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Libro el tùnel: Uno mata por amor


Enviado por   •  27 de Febrero de 2016  •  Reseñas  •  1.240 Palabras (5 Páginas)  •  277 Visitas

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Uno mata por amor

En estas líneas quiero plasmar que un amor intenso y no correspondido nos puede llevar a la muerte, pero no una muerte simbólica sino una muerte totalmente literal. Este diario comenzó siendo eso, un diario, pero creo que una pequeña introducción no haría mal, una pequeña idea general de lo que soy yo.

Comenzaré por presentarme, mi nombre es Juan Pablo Castel, reconocido pintor, el que amaba intensamente a María Iribarne. Considero que soy una persona deprimente que prefiere recordar lo malo del pasado y es que el presente es igual de catastrófico, ¿cómo no recordar todo lo malo? Las masas prefieren bloquear estos recuerdos y solo fijarse en lo poco bueno que han tenido en sus miserables vidas, afortunadamente yo no soy parte de las masas, pero tampoco es agradable tirarme en un rincón de mi taller cada que leo una nota en el periódico.

Si bien no escribo estas líneas por vanidad, he llegado a la conclusión que será inevitable que piensen esto y como desde hace mucho tiempo me importa muy poco lo que piensen de mi, entonces lo dejaré a su consideración. Nadie está exento de esta bajeza humana y menos yo. Si bien he dicho que ésta no es la razón por la que escribo, si soy capaz de aceptar que lo hago por mero orgullo y soberbia.

Pensaba solo poner las partes de mi diario que hablan de cómo pasaron los hechos, sin meter demasiados detalles pero dentro de mí quería que mucha gente me leyera, con la vaga ilusión de que al menos una sola persona pueda entenderme. Solo he conocido a una persona que pudo haberme entendido, aquella que pensaba que sería mi principio y final, aquella que maté…

Nadie conoce mi historia, trataré de darme a entender en todo momento, pero al final entenderé si no me comprendes.

5 de mayo de 1948

Mi exposición en el Salón Primavera de 1946 ha dado inicio, como siempre los críticos tratando de elevar su ego describiendo mis cuadros y diciendo lo mismo de siempre, que están bien estructurados, que son intelectuales, cosas que no tienen sentido con lo que he querido hacer. No comprendo como estas personas se sienten con el derecho de criticar mi arte, los detesto demasiado pero a lo largo de mi carrera he aprendido a lidiar con ellos.

He estado parado el día de hoy cerca de una de mis pinturas, la cual titulé “Maternidad”, en ella figura una mujer que observa a un niño jugar, pero en el fondo, en una pequeña ventana, se puede observar a una mujer solitaria que se encuentra sentada viendo hacia el mar. Quería comprobar mi teoría de que nadie, ni siquiera los críticos, serían capaces de ver en esa pequeña escena algo más que mera decoración. Tenía la esperanza de que estuviera equivocado y mientras mis ilusiones iban en pique, una mujer apareció.

Se paró frente a mi pintura y parecía no ver la primera escena, se concentró en la mujer de la ventana. Estoy seguro de que se desconectó completamente del mundo material, en su mirada se reflejaba una concentración total, me pareció algo realmente hermoso.

Esta actitud suya me llenó de desconcierto, esperaba el momento adecuado para acercarme a aquel ser que, por intuición, sabía que había logrado comprenderme más que cualquier otro. Por mi inseguridad no pude acercarme a ella y hoy que escribo estas líneas, me doy cuenta del gran error que he cometido, ahora no podré encontrarla, me siento nervioso, triste y descontento. ¿Por qué soy tan cobarde?

Lo único que puedo hacer es plantarme todos los días en el mismo lugar para ver, si de puro milagro, la vuelvo a ver. El día que pase esto, no daré marcha atrás y le hablaré.

12 de julio de 1948

Ha clausurado el  salón y hasta el momento no he tenido contacto con ella, me siento tan frustrado, no puedo creer que no haya tenido el valor de hablarle aquel día. Ahora tendré este sabor amargo en la boca para toda mi vida.

Me parece increíble que este cuadro junto con aquella mujer hayan ocupado mis pensamientos al cien por ciento. He de confesar en este, mi pequeño espacio personal, que ahora todas mis pinturas están ligadas a esa mujer, todas y cada una de ellas está inspirada en ella. Me ha vuelto loco esta situación, quiero encontrarla pero… ¿cómo?

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