El Niño De La Pijama De Rayas

El niño de la pijama de rayas es un libro que después paso a ser un filme, que trata básicamente de la relación que mantienen un niño hijo de un general alemán nazi y un hijo de un judío en un campo de concentración, ellos desconocen al principio porque el niño judío porta una pijama de rayas, es una buena película aunque un poco triste en el final.

Narra la historia de Bruno un niño de 9 años, aproximadamente, que le encantan las aventuras, vivió durante la revolución Nazi en 1942, el desconoce la trágica situación por la que está pasando él y su país, cuenta como descubre una gran amistad desinteresada e inocente con Shmuel, un niño que vive dentro del campo de concentración judío del que está encargado su padre.

Bruno, al principio, vive en Berlín con su aun inocente hermana, sus padres y una criada, su padre era parte del ejército alemán y recibe un asenso a comandante u tiene que mudarse de inmediato a Auchviz, ya que nadie le había avisado a Bruno, este se pone muy triste ya que extrañara a sus amigos y a sus abuelos, sus padres realizan una cena de despedida en la cual sus amigos y familia están invitados para celebrar, su padre del comandante parece muy orgulloso de su hijo, mientras su madre se nota muy molesta y decepcionada por la mentalidad de su hijo. Al día siguiente la familia inicia su viaje sin saber que ese sería el último que realizarían junto a Bruno.

Al llegar a su nueva casa, Bruno se quedó asombrado, era muy deprimente y sombría y más pequeña que su anterior casa y no había nada más que una “granja” en los alrededores que lograba ver desde la ventana de su habitación, aunque no le agrado la casa tenía que acostumbrarse a ella ya que era su nuevo hogar. Pasaban los días, Bruno no sabía qué hacer para des aburrirse y un día se le ocurrió construir un columpio, pidió ayuda al oficial Kotler para conseguir un neumático y el oficial ordeno a Pavel, un judío que era un criado que les hacía la comida, que llevara a Bruno donde la chatarra para buscar un neumático, al entrar donde su madre anteriormente le había prohibido noto que era donde Pavel vivía y se percato de una pequeña ventana que estaba en lo alto del cuarto, tomo un neumático y se fue a construir su columpio. Después de jugar un rato, Bruno se cayó y Pavel acudió a su ayuda y mientras curaba su herida entabló una conversación con Bruno, le conto que él había sido médico antes de llegar ahí. Más tarde llego la madre del Bruno y ésta le agradece su ayuda a Pavel, pero dirían al comandante que ella le había curado y no él para evitarle problemas por tener contacto con el niño.

Una tarde, Bruno decide iniciar una aventura para descubrir hasta donde llegaba el alambrado de como aquella granja que veía desde la ventana de su cuarto, así que emprendió el viaje que consistía en ir hasta la ventana en el cuarto de Pavel, cruzarla y llegar hasta ella, grande fue su sorpresa al llegar pues noto una pequeña sombra que resulto ser un niño se su misma edad. Bruno y el niño empezaron a hablar, el niño se presenta como Shmuel, un nombre raro para Bruno, y poco a poco se hicieron amigos.

Bruno creía que toda la gente dentro del alambrado eran granjeros y Shmuel le aclara que no, que usan esas “pijamas” por que los soldados les quitaron sus ropas, Bruno estaba intrigado y todos los días, cada tarde, iban hasta ese mismo punto de la alambrada donde se encontraba con su nuevo amigo.

Bruno siempre mantuvo en secreto la existencia de Shmuel ya que creía que no se lo iban a tomar bien en casa y tenía miedo de perder a la única persona con la que podía entretenerse y jugar en ese lugar debido a que con su hermana Gretel no se lo pasaba bien pues poco a poco se fue madurando con la idea de que los judíos eran solo un objeto negativo para sí país aunque ella no lo entendiera del todo.

Pasaban los días y sus padres deciden contratar a un tutor para Grace y Bruno. Su nuevo tutor les enseñaba parejo a ambos, les enseñaba lo malo hacían los judíos, el estado en el que se encontraba su país, su hermana de Bruno parecía más una adulta y Bruno no mostraba interés alguno en sus lecturas del tortor pues el apreciaba mas las aventuras que la guerra. Bruno visitaba a Shmuel y avises le llevaba alimentos y lo único que hacían los dos niños era hablar sobre su vida ya que Bruno se encontraba fuera y Shmuel dentro. Hablaban sobre las diferentes vidas que llevaban entre si y Bruno se dio cuenta de que el se quejaba por cosas que ni al caso mientras su amigo tenía que conformarse ya que no podía objetar. Un día Bruno encuentra Shmuel en su casa, se le había asignado la tarea de limpiar copas, Bruno le ofrece un bocadillo y Shmuel acepta, pero para su des fortunio llega el teniente Kloter acusando a Shmuel de robar el bocadillo, el niño argumenta que Bruno fue quien se lo dio y este aterrado ante el sobresalto del teniente niega haberle dado el bocadillo y Shmuel fue castigado por su falta. Bruno, muy arrepentido, fue donde Shmuel para disculparse, estaba muy preocupado pues hace 2 días que Shmuel no estaba donde siempre, pero al tercer día de lo sucedido Bruno logra disculparse pues son quería poder a su único amigo.

Después de que la madre de Bruno conoce la verdadera misión de su marido en el campo de concentración, ella descubre que en el campo están asesinando a los judíos y que lo que huelle ella y sus hijos sale de un crematorio del mismo campo empieza a tener problemas y peleas con su marido. Un día, durante una cena el padre de Bruno recibe una llamada avisando que fueron bombardeados y que su Madre había muerto en dicho atentado, pues resulta que ella era judía y por esa razón estaba en desacuerdo con el trabajo de su hijo. Tras este suceso, sus padre no creen que ese sea un buen lugar para criarlos y su madre e presi pita y elije partir a otro lugar donde más tranquilo y adecuado para ellos en Berlín.

El día siguiente partirían a su nueva casa, regresarían todos menos el comandante, ya que este se había ganado mucha empatía con los soldados de mayor rango, al darle la noticia

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