Frida Kahlo

Trabajo escrito sobre Frida Kahlo.

Cuando Guillermo Kahlo construyó la casa de Coyoacán, era un fotógrafo de éxito a quien el gobierno mexicano acababa de encargar el registro del patrimonio arquitectónico de la nación. Sus padres, Jakob Heinrich Kahlo y Henriette Kaufmann Kahlo, eran judíos húngaros de Arad, ahora parte de Rumania, quienes emigraron a Alemania, estableciéndose en Baden-Baden, donde nació Wilhelm en 1972. Jakob Kahlo era joyero y también comerciaba en artículos fotográficos. Cuando llegó la hora, era suficientemente rico para mandar a su hijo a estudiar en la universidad de Nuremberg.

Alrededor de 1980, la prometedora carrera del estudiante Wilhelm Kahlo finalizó antes de haber comenzado: el joven sufrió heridas en el cerebro a causa de una caída y empezó a padecer de atasques epilépticos. Su madre murió más o menos al mismo tiempo, y su padre se volvió a casar con una mujer con la que Wilhelm simpatizaba. En 1891 el padre le dio a su hijo, de 19 años, suficiente dinero para pagar el pasaje a México; Whilhelm cambio su nombre a Guillermo y no regreso jamás a su país de origen. Llego a la ciudad de México casi sin dinero y con pocas posesiones. A través de sus relaciones con otros emigrantes alemanes, encontró trabajo como cajero en la “Cristalería Loeb”.

Más tarde ocupó el puesto de vendedor en la librería. Finalmente, trabajó en una joyería llamada “La Perla”, cuyos dueños eran compatriotas con los que había viajado de Alemania a México. En 1984 se caso con una mujer mexicana que murió cuatro años después al dar a luz a su segunda hija. Entonces, se enamoró de Matilde Calderón, una compañera de trabajo de “La Perla”. Entre 1904 y 1908, usando buenas cámaras de fabricación alemana y más de novecientas placas de vidrio preparadas por él mismo, Guillermo Kahlo registró la herencia arquitectónica de México, ganándose el elogioso título de “primer fotógrafo oficial del patrimonio cultural mexicano. Matilde Calderón y González

Matilde Calderón nació en Oaxaca en 1876, Matilde Calderón y González era la mayor de doce hijos de Isabel González y González, la hija de un general español, educada en un convento, y de Antonio Calderón, un fotógrafo de descendencia indígena procedente de Morelia. Fue Matilde Calderón de Kahlo quien persuadió a su esposo a dedicarse a la fotografía, la profesión de su padre.

Magdalena Carmen Frida Kahlo y Calderón, la tercera hija de Guillermo y Matilde Kahlo, nació el 6 de julio de 1907 a las ocho y media de la mañana, en plena temporada de lluvias. Recibió los primeros dos nombres para que pudiera ser bautizada cristianamente. Su familia usaba el tercero, que significa “paz” en alemán. Poco después de que naciera Frida, su madre se enfermó y una nodriza indígena amamantó a la niña por un tiempo.

Las hermanas mayores de Frida, Matilde y Adriana, cuidaron de Frida y de la más pequeña, cristina. Sus hermanastras, María Luisa y Margarita, fueron colocadas en un convento cuando se volvió a casar su padre. Su madre (Matilde Kahlo) les enseño los trabajos domésticos a Frida y a sus hermanas, intento transmitirles la fe religiosos, pues para la madre de Frida era muy importante. Frida aprendió a coser, bordar, guisar y limpiar a una temprana edad, a pesar de ser muy inquieta.

Siendo aun una niña a la edad de 6 años contrae poliomielitis y se ve obligada a permanecer en reposo, su pierna derecha quedó afectada por las secuelas del padecimiento. A consecuencia de esa enfermedad la metieron a diversos deportes para fortalecer si pie derecho. En la escuela era excluida por su pierna derecha, sus compañeros le gritaba: Frida pata de palo. La solución que hizo para que disimular su pierna, era ponerse muchos calcetines gruesos en su pie derecho. Un beneficio que le trajo a Frida de dicho acontecimiento fue de que su padre Guillermo pasó más tiempo con ella. Dentro de sus actividades, Guillermo enseño a Frida a usar una cámara y a revelar, retocar y colorear fotografías.

Hacía 1920 ingresa a la liga de la juventud comunista. Para 1922 asiste a la escuela nacional preparatoria con la firme intención de capacitarse para algún día estudiar medicina.

Frida tenía amigos en varias pandillas de la preparatoria:

Los contemporáneos, quienes se encontraban Salvador Novo y Xavier Villaurrutia.

Los maestros, se manifestaban a favor de Vasconcelos, lo conformaban Salvador Azuela y Germán de Campo.

Sus verdaderos cuates eran los Cachuchas, que eran muy inteligentes pero también muy traviesos, lo conformaban Miguel N. Lira, José Gómez Robleda, Agustín Lira, Jesús Ríos y Valles, Alfonso Villa, Manuel González Ramírez, Alejandro Gómez Arias, Carmen Jaime y Frida Kahlo.

Un lugar predilecto para los Cachuchas era la biblioteca Iberoamericana. Con este grupo, Frida aprendió a leer tres idiomas mediante competencias de ver quien escogía el mejor libro y ver quien lo terminaba primero, y adaptaban las lecturas en obras teatrales. En el grupo de los Cachuchas entablo una relación con Alejandro Gómez Arias.

Frida les faltaba el respeto a sus profesores pues decían que eran ignorantes y que no sabían dar clases, pues cuando ellos terminaban de leer sobre un equis tema, ella les preguntaba y no sabían contestarle adecuadamente.

En el anfiteatro bolívar que estaba en el auditorio de la escuela nacional preparatoria donde iba Frida, Diego Rivera pinta un mural y ahí es donde Frida lo ve la primera vez y le llamo la atención. Frida le hacía travesuras a diego durante su estancia en el auditorio.

De 1925 Frida toma clases de dibujo en el taller de grabado de Fernando Fernández; allí ejercita su mano y entrena su ojo en la minuciosa copia de los grabados del artista Anders Zorn. Con Fernando tuvo algo sentimental.

Su vida de estudiante toma un giro inesperado el 17 de Septiembre de 1925, cuando se ve involucrada en un aparatoso

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