La Alemania nazi dirigida por el dictador Adolf Hilter y el imperio japonés, en su afán de establecer mediante la conquista militar un dominio absoluto en Europa y Asia

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La Alemania nazi dirigida por el dictador Adolf Hilter y el imperio japonés, en su afán de establecer mediante la conquista militar un dominio absoluto en Europa y Asia, desataron uno de los acontecimientos más terribles que marcaron a la humanidad, la Segunda Guerra Mundial. Estos dos países eran los miembros más importantes de la alianza del Eje, dicha alianza se estableció entre Alemania, Italia y Japón, mejor conocida como el eje Berlín-Roma-Tokio. Estos tres países comenzaron a planear una guerra y juntos  reconocieron el dominio alemán sobre la mayor parte del continente europeo, el dominio italiano sobre el Mediterráneo y el dominio japonés sobre Asia del Este y el Pacífico.

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Con estos planes de guerra, Japón inició su conquista militare invadiendo territorio chino de Manchuria en septiembre de 1931. Seis años más tarde, en julio de 1937, Japón invadió a la propia China y así  fue como desató la Segunda Guerra Mundial en Asia.

Alemania por su parte inició la guerra mundial en Europa, al invadir Polonia el 1 de septiembre de 1939. Después de la destrucción que Alemania hizo con Checoslovaquía, Gran Bretaña y Francia eran los dos países encargados de velar por la seguridad de la frontera de Polonia, entonces respondieron de inmediato a la invasión alemana declarando la guerra el 3 de septiembre. La gran estrategia de sus dirigentes hicieron que en un mes, las fuerzas alemanas y soviéticas conquistaran Polonia y para ser muy justos dividieron el territorio.

No pararon con la invasión de Polonia, para ellos solo era el comienzo de su gran imperio. Las fuerzas alemanas siguieron con la invasión de Noruega y Dinamarca el 9 de abril de 1940, este último se rindió el mismo día que lo tomaron. Noruega resistió dos meses más, hasta que Alemania tomó por completo el país. Por otra parte los alemanes comenzaron a atacar e invadir Francia, fueron invadidos también los países bajos, Holanda, Bélgica y Luxemburgo, que siempre permanecieron neutrales, lo cual no les importó para pasar sobre ellos.

El 22 de junio de 1940, Francia firmó un tratado con Alemania. El pacto dio pie a que Alemania ocupara la mitad del norte de Francia y permitió que se estableciera un régimen de colaboración al sur con sede en Vichy.

Por suerte para muchos, del 10 de julio al 31 de octubre de 1940, los alemanes tuvieron una mala racha y finalmente perdieron, una batalla aérea contra Inglaterra, mejor conocida como la Batalla de Gran Bretaña.

La Unión soviética por su parte y gracias al acuerdo que firmó con Alemania nazi, invadieron Finlandia a fines de noviembre de 1939, una batalla muy dura para ambos países ya que se enfrentaron a climas muy fríos gracias al invierno, pero al final los soviéticos forzaron a los finlandeses a ceder su territorio del Lago Lagonda, situadas al norte de Leningrado y la costa del Ártico en marzo de 1940.  Bajo el manto Alemán, la Unión Soviética ocupó y se anexó también los estados bálticos en junio de 1940. Rumania perdió a manos de los soviéticos dos estados, Besarabia y el norte de Bucovina.

Italia se hizo presente en la guerra el 10 de junio de 1940 e invadió el sur de Francia el 21 de junio. Muy enojado Benito Mussolini por el pacto que se había firmado entre Alemania y Francia y por el pobre botín que le había tocado a Italia  decide atacar Grecia en octubre de 1940 desde Albania, cuidad que ya habían tomado anteriormente. A fines de octubre de 1940, los italianos también atacaron las fuerzas británicas en Egipto desde Libia, que también estaba bajo control italiano, tácticas muy a su favor entrar desde países colindantes. Pero no les fue nada bien ya que ambas invasiones terminaron en un desastre militar que requirió la intervención de Alemania.

Alemán al mando de Hitler,  invitó a Hungría, Rumania y Eslovaquia en noviembre de 1940 y a Bulgaria en marzo de 1941 para que se unieran al Eje. Convencidos de pelear, en abril de 1941, Alemania con el apoyo de Italia, Hungría y Bulgaria, invadió y dividió a Yugoslavia. A la mitad de junio de este mismo año, las potencias del Eje habían doblegado por fin a Grecia, y del derrumbe de Yugoslavia surgió el llamado Estado Independiente de Croacia, bajo la dirección de Ustasha, organización fascista y terrorista. El eje tuvo más aliados este mismo mes ya que en nuevo Estado que comprendía a Bosnia y Herzegovina formalmente se unió al ellos. Alemania tomó el este de Eslovenia y casi todo Serbia. Italia invadió a Istria y el oeste de Eslovenia, unió la provincia de Kosovo a Albania y ocupó la costa croata-dálmata y Montenegro. Hungría se quedó con Backa, situada en el noreste de Yugoslavia, la Macedonia bajo ocupación búlgara y la provincia serbia de Pirot. Después de permitir que Bulgaria ocupara la Tracia griega, Alemania e Italia dividieron a Grecia, con los italianos en el oeste y los alemanes en el este, causando total desacuerdo en Bulgaria por razones obvias.  

El 22 de junio de 1941, los alemanes y sus socios del Eje, excepto Bulgaria, invadieron la Unión Soviética violando el Pacto Alemán-Soviético que habían firmado en agosto de 1939. Finlandia, que buscaba redimir su derrota del invierno, decidió unirse al Eje y a la invasión alemana sumando un país más a los aliados.

Siguiendo con la invasión de los alemanes a la Unión soviética,  finales de octubre de 1941, las tropas alemanas se habían adentrado profundamente, invadiendo los estados bálticos y sitiando a Leningrado en el norte; habían invadido Smolensk y marchaban hacia Moscú en el centro; habían tomado Kiev y muy rápido se acercaban a Rostov en la desembocadura del río Don en el sur. Con toda la resistencia el Ejército Rojo en agosto y nuevamente en noviembre de 1941 evitó que los alemanes tomaran las ciudades clave de Leningrado y Moscú. El 6 de diciembre de 1941, las tropas soviéticas lanzaron una fuerte contraofensiva que expulsó a los alemanes de las afueras de Moscú.

Un día después de que Alemania fue expulsado de Moscú, el 7 de diciembre de 1941, Japón, que todavía estaba en batalla con la China continental, lanzó un ataque aéreo sorpresa en Pearl Harbor, Hawái. Dejando miles de civiles y marinos muertos que no se esperaban el ataque. Estados Unidos sin dudar  declaró la guerra a Japón. Gran Bretaña hizo lo mismo. El 11 de diciembre, Alemania e Italia le declararon la guerra también a Estados Unidos. Durante los meses de invierno de 1941-1942, los japoneses atacaron e invadieron Filipinas, la Indochina francesa (Vietnam, Laos y Camboya) y el Singapur británico. Al comenzar el verano de 1942, Japón perdió fuerza, los británicos pudieron frenar su avance en Birmania  y cayó ante  Estados Unidos en Midway en el Pacífico, deteniendo también su avance por las islas del Pacífico en dirección a Australia, en Guadalcanal, en las Islas Salomón. [pic 3]

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