A Sangre Fría. 1959, Holcomb, Kansas

Noviembre 14 de 1959, Holcomb, Kansas; un pueblo casi desconocido por los habitantes de Estados Unidos e incluso por los citadinos de Kansas, conocido por traileros, conductores de tren y repartidores de cargamento, descrito como pueblo agricultor y ganadero con pocos habitantes, que viven sin eventualidades, un lugar donde no hay nada que ver, campos, río, carreteras, escuela, “un lugar seco”.

Entre los habitantes de Holcomb destacaba una familia: Los Clutter; no era la más rica del lugar, pero si próspera, viven de lo que deja la agricultura y el ganado de la granja “river valley”, metodistas y por su descripción, una familia modelo; el padre, Herbert, trabajador, sin vicios, completamente religioso, buen jefe, justo, solidario y comprensivo. La madre, Bonnie, es probablemente la única que no encaja en la perfección de la familia, una mujer depresiva, que a causa de esto no se hace cargo de su familia, tiene crisis nerviosas y visita los hospitales con frecuencia; pero no siempre fue así, cocinaba, jugaba con sus hijos, tenía sueños, pero después de su último hijo la depresión post parto la venció.

Bonnie y Herbert tuvieron cuatro hijos: Eveanna, la mayor, casada y con un hijo de diez meses, vive en Illinois. Beverly, la segunda, estudia enfermería, está comprometida y vive en Kansas City. Nancy, la penúltima, tiene 16 años, ayuda a sus vecinos, buena estudiante, se hace cargo de la casa y siempre tiene algo que hacer. Por último está Kenyon, el menor de todos, tiene 15 años, le gustaba leer, era buen cazador, malo para los deportes, era boy scout.

La madrugada del 15 de noviembre todo cambió, irrumpieron en la casa de la familia Clutter y asesinaron a los cuatro habitantes, nadie supo por qué, ni quién, pero fue un impacto para el pueblo, aquel lugar donde no pasaba nada, donde no había por qué preocuparse y la familia tan admirada y querida en el pueblo. Para Susan Kidwell, quien los encontró, fue un shock pues a quien vio primero fue a Nancy, que aún estaba en su cama.

Principalmente se podría sospechar de Bobby Rupp, el novio de Nancy, probablemente habían discutido, tal vez terminaron, en un arranque de celos o por venganza, no había como explicarlo, el da su declaración habla sobre la última vez que vio a Nancy y estuvo con su familia; la misma noche del asesinato, pero él se fue de ahí a las 10:30 de la noche y tenían planes para ver una película el domingo.

También está Bob Jhonson, el agente de seguros, había estado durante la tarde hablando con Herbert Clutter, hasta que acordaron lo del seguro; el señor Clutter temía que algo le pasara, convenientemente, el señor Jhonson tenía un cheque por el cual podía cobrar una gran indemnización, a nombre de Herbert Clutter, todo el día del asesinato.

Pero hay dos personas más, alguien externo a la familia y al pueblo, son dos descripciones que interrumpen por momentos, las historias que se cuentan sobre los Clutter, dos personas que parecen ligadas de alguna manera, pero no se conocen ellos y los Clutter.

Perry Smith: Hijo de una india cherokee y un irlandés, un hombre al que le gusta el arte, la literatura, la música, ha estado en prisión y se encuentra en libertad bajo palabra. No tuvo una buena infancia, sus padres se separaron, su madre se volvió alcohólica y él creció en orfanatos

Dick: un hombre que a percepción de Perry es muy masculino, fuerte, inteligente, frío. Casado y divorciado dos veces y con tres hijos, tiene un gran sentido de la familia y tuvo una buena vida, al igual que Perry ha estado en prisión, pero se le permitió salir con la condición de vivir con sus padres.

Al día siguiente del crimen, aparecen algunos amigos de la familia que limpian las manchas que había en la casa, comenzaron las investigaciones, pero de nuevo se divide la historia y aparecen Perry y Dick, que ahora buscan cómo conseguir dinero y

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