Ser Feliz (Arturo Flores Rodríguez)

Articulo de cultura general

SER FELIZ (Arturo Flores Rodríguez).

sábado, 24 de diciembre de 2011

La felicidad humana generalmente no se logra con grandes golpes de suerte, que pueden ocurrir pocas veces, sino con pequeñas cosas que ocurren todos los días.

Benjamin Franklin

En estos días en que la dicha y la felicidad se desean por doquier, habría que señalar que la felicidad no es una condición, es ante todo una actitud; aunque cierto es que debemos de agradecer todos los comentarios que recibamos que nos deseen felicidad, sin olvidar y reconocer que la felicidad depende en un 99.9 % de la cada una de las personas.

Las personas felices invariablemente tienen una serie de actitudes que les distinguen de las que desafortunadamente no la poseen. Una persona feliz es aquella que olvida el pasado y vive el presente, tomando al primero como un gimnasio para el alma, como aquello que fortaleció su espíritu, haciéndole más maduro, compasivo e independiente. Las personas felices son las que perdonan lo ocurrido anteriormente y extraen las lecciones positivas que la experiencia les ha dejado. Viven el presente, haciendo solo aquello que esta en sus manos, aceptando que la vida fluirá y que la enfrentarán con entereza y ecuanimidad, dando lo mejor de lo que tienen a su alcance en esos momentos.

Una persona feliz es aquella que cultiva sus relaciones, pero que asimismo no necesita que los demás la completen, porque se siente muy bien a solas, no porque sea perfecta, sino porque por si misma busca la perfección. Las personas felices disfrutan de las relaciones que les permiten expresarse de una manera libre y natural; y con un simple no rechazan las relaciones abusivas, no importando de quien se traten.

Una persona feliz es aquella que se acepta a sí misma, que es sabedora de que para ser feliz no se debe de llenar un molde de perfección, ni proyecta una imagen diferente a lo que realmente se es, sabe que la única aprobación que necesita es la propia. Afortunadamente la ventaja de ser genuino es que se es reconocido por las personas que realmente le valoran.

Las personas felices usan sus talentos y hacen los que les llena el espíritu, porque les nutre su alma y la satisfacen; además cuentan sus bendiciones y agradecen lo que tienen en su vida.

Las personas felices cultivan una mente ecuánime y enfocada hacia las cosas productivas y positivas, por ello aprenden a reconocer los pensamientos negativos que les roban la paz y una vez descubiertos los arrojan de su mente.

Las personas felices disfrutan de las cosas pequeñas, porque saben que si la felicidad depende de las grandes cosas que se presentan escasas veces a muy pocas personas, las posibilidades de ser felices disminuyen enormemente. Lo anterior no quiere decir que abandonan

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