y su historia reciente. La Guerra de Malvinas, de cuyo inicio el 2 de abril de 1982 donde su origen surge desde una maniobra de estado, para demostrar que la dictadura de ese momento era la decisión correcta. El general Galtieri intentó por parte de la Argentina recuperar la soberanía de las islas sobre el Reino Unido considerado una potencia invasora. Duró 74 días teniendo como saldo centenas de vidas humanas por ambos lados y muchos de los cuales aún siguen siendo NN en ese inhóspito lugar. La derrota del conflicto precipitó el fin del gobierno de facto de ese entonces para que así, en 1983, se realizaran elecciones para instalar un gobierno democrático.

   En los primeros años del retorno a la democracia los medios de comunicación se abstuvieron de mencionar la guerra y los soldados que retornaron al territorio argentino fueron totalmente ignorados por la sociedad, siendo considerados por el imaginario colectivo como simples chicos de la guerra y víctimas de la dictadura militar que gobernada en ese momento. En todo el país los medios de comunicación tenían prohibido hacer reportajes, todavía no se les estaba permitiendo a los soldados decir lo que habían vivido, como sufrir el frío, el hambre y todas las penurias que habían pasado en la guerra. Llevándolos a una zona gris de marginación social formándose la figura de que ‘volvieron medios loquitos’. Esta desmalvinización despojó todo acto heroico y patriótico ocurrido en las islas, además de sintetizar el clima social y político de Argentina. De esta manera, mientras algunos veteranos perdían el trabajo, a otros que lo buscaban se lo negaban ya que más de la mitad de los solados venían de un sector socioeconómico bajo, donde la fuerza militar en aquel entones que tenía como ideología la reorganización nacional mandar a esos chicos de situación precaria iba a ser mejor. O también aquel que vendió sus medallas honoríficas porque no tenía con qué subsistir.

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