La Guerra Entre Honduras Y El Salvador

Capitulo IV

LA GUERRA NO FUE DE FUTBOL; FUE DE HOMBRES

Tras los sucesos acaecidos en los dos juegos de futbol, las acusaciones diplomáticas continuaron. Con fecha 19 de junio el gobierno de El Salvador protesto ante el de Honduras por los atropellos cometidos contra los salvadoreños. Por otra parte, Honduras denuncio, el 25 de junio, ante la Secretaria General de la Organización de Estados Americanos violaciones a los derechos humanos cometidos en El Salvador contra los ciudadanos hondureños.

La Comisión de Derechos Humanos de la OEA anuncio el 27 de junio la designación de una subcomisión para comprobar la veracidad de las denuncias de ambos países. El día 30 de junio el general Fidel Sánchez Hernández, presidente de la Republica, mostro al aceptar la mediación de los cancilleres de Guatemala, Nicaragua y Costa Rica que objetivos perseguía El Salvador; dijo que aceptaba la mediación siempre que Honduras se comprometa previamente a repararlos perjuicios ocasionados a los nacionales que salieron de aquel país.

En la prensa de esa época, tanto de Honduras como de El Salvador, se muestra la enorme campaña belicista basada en las supuestas atrocidades cometidas en uno u otro país. Periodistas extranjeros que visitaron los albergues en El Salvador no pudieron comprobar dichas atrocidades. El corresponsal Albert Coya, en un reportaje publicado en el periódico Miami Herald, el 2 de julio dice:

…solamente había unos doscientos refugiados en el albergue de San Miguel y menos aún en otros refugios que yo visite. También se dijo que los mutilados habían sido evacuados al Hospital Rosales en San Salvador; yo fui allá y hable con dos médicos, enfermeras y otros empleados. Ellos dijeron que no habían tratado ni visto ningún caso de mutilación en el hospital.

Existieron unos 17 mil emigrantes entra la fecha del segundo juego de futbol y el 14 de julio, día en que inicio la guerra. Los mediadores centroamericanos presentaron el 30 de junio un plan conciliatorio de ocho puntos para resolver la disputa. Dicho documento recomendaba el retiro de las tropas a una distancia de por lo menos cinco kilómetros de la zona fronteriza, también señalaba que se debía suprimir propaganda belicista y realizar investigaciones judiciales sobre los delitos cometidos y los daños causados a ambos países, con el fin de que fueran indemnizados.

Honduras, que se sabía en desventaja si estallaba la guerra, acepto diplomáticamente el pliego de recomendaciones, presionado el gobierno por la United y la oligarquía criolla continuo la expulsión de los salvadoreños. El Salvador ante la avalancha que continuaba llegando a la frontera, vio como único camino la guerra y rechazo las recomendaciones.

Un choque armado ocurrió el 3 de julio en la región fronteriza de El Poey, cerca de la ciudad de Nueva

...