La guerra de guerrillas en el Alto Perú

1. La guerra de guerrillas en el Alto Perú.

John Lynch en el tercer capítulo del texto “Las Revoluciones Hispanoamericanas. 1808-1826”, llamado  “La guerra de guerrillas en el Alto Perú”, en una primera instancia nos habla del interés que tiene Buenos Aires hacia el Alto Perú.

Antes de la revolución de Mayo 1811, los Altos del Perú eran parte del virreinato de Rio de La Plata. Cuando Buenos Aires se rebeló, Lima empezó rápidamente a exigir su antiguo patrimonio y reintegrarlo a la fortaleza realista del Perú. Buenos Aires rehusó aceptar esta separación e hizo de la liberación del Alto Perú uno de los objetivos esenciales de la revolución. 

Bueno Aires tenía tres razones principales, para no dejar ir  el Alto Perú. Uno era en lo económico, ya que se había convertido en un importante elemento de comercio ultramarino, debido a su producción de plata, en segundo lugar, un interés estratégico, ya que era un claro trampolín para las operaciones españolas de contrainsurgencia.  Y además que tenían aliados entre los patriotas del Alto Perú.

Por otro lado, los territorios del Alto Perú  no era un terreno fácil para una guerra de liberación, dentro de los ejemplo expuesto por Lynch esta  el fracaso de la revolución de 1809, la renuncia de la aristocracia criolla al no poder subvertir el orden social en una población donde estaba rebasada de indios y mestizos, los recursos militares y el poder del virrey en Lima. (Todo suponía dificultades para las fuerzas de liberación que iban al Alto Perú). Otro de los factores que impedían una guerra de liberación era la presencia de la esquiva montaña del mundo Hispánico hecha por la naturaleza para una guerra irregular.

La independencia en primera instancia se expresó  como una resistencia guerrillera a lo ejércitos realistas de ocupación. La guerrilla del Alto Perú se juntaba en bandas y se mantenían unidos porque poseían un objetivo en común y seguían a un caudillo reconocido socialmente. Cada individuo de la banda aportaba con caballas y armas o las conseguían durante la acción. En cuanto a los abastecimientos, vivían del campo, vendían coca.

Cada valle, montaña, aldea tenían su grupo de guerrillero y su pequeño caudillo, que convertía a la localidad en una zona menor de insurrección, una REPUBLIQUETA.

En el Alto Perú había seis focos principales de resistencia, uno al norte, dos en la zona centro, uno en la capital y dos al sur.

 Las guerrillas no fueron decisivas para lograr la independencia, ya que  no tenían una fuerte motivación política. Por su individualismo militar, donde  los caudillos impedían las acciones concertadas contra las fuerzas españolas incluso, algunas bandas individuales estaban dispuestas hacer tratos con los enemigos, de acuerdo a su conveniencia.  

Las guerrillas hablaban de combatir por la patria, pero esta no significaba simplemente libertad e iba acompañada de un conocimiento nominal de movimiento revolucionario en el Rio de La Plata, donde ya existía libertad. Considerando en un principio aliado pero, cuando se vio claramente que los ejércitos porteños no solo querían liberar el Alto Perú, sino que también ponerlo en una posición subordinada a Buenos Aires. Comportándose más como un depredador que como un aliado. Luego de esto, la orientación política del Altos  Perú se separó del Buenos Aires y se enfocó hacia la autodeterminación.

...