PROBLEMAS DE LA LEXICOLOGIA JURÍDICA FRENTE A LA COMUNICACIÓN

PROBLEMAS DE LA LEXICOLOGIA JURÍDICA FRENTE A LA COMUNICACIÓN

Existen diversas dificultades entre el lenguaje jurídico y el lenguaje común que

se pueden expresar en vicios del lenguaje en el discurso.

Estas son costumbres

del orador que suelen desviar la atención del público. Sin embargo, lo imperativo y que se debe evitar en todo momento es que el público no entienda el discurso debido a que se está utilizando un

lenguaje incomprensible para él.

Es muy probable que el mal uso del lenguaje en ideas incomprensibles por el rebuscamiento de la expesión, el tema puede resultar confuso o impreciso o se pierda el interés del público porque el argumento es demasiado largo y detallado

El legislador se enfrenta a problemas graves con respecto a la informática y las telecomunicaciones, como atender a la reglamentación del uso y explotación de los sistemas de información.

Es por ello, que debemos de comprender en qué consisten estos problemas ya que se generan con una gran frecuencia, una vez que comprendamos las problemáticas se puede llegar a la conclusión y solución de éstos.

Además del problema de legislar sobre la materia informática como la protección de la propiedad intelectual de los programas de cómputo, los problemas derivados de las nuevas tecnologías computacionales y principalmente su valor probatorio, entre otros aspectos, los legisladores deben resolver el problema lexicológico implícito, el cual resulta ajeno y, en la mayoría de los casos, desconocido.

Cabe señalar que al derecho le hace falta evolucionar en el empleo de las nuevas tecnologías para crearlo y aplicarlo. Las tecnologías informáticas o de información, entendidas como “la aplicación del conjunto de estudios e instrumentos derivados de la informática al derecho”, permiten la autorización de los procesos que son de aplicación en los diversos campos del derecho, como por ejemplo: el problema del retraso de nuestra legislación.

Éste es un problema grave en materia de informática en nuestra nación, el grave retraso con respecto a países que compiten con nosotros en el conglomerado internacional.

Este problema, entre otros aspectos, surge del hecho de que no contamos con un régimen jurídico de protección eficaz en torno a los programas de cómputo; por tal motivo, es urgente una revisión profunda y completa de nuestra legislación en materia de propiedad intelectual y, sobre todo, de la normativa subsidiaria a fin de que se tengan los mecanismos eficaces para su debida protección.

Es evidente que para el logro de lo anterior, las leyes deben enfrentar una serie de problemas por resolver como son: la licitud y confidencialidad de la información, la piratería, la

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