¿Qué Es Ser Mexicano?

¿Qué es ser mexicano?

El mexicano es nacionalista por naturaleza. ¿Y cómo no serlo? El país y su gente están bañados de cultura, desde nuestros orígenes prehispánicos e indígenas hasta lo colonial y moderno.

Por todo el país aún existen grupos indígenas que tienen muy arraigadas sus raíces y se sienten orgullosos de ellas. Estos grupos siguen practicando ciertas costumbres que nos pueden parecer ajenas, pero que son parte de nuestra esencia cultural.

Es cierto que la influencia de países vecinos como E.U.A, e incluso de países no tan cercanos como los europeos, han desplazado ciertos usos y costumbres de nuestro país. La constante modernización provoca que las personas quieran tomar como suyos ciertos estilos de vida parecidos a los de países más desarrollados. Sin embargo, existen características que siempre nos van a identificar como mexicanos.

El mariachi es claro ejemplo de lo que nos identifica, tanto el traje típico de charro como la música característica. Demuestra nuestro amor por la fiesta y la alegría que nos mueve. Así mismo, nuestras fiestas son llenas de color y por supuesto de comida que deleita a cualquier paladar.

No es extraño que califiquen al mexicano de envidioso y egoísta, pero cuando de fiesta se trata, no se escatiman gastos ni es importante las diferencias personales que haya entre los individuos. Lo importante es divertirse y por lo general venerar alguno de los tantos santos y vírgenes que el pueblo mexicano adora, ya que en su mayoría la población es católica.

Somos hospitalarios y cálidos sobre todo con gente que viene de fuera, ya sean extranjeros o peregrinos. Valores que se inculcan en la familia. La familia es un lazo muy importante en México, es el origen del afecto y la pasión que tenemos por hacer ciertas cosas.

Si bien nos tachan de flojos, no podemos negar que cuando de verdad queremos algo, esa “flojera” nos hace pensar en maneras más fáciles y rápidas para alcanzar nuestros objetivos y por ende nos hace más creativos.

Vivimos al momento sin tomar en cuenta las consecuencias que nuestros actos puedan traer. También solemos dejar todo al final y ser impuntuales. Pero vamos, todos tenemos defectos.

Otro aspecto que no podemos perder de vista es la forma en que vemos la muerte. No la vemos como algo malo o algo a lo que debamos temer. Por el contrario, nos burlamos de ella y hasta la hacemos parecer divertida. Siempre buscamos formas de divertirnos, hasta en el lenguaje. Los “albures” y el doble sentido es algo muy típico en nuestras tierras.

Tenemos memoria de elefante, o más bien, recordamos lo que nos conviene. Si hicimos algo bien, nos enaltecemos y encargamos de que nadie lo olvide. Por otro lado, si alguien nos hace algún mal, también no dejamos de recordárselo.

Somos muy escandalosos y poco conservadores, siempre nos queremos

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