Terea Egger-Brass
Cecilia98911 de Febrero de 2013
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Con esto, afirmaba que la nación había
surgido con el irreversible curso de
hechos iniciado con la Revolución de
Mayo.
Como bien afirma Benedict Anderson,
la nación es una construcción colectiva.2
Esa creación estaba en sus primeros
pasos en 1810, cuando todavía no se
podía asegurar cuáles de los territorios
integrantes del Virreinato del Río de la
Plata se iban a plegar al proyecto, o
quedarían bajo la dominación de
Buenos Aires.
Si bien nuestro país recién en 1816
proclama la independencia como
Estado, quienes integraron la Primera
Junta de Gobierno Patrio estaban
concientes de su papel fundador de una
nueva nación. No lo podían exteriorizar
por una cuestión de conveniencia
política, por lo que cuidaron en los
documentos oficiales de mencionarlo.
Pero se ocuparon de instalar en la
conciencia ciudadana la importancia del
acontecimiento, mediante los festejos
de la Revolución: las Fiestas Mayas.
Desde el 25 de mayo de 1811, esta
celebración duró varios días, y, como en
las fiestas patronales coloniales, se
organizaron festejos por barrios. Las
Provincias Unidas del Río de La Plata
todavía no se llamaban Argentina, pero
la palabra aparece en la Marcha
Patriótica, luego denominada Himno
Nacional Argentino: “Al gran pueblo
argentino, ¡Salud!”. Desde ya, estaba la
confusión heredada por el nombre del
Virreinato, llamado indistintamente
Virreinato de Buenos Ayres o del Río de
la Plata, y argentino sería del Río de la
Plata, pero era usado más como adjetivo
calificativo que como gentilicio.
El nombre del “Río de la Plata” tuvo
origen debido a la existencia de las
minas de plata del cerro de Potosí, en el
Alto Perú. La explotación infrahumana
por parte de los conquistadores llevó al
estallido de la gran rebelión indígena de
Túpac Amaru (1780-1781). Los criollos
no lo ignoraban, y quienes estudiaron en
la Universidad de Chuquisaca, como
Mariano Moreno y Juan José Castelli,
eran sensibles al tema. La tesis doctoral
del futuro Secretario de la Primera Junta
fue la Disertación Jurídica sobre el
servicio personal de los indios. Castelli
festejó el primer aniversario de la
Revolución de Mayo en Tiahuanaco, con
los caciques indios, y rindió homenaje a
los antiguos Incas. Por cierto, estas
acciones no le jugaron a favor dentro de
la aristocracia altoperuana, máxime
conociendo la gran represión militar que
tuvo lugar con el levantamiento indígena
y con las rebeliones criollas de 1809.
Pero para los patriotas, el Imperio
Incaico era el pasado de grandeza previo
a la conquista española que se quería
evocar dentro de la nueva historia patria.
La Marcha Patriótica con letra de Vicente
López y Planes, aprobada por la
Asamblea Soberana de 1813 tres años
antes de la declaración de independencia,
era uno de los instrumentos para
forjar la identidad patria:
“Se levanta a la faz de la tierra
una nueva y gloriosa Nación”
“Se conmueven del Inca las tumbas
Y en sus huesos revive el ardor,
Lo que ve renovado a sus hijos
De la Patria el antiguo esplendor.”
El Congreso de Tucumán, cuando
declaró la independencia, afirmó que
nos investimos “del alto carácter de una
nación libre e independiente”. Y la
propuesta de Belgrano para
...