ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

La segunda cruzada


Enviado por   •  1 de Marzo de 2017  •  Resúmenes  •  1.629 Palabras (7 Páginas)  •  385 Visitas

Página 1 de 7

La Segunda Cruzada

Adriana I. Vélez

Academia Santo Tomás de Aquino Superior


Table of Contents

Abstracto        3

La Segunda Cruzada        4

La recuperación de Edesa        4

La predicación de Bernardo de Claraval        5

La Península Ibérica, Alemania y Francia        6

    El fracaso de la Cruzada        7

Referencias        9

Figuras        10


Abstracto

Las Cruzadas fueron nueve batallas durante la época medieval que se llevaron a cabo con el próposito de obtener Tierra Santa.  Tierra Santa, para los cristianos, es cualquier localización geográfica en la cual se desarrollaron escenas bíblicas.  La Cruz de los Peregrinos es también conocida como la Cruz Vieja con forma de Flor de Lis.  Para la época de la Segunda Cruzada, Inglaterra se encontraba en estado de anarquía, lo que significa que para esos momentos no había ningún poder político.

Keywords:  Cruzadas, Tierra Santa, Cruz de los Peregrinos, anarquía


La Segunda Cruzada

Las Cruzadas fueron unas luchas absurdas que terminaron siendo una pérdida de tiempo para el ser humano.  El término “Guerra Santa” es tan controversial como simplemente decir “guerra.”  El hecho de luchar en nombre de Dios es tan inhumano como luchar en nombre de Satanás.  Posiblemente, peor.  Pero estas Cruzadas fueron parte de nuestra historia.  La historia se repite y las Cruzadas, nueve veces.  La Segunda fue una de esas pérdidas de tiempo, especialmente para los cristianos.  En este trabajo podremos ver, en realidad, lo paradójico que es utilizar la violencia, la maldad, el reclamar un derecho que no existe, todo en nombre de Dios.  Es cierto, hoy en día, hemos cambiado nuestro pensar en cuanto a lo que es la guerra, especialmente los cristianos.  Pero, ¿acaso no se siguen repitiendo las Cruzadas?  ¿No estamos nosotros en medio de una?  Aquí podremos ver uno de los orígenes de la “Guerra Santa” y el gran fracaso que fue la Segunda Cruzada.

La recuperación de Edesa

Imad al-Din Zangi, atabeg de Mosul, quiso conquistar a Edesa, ya que era el más nórdico y además el más débil de los cuatro estados cruzados del este: Edesa, Jerusalén, Antioquía y Trípoli.  Este hombre era atroz y violento, quien a menudo se involucraba en problemas con quién fuera.  

La ciudad de Edesa era una difícil de conquistar, ya que estaba rodeada por una gran muralla fuerte en forma triangular.  Sin embargo, no contaba con mucho ejército, y los que se dedicarían a luchar serían artesanos como zapateros y sastres, los cuales serían dirigidos por un obispo francés. “Zangi hizo múltiples ofrecimientos para conseguir una rendición pacífica e incondicional, pero un comerciante imprudente los rechazó y el atabeg preparó sus tropas para el asalto.” (Cuesta, 2009)  Los turcos quemaron la muralla para crear alguna abertura, y cuando se abrió una brecha, entraron a la cuidad y la saquearon.  Esto duró tres días y con el tiempo la muralla cayó.  Los turcos atacaron a los ciudadanos sin pena alguna y sin mirar a quién.

Aunque Zangi intentó más de una vez parar la batalla, murieron seis mil personas en un solo día y la ciudad le pertenecía a Turquía.  Fue entonces que el Papa Eugenio III decidió anunciar el comienzo de una nueva Cruzada.

La predicación de Bernardo de Claraval

Al principio, no había apenas entusiasmo por la Cruzada.  Sin embargo, el Papa Eugenio III encargó a Bernardo, el “doctor melífluo”, un hombre muy bien reconocido y respetado entre los cristianos, a predicar la Cruzada.  Lo hizo el 31 de marzo de 1146 en la presencia del rey Luis.  Con su poderosa oratoria, Bernardo sostuvo que el luchar por el Reino de Dios lograría el perdón de los pecados y alcanzar la gracia.  Su predicación causó revolución, en la que el público se echó a gritos diciendo: “¡Cruces, dadnos cruces!”  La gente agotó las telas fabricando cruces.  Se dice que hasta el mismo Bernardo entregó sus vestiduras con ese propósito.  Muchos nobles se unieron, incluyendo Teodorico de Alsacia, conde de Flandes y Enrique, quien luego sería conde de Champaña.  Todos los nobles presentes, incluyendo Luis VII y su esposa Leonor se postraron frente a Bernardo para recibir la Cruz de los Peregrinos.

La predicación de Bernardo ocasionó que el Papa le nombrara santo por su aportación a la lucha de recuperar Tierra Santa.  “San Bernardo fue uno de los padres de la iglesia más influyentes, pero eso no significa que en algunos momentos su temperamento fundamentalista y visionario le convirtiera en un hombre vehemente y manipulador, con una gran capacidad de convicción.” (Cuesta, 2009)  Esta cita de Cuesta nos dice que, a pesar de ser un hombre admirado por los cristianos, su fanatismo hacia su religión era muy poderosa, ya que le servía muy bien para manipular a los demás.

La Península Ibérica, Alemania y Francia

Ya para el año 1147, un ejército de cruzados flamencos, frisones, normandos, ingleses, escoceses, alemanes y franceses partió de Inglaterra y se dirigió a Tierra Santa.  Sin embargo, ningún noble participó de esta expedición, ni siquiera Inglaterra, pues para esa etapa estaban en un estado de anarquía.  Gracias al clima, mientras navegaban por la costa portuguesa, terminaron en el Puerto de Oporto en Portugal.  Ahí, el Obispo les informó que el Rey Alfonso I intentaba deshacerse de los árabes que se encontraban residiendo en Lisboa.  Entonces, el ejército de cruzados se decidió en ir a ayudar al rey, ya que ellos luchaban en contra de los musulmanes y, además, se les ofreció el dinero y mercancías de la ciudad.  Este evento se conoce como la Toma de Lisboa y se da desde el 1 de julio hasta el 25 de octubre de 1147.

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (10.1 Kb)   pdf (193.4 Kb)   docx (97.7 Kb)  
Leer 6 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com