Sublevazión meztiza en Bolivia

Sublevación mestiza en Bolivia

Hubo un carnaval en Cochabamba (el pueblo de Oropesa), de alguna manera estimulado indirectamente por los criollos, comenzó con rumores de que el alcalde del pueblo mencionó que el mestizo sería marcado como indio, revisó el juez Manuel Venero (Manuel Venero). tuvo un problema porque fue acusado de infracciones laborales. Era el responsable de registrar las razas mestizas de Capinotta y Colavasi. Cuando llegó al pueblo, se encontró con que la población estaba en un estado de confusión y decidió buscar ayuda de Cochabamba

Aprovechando esta situación y considerando el vacío del poder público en la ciudad, los mestizos, junto con indígenas, criollos e incluso algunas figuras religiosas en Cochabamba, decidieron reunirse a las 12 del mediodía en el Cerro San Sebastián. El oficial del platero, el artesano Alejo Calatayud (capitán del desfile ese año). El ejército rebelde entró en la ciudad tocando instrumentos musicales y ondeando banderas rojas cantando "Viva el rey, el mal gobierno morirá".

Luego los rebeldes tomaron las piedras y cruzaron las calles del pueblo, se dirigieron a la prisión pública, donde los presos fueron liberados y poseían algunas armas, mientras el juez de nuevo juicio huía a Oruro, la milicia decidió contraatacar rápidamente para protegerlos. activo.

Los rebeldes regresaron al pueblo y atacaron nuevamente la prisión pública, atacando los negocios y casas de los emboscados. En el robo también participaron un pequeño número de figuras religiosas. Entre ellos, los agustinos salieron a la luz. El criollo Manuel de Avilés, el candidato a la alcaldía propuesto por los rebeldes, finalmente no fue aceptado por las figuras religiosas. Él nominó al candidato. Francisco El propio Rodríguez Carrasco fue poseído de inmediato. Tras asumir el cargo, Rodríguez ordenó la represión de los insurgentes, arrestó a Calatayud, luego lo ahorcó, lo mutiló y envió su cabeza al juzgado de La Plata.

Debido a estos servicios, Rodríguez recibió grandes honores del gobernador y la audiencia. Junto a los principales líderes de los disturbios, también fueron ejecutados otros 11 mestizos que lograron escapar de los nueve líderes condenados en rebeldía y se refugiaron en la mina Azirumarca, evitando así la rebelión de Charcas.

En un principio, los insurgentes solo pidieron la liberación del alcalde preso y el cumplimiento del real decreto que ordenaba la suspensión del cobro de asignaciones y el retiro de Villahermosa; si bien se cumplieron estos requisitos, se agregaron otros requisitos para hacer la situación. peor, cada vez más complicado.

Antes del evidente ataque al pueblo, después de que los piquetes de refuerzo de Koroiko fueran desarmados por los rebeldes; Villahermosa tomó la iniciativa de contraatacar. Alrededor de 30 rebeldes murieron y el resto se dispersó. Una acción puso fin al movimiento de Chulumani. En 1771 (noviembre), comuneros de la localidad de Jesús de Machaca se levantaron contra la autoridad del Corregidor Josef del Castillo y lo ejecutaron a él ya varios de sus colaboradores el mismo día que Todos Santos. En lo que a ellos respecta, según el plan anterior, comuneros de varios pueblos ocuparon Cacuvili, rodearon y hostigaron las casas de españoles y mulatos, algunos de los cuales fueron hechos prisioneros tras refugiarse en la iglesia del pueblo.

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