Procedimiento judicial

CAPITULO I

TITULO I

LA CRISIS

El procedimiento judicial tiene su propia ética que no puede encaminar en dirección opuesta de la ética pública, pero en nuestro medio el procedimiento ha lesionado la ética pública, esto ha conducido a perder el respaldo de la opinión ciudadana. El procedimiento judicial revela la fortaleza de la administración de justicia, así como esta revela el grado de civilización que ostenta una nación.

La justicia a través del procedimiento judicial tiene la obligación de reducir la fuerza única y última razón, mejor dicha a eliminarla.

Al interior de la sociedad ecuatoriana no todos los grupos que la integran participan en igualdad de condiciones ni tienen las mismas oportunidades de influir en el desarrollo y organización de la sociedad.

La administración de justicia que se distribuye irregularmente antes de ser fuente de seguridad es de conflicto.

El cambio no solo es responsabilidad de los dirigentes autoridades o grupos de poder, para lograr el cambio deben actuar todos los sectores de la sociedad y contribuir en la medida de sus responsabilidades.

TITULO II

EL CAMBIO

Las causas que ingresan muchas veces no terminan y las que tienen mayor suerte tardan años en resolverse, la desorganización del aparato judicial y el alto costos de sus trámites, el desprecio mutuo entre los judiciales y los usuarios, la inseguridad y la desconfianza en la aplicación de la ley, el mal aspecto de las oficinas, el descuido y el desorden en los archivos, la pobreza en los instrumentos de trabajo.

La sola crítica no podrá transformar nada sin que aparezca una idea fuerza y un grupo vigoroso, dinámico y rebelde que imponga un cambio.

TITULO III

LAS PERSONAS CON RELACION A LOS JUECES

Es irresponsable que los legisladores elijan a los ministros de la Corte Suprema y que los ungidos designen a los juzgadores de menor jerarquía, es perjudicial un sistema de designación como el descrito pues se convierte en un acto político de un organismo político.

Hay que crear una tendencia que se mueva hacia la elección popular de los jueces. No hay que temer que los jueces tengan ideas políticas, argumento que se opone a esta forma de elección, sino que se politice la justicia que es otra cosa.

No deben permanecer en la judicatura jueces deshonestos o ignorantes, ninguno de los poderes del estado tiene mayor exigencia de contar con hombres capaces y honestos como el judicial.

CON RELACION A LOS ABOGADOS

Aun cuando la universidad formara los mejores abogados, con el régimen de profesionalización más exigente, con una preocupación severa para que obtengan los más altos y modernos conocimientos que sea posible, no servirá de nada si no coincide todo esta posible admirable formación con una sólida formación ética.

Si una parte del tiempo de los abogados dedicaran a buscar avenimientos entre las partes, llegarían a los juzgados menos causas que las que hoy ingresan.

CON RELACIÓN A LOS USUARIOS

Hay usuarios que en defensa de sus intereses recurren a subterfugios, a pequeñas o grandes inmoralidades, a cambio el estado de las cosas antes, durante y después de un trámite o una contienda judicial.

La administración de justicia pretendiendo revelar su condición de igual para todos, termina siendo la más desigual, con la que se consagran grandes privilegios, “no existe una desigualdad mayor que la de tratar las desigualdades de un modo igual”.

Se habla de democracia, unidad, igualdad, etc., que terminan siendo `palabras sin sentido, sin contenido, al menos para los presos sin sentencia, para los ofendidos por jueces deshonestos, para los pobres que no tienen dinero para llegar a los juzgados. Toda reforma se orienta a gratificar a jueces, abogados, funcionarios y a veces gobernantes que quieren mediatizar reclamos, pero no se ha buscado garantizar la justicia.

CAPITILO II

TITULO I

PROPIEDADES DEL PROCEDIMIENTO JUDICIAL

Cada régimen defiende a través del procedimiento judicial la forma como a su juicio debe funcionar la sociedad. No sólo el estado ha sido inepto para ordenar la sociedad sino que la función de administrar justicia, que es una de las primordiales, contribuye al desorden social, a legitimar a la injusticia, a sostener y profundizar las diferencias, es decir es un procedimiento antidemocrático. Nuestro procedimiento judicial desalienta al pobre a reclamar o defender su derecho, el rico puede suplir su ignorancia con la ayuda de un consultor legal, el pobre en cambio no tiene medios para sustraerse el peso de su ignorancia.

TITULO II

REPRESENTANTE DE LA CULTURA DE UN PUEBLO

El procedimiento judicial representa la cultura de una nación. Debe ser la demostración del desarrollo de un pueblo en la búsqueda de solución a sus necesidades urgentes, especialmente en la búsqueda de justicia.

La forma de buscar justicia, con los procesos, con el conjunto de actos judiciales y el que tenemos, inútil para satisfacer las necesidades de la vida, no representa nuestras culturas. La cultura fortalece las inhibiciones para lo cual recurre a la sublimación de valores, les pone de moda, les gratifica.

TITULO III

EXPRESIÓN DE UNA CONCEPCION SOCIAL

Cada persona se forma una idea o se hace conceptos del pequeño grupo que le rodea o de la totalidad de los seres que viven en el país así como de la organización que han adoptado o propone científica o empíricamente modelos de organización, esto es lo que se llama concepción social.

No se refiere también a regalas o principios entrelazados entre sí que tienen la tarea de mantener a su vez la relación ordenada de los seres humanos.

No hay sociedad sin un sistema que la organice, le represente, le identifique y cuyos componentes, personas, regalas, principios, procedimientos, tiene que ser funcionales.

Todos tienen desconfianza de la justicia, de la forma como se administra, de los jueces, de los procedimientos, condenan la demora, la inseguridad, el costo. Cuando el poder judicial no es capaz de expresar nada, de arreglar nada, la desconfianza no solo embarga a

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