ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

CARTA AL OLVIDO


Enviado por   •  11 de Junio de 2017  •  Apuntes  •  1.083 Palabras (5 Páginas)  •  268 Visitas

Página 1 de 5

CARTA AL OLVIDO

María-Aún recuerdo la vez que te conocí, aún recuerdo aquella tarde en que yo me encontraba sola. ¿Cuál es tu nombre?-preguntaste sin avisar-¿De verdad?, ¿En serio así fue como todo comenzó? ¿No pudiste haber dicho un hola para empezar?

 -Recuerdo que llegaste a sentarte a lado mío sin siquiera conocerme, empezaste a sacarme plática. Jurabas y jurabas que eras nuevo en la ciudad, jurabas y jurabas que no conocías a nadie. Supongo que solamente querías hacerte el interesante.

-Recuerdo que tenías un toque un tanto misterioso, no te voy a mentir. Pero me gustaba, no se el cómo ni por qué pero me gustaba.

-En unos cuantos días me sentía como si te conociera de toda la vida, me hiciste confiar en ti en muy poco tiempo.

-Los días pasaron y nosotros nos frecuentábamos cada vez más seguido, nos veíamos cada tarde en el mismo parque, en la misma banca, a la misma hora. ¡Carajo! Ese era nuestro momento, cada segundo a tu lado me sentía especial, sentía como si pudiera confiar en ti en todo momento, el tiempo se paraba.

-Empecé a sentirme más y más atraída por ti, aprendí de memoria cada gesto de tu rostro, el sonido de tu voz, memorice cada una de las líneas de tu mano, incluso recordaba con exactitud la curvatura de tus labios al sonreír, creí conocerte tanto que incluso podría recordarte quien eras, por si lo olvidabas. Creí conocerte y que tú me conocías a mí.

-Alguna vez alguien en algún lugar dijo que el amor es como un cigarrillo, que el fuego y el tiempo lo consumen, al final se acaba pero no importa, porque siempre puedes encender otro. Yo tengo otra teoría. El amor es como un cigarrillo, por alguna razón lo fumas aún que no la tengas muy clara, sabes que te está matando lentamente pero aun así es lo único que te da paz, en cuanto le tomas el gusto empiezas a fumar cada vez más y más y más y más y de pronto te das cuenta que te has vuelto un adicto. Tratas de convencerte a ti mismo de dejarlo, te metes ideas en la cabeza pues sabes que es malo para ti. Pero sin importar cuanto hagas, volverás a él y el volverá a ti, sin importar cuánto daño te haga.

-Creo que los dos  fuimos dañinos una para el otro.

-Conforme pasaba el tiempo fuimos sabiendo mejor como era el otro, tú eras un joven Romeo, eras ingenuo, crédulo, impulsivo, demasiado emocional pero aun así todo lo hacías con el corazón en la mano. Yo en cambio, yo no fui precisamente una Julieta, yo también fui ingenua, yo también fue estúpida, yo también creí que había encontrado al amor de mi vida en un santiamén, pero Julieta era correspondida.

-Más bien yo diría que había pasado a ser tu fiel seguidora, estaba embelesada con tu imagen, tu palabra era la única verdad en la cual yo creía, yo te veía como mi todo, yo te veía como lo único en mi vida.

-Recuerdo la primera vez que te sentí mío, recuerdo que era una tarde tal y como todas las demás, tú me habías regalado una rosa, una rosa roja que para mí significaba que me entregabas todo en un simple gesto de amor puro y verdadero, de verdad era una estúpida.

-Recuerdo también la primera vez que sentí que te perdía, que irónicamente fue la misma tarde que te sentí mío, estábamos juntos en nuestra banca, tal y como todas las tardes y ahí fue donde te empecé a conocer de verdad. La recuerdo guapa, la recuerdo provocativa, te recuerdo a ti perdido en su figura, recuerdo el vacío que sentí al ver como la preferías y recuerdo alégrame a la vez que comenzaba a creer en el karma al ver cómo te pagaban con la misma moneda.

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (6 Kb)   pdf (86.5 Kb)   docx (12.4 Kb)  
Leer 4 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com