Del Amor Y Otros Demonios

Gabriel García Márquez, uno de los escritores de habla hispana más talentosos de todos los tiempos; reconocido por su obra “cien años de soledad”, obra por la cual ganó el Premio Nobel de Literatura. Formó parte del movimiento literario llamado “boom latinoamericano”, que se originó a mitad del siglo XX por varios escritores latinoamericanos reconocidos mundialmente. García Márquez nos escribe Del amor y otros demonios.

Se dice que García Márquez se basó en unos de sus trabajos de periodismo, en un convento que iba a ser demolido para construir un hotel de cinco estrellas. Donde estaban sacando los ataúdes de una de las criptas del templo, en una de ellas había una lápida con el nombre de ni más ni nada menos que Sierva María de Todos los Ángeles, donde el cadáver de la niña aun poseía la cabellera intacta de un color cobrizo:

(…) la cabellera espléndida medía unos veintidós metros con once centímetros (11)

La novela de género realismo mágico, describe a la sociedad de la época colonial, así como las costumbres tanto de españoles como de esclavos negros africanos como el papel que juega la religión en las vidas de la gente.

El racismo era común en la época colonial, por ejemplo, en México la sociedad estaba dividida en castas, donde los españoles eran los de primera prioridad, luego los criollos y mestizos, indígenas, y al final los esclavos traídos de África. Éstos últimos eran comercializados como bienes comunes entre los adinerados. Al nacer Sierva María, se le enredó el cordón umbilical en el cuello y todos pensaban que no iba a vivir, salvo Dominga de Adviento una de las esclavas, que a la vez era cristiana, le prometió a la virgen que si vivía la niña no le cortaría el cabello hasta su matrimonio.

Dominga de Adviento era una esclava que se convirtió al cristianismo pero conservaba sus creencias de origen africano, era como un puente entre culturas. Los padres eran desatentos y Dominga de Adviento se encargó de criar a la niña, le enseñó a hablar yoruba, Congo, y mandinga; así como las costumbres y tradiciones africanas.

En un día que Dominga llevó a Sierva María al mercado para hacer los preparativos de la fiesta de cumpleaños número doce de la niña, pasa un perro rabioso mordiendo a varia gente incluyendo a Sierva María en su tobillo:

Un perro cenizo con un lucero en la frente irrumpió en los vericuetos del mercado el primer domingo de diciembre, revolcó mesas de fritangas, desbarató tenderetes de indios y toldos de lotería, y de paso mordió a cuatro personas que se le atravesaron en el camino. Tres eran esclavos negros. La otra fue Sierva María de Todos los Ángeles, hija única del marqués de Casalduero, que había ido con una sirvienta mulata a comprar

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