Herodoto LIBRO VII.

LIBRO VII.

Cuando el hijo de Histaspes se enteró de la batalla desarrollada en Maratón, fue ante el rey Darío mucho más enfurecido de lo que estaba anteriormente y dispuesto a hacer una expedición contra la Hélade. Entonces envió mensajeros a todas las ciudades, las ordenó que preparan un ejército, que tuvieran muchos más suministros que antes y con todo, se reclutaban los mejores soldados para la expedición contra la Hélade.

Pero al cuarto año los egipcios siendo esclavizados por Cambises, se separaron de los persas. Y después mientras Darío estaba en camino contra Egipto y Atenas, tuvo lugar un enfrentamiento entre los hijos de Darío por la hegemonía. Finalmente, Darío decidió designar rey a su hijo Jerjes, hijo de Atosa. Poco después de esto, Darío murió y no lo fue posible vengarse ni de los egipcios ni de los atenienses.

Jerjes no era muy partidario de la expedición contra la Hélade pero finalmente Mardonio, que era su mano derecha le convenció. Una vez que sometió a Egipto y lo hizo mucho más esclavo de lo que era en tiempos de su padre, se lo confió a su hermano Aquemenes.

Después, Jerjes decidió antes de la expedición contra Atenas convocar una asamblea de los persas más nobles para informarse de sus pareceres y él decir ante todos lo que quería hacer. Mardonio le apoyó en lo que dijo pero hubo algunos hombres como por ejemplo su tío Artabano que no estaban a favor de la expedición, entonces Jerjes le condenó a no poder ir con él en la expedición y tener que quedarse con las mujeres. Pero finalmente reflexionó y decidió hacer caso a Artabano a pesar de un sueño que tuvo en el cual un hombre le decía que no debía cambiar de opinión y que debía seguir adelante con la expedición. Pero volvió a soñar lo mismo unas cuantas veces más entonces habló con Artabano y le pidió consejo y este le dijo que solemos soñar las cosas en las que pensamos, pero después Artabano tuvo un sueño parecido. Entonces Jerjes decidió finalmente después de la toma de Egipto poner en marcha la expedición, la cual no fue comparable a ninguna expedición anterior hecha por su padre.

Toda la infantería se dirigía hacia Sardes, habiendo partido de Critala, después fueron a Celenas donde Pitio les trató muy bien tanto a Jerjes como a su ejército. Desde Frigia se adentró en Lidia después llegó a Sardes.

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