QUIEN DOMINA EL MUNDO

NOAM CHOMSKY

¿Quién domina el mundo?

El mundo es demasiado variado y complejo para que eso sea posible.

Desde el final de la Segunda Guerra Mundial, EEUU ha sido de lejos el primero y sigue siéndolo. Continúa dictando los términos del discurso global de temas variados.

La responsabilidad de los intelectuales, el retorno

¿Quiénes son los intelectuales?

Intelectual es el que se dedica al estudio y la reflexión crítica sobre la realidad, y comunica sus ideas con la pretensión de influir en ella, alcanzando cierto estatus de autoridad ante la opinión pública. Proveniente del mundo de la cultura, como creador o mediador, interviene en el mundo de la política al defender propuestas o denunciar injusticias concretas, además de producir o extender ideologías y defender unos u otros valores

La intelectualidad es el colectivo de intelectuales, agrupados en razón de su proximidad nacional (intelectualidad española, francesa, etc.) o ideológica (intelectualidad liberal, conservadora, progresista, revolucionaria, reaccionaria, democrática, fascista, comunista, etc.).

Como referente de intelectuales podemos usar a los ''Dreyfusards'' quienes transmiten la imagen de defensores de la justicia que se enfrentan al poder con valor e integridad. Los ''Dreyfusards'' fueron condenados de manera implacable por la corriente principal de la vida intelectual, en particular por las grandes figuras ''Anti-Dreyfusards'' (Maurice Barres; Ferdinand Brunetiére, para quien <> que se atrevían a << tratas de idiotas a nuestros generales, de absurdas a nuestras instituciones sociales y de malsanas a nuestras tradiciones>>

Intelectuales: Dos categorías

-ver manifiesto de los 93-

Los 93 por un lado, y por el otro sus homólogos quienes fueron más allá de la auto adulación.

Estos últimos declararon que la guerra llevaba el nombre de los Intelectuales.

Reversión de valores

La distinción entre las dos categorías de intelectuales proporciona el marco para determinar la <>. La expresión es ambigua. ¿Se refiere a su responsabilidad moral como seres humanos decentes, en una posición en la que pueden usar su privilegio y su estatus para fomentar las causas de la libertad, justicia, misericordia, paz y otras cuestiones sentimentales? ¿O se refiere al rol que se espera que desempeñen como intelectuales tecnocráticos y orientados a la política de servir al liderazgo y las instituciones establecidas en vez de derogarlos? Como el poder por lo general tiende a imponerse, los de la segunda categoría son considerados intelectuales irresponsables, mientras que los primeros son desestimados o denigrados; en este país.

Por ejemplo, los intelectuales de la Antigua Unión Soviética defensores de los valores eran percibidos por Estados Unidos como disidentes respetables, mientras que no teníamos más que desprecio para los apparatchiks y los comisarios, intelectuales tecnocráticos y centrados en la política.

O de manera similar, honramos a los valientes disidentes iraníes y condenamos a aquellos que defienden a las instituciones religiosas.

En este sentido, el respetado término disidente se utiliza en modo selectivo. Por supuesto, no se aplica con sus connotaciones positivas a intelectuales defensores de los valores en Estados Unidos o a aquellos que en el extranjero combaten tiranías apoyadas por Washington. Tomemos el caso de Nelson Mandela, que no se eliminó de la lista de terroristas del Departamento de Estados hasta 2008, por lo que hasta esa fecha no pudo viajar a Estados Unidos sin autorización especial. Veinte años antes, era el líder criminal de uno de los grupos terroristas más notorios del mundo.

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