Enrique Buenaventura y los papeles del infierno

Enrique Buenaventura y los papeles del infierno.

Enrique Buenaventura fue un destacado dramaturgo colombiano. Se dedicó a la dirección escénica, y a la formación de actores, así como también a la actuación y a la dramaturgia. De espíritu aventurero, desde temprana edad consolidó su trabajo durante cinco largas décadas, aprovechando su talento de investigador, escritor y versionista, el cual le hizo brillar con luz propia y obtener prestigio en el inmenso mundo de las Artes, particularmente en el entorno teatral.

Fue un ícono de la dramaturgia colombiana nacido en Cali.  Estudió Artes plásticas en la misma ciudad y luego se mudó a Bogotá para estudiar Filosofía en la Universidad Nacional de Colombia. Fundó el Teatro Experimental de Cali el cual también dirigió hasta sus últimos días de vida. También fue ensayista, narrador y poeta. Dirigió durante numerosos años la escuela de teatro del Instituto Departamental de Bellas Artes. Realizó una gira por varios países latinoamericanos, para luego dedicarse a una importante labor en el teatro colombiano, tras lo cual le otorgaron el premio “Casa de las Américas”. Obtuvo el título de “Doctor Honoris Causa” en la Universidad del Valle, al ser el fundador fundador del “Plan de Arte Dramático” de la misma. Dedicó parte de su vida a la aventura y a los viajes, y experimentó los más diversos oficios, desde marinero hasta pintor, pasando por actividades como el periodismo y la cocina, pero su mayor vocación siempre fueron las tablas, a las que se dedicó de lleno. Fue influenciado por el dramaturgo Bertolt Brecht con su propuesta de teatro épico. Sus obras fueron traducidas a varios idiomas.

Su labor como autor, director y maestro fue muy importante para el desarrollo del teatro en Colombia. Obras como “A la Diestra de Dios Padre, Los Papeles del Infierno, La orgía y el menú” son hoy en día piezas clásicas del teatro nacional de Colombia. Uno de sus valiosos aportes al teatro fue su metodología para el montaje y elaboración de textos, el cual marcó tendencia entre teatreros colombianos y latinoamericanos quienes acudieron a dichos métodos para producir sus propios montajes. Su producción como pintor y poeta fue gran calidad estética. El teatro, la pintura narrativa y la poesía fueron usados como medios para dialogar con su entorno y consigo mismo.

Los papeles del infierno son una recopilación de obras escritas por él.  Se conforman por “El Entierro, La Orgía, La Maestra, La Tortura, La Autopsia, La Audiencia y La Requisa”. El tema central de la recopilación trata sobre los tipos de violencia ejercidos en Colombia durante los años cincuenta y sesenta. Debemos entender este planteamiento, a partir de unos términos propuestos por filósofo y psicoanalista Lacaniano Slavoj Žižek los cuales son: violencia subjetiva, objetiva, simbólica y sistémica.

En [“Violence: Six Sideways Reflections (2008)”] Žižek propone una especie de tipología que incluye estos tipos de violencia. La violencia subjetiva es aquella que puede parecer para nosotros más familiar o evidente, como la violencia del crimen, el descontento popular y las guerras. Este tipo de violencia se nos hace fácilmente reconocible, y es vista generalmente como la perturbación del estado normalmente pacífico de la cotidianidad. La violencia subjetiva es visiblemente practicada por un agente reconocible, y generalmente suele acaparar la atención mediática. Para Žižek este tipo de violencia es una manifestación muy obvia de la corriente más oculta de la violencia, y tiene a cargo determinar la idea misma del orden cotidiano. En este segundo nivel es donde se da espacio a la violencia objetiva, correlación oculta de la violencia subjetiva. Para Žižek existen dos tipos de violencia objetiva: la simbólica y la sistémica. La violencia simbólica podemos rastrearla en formas de representación o lenguaje (referentes al racismo o sexismo implícito, es decir, lenguaje discriminatorio). La violencia sistémica en cambio proviene de las estrategias represivas de dominación y explotación encontradas dentro de los sistemas políticos y económicos, que requieren una crítica para hacer visible su funcionamiento silencioso y sus consecuencias.

Al mezclar estos tipos de violencia, obtenemos una caracterización completa del panorama de aquellas épocas en Colombia, pues el país en ese momento atravesaba una pelea interna constante; no solo política (entre liberales y conservadores) sino también ante las rebeliones de grupos al margen de la ley o guerrillas, y de sindicatos de trabajadores, que presionaban y ponían en jaque a las empresas exigiendo mejores condiciones y remuneraciones para el trabajo. En Los Papeles del infierno, la obra que más devela esto es “La Requisa”, como podemos ver en el siguiente ejemplo:

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