Gran Pez

“El Gran Pez”

Es la historia de un hombre llamado Edward Bloom que posee una asombrosa capacidad de relatar sucesos de su vida pero de una manera muy particular en la que los detalles superan los límites de la realidad.

Su hijo es un periodista que no comprende la tendencia de su padre por embellecer estos sucesos. Al paso de algunos años en los que ellos no tenían contacto alguno, se vuelven a encontrar debido a la gravedad de su padre en la que se da cuenta que esta afrontando sus últimos días. Es aquí cuando su hijo comienza a indagar sobre las historias para descubrir la realidad de los sucesos que rodearon la vida de su padre.

Edward Bloom no tiene la intención de engañar con sus historias sino de llevar a sus oyentes a un estado de encantamiento en el que los mantendrá atentos y en espera de lo que sigue.

Edward Bloom nos muestra muy claramente uno de los puntos esenciales de un storyteller ya que muchas veces no es importante lo que contamos sino la forma en la que se cuenta una historia, algo que se puede identificar en la película. Algunas de las características que lo hacen un buen storyteller son: la capacidad de llegar a los corazones de los oyentes pues es ahí en donde residen las emociones; el poder desviar las historias de manera que sean interesantes; la creatividad para crear nuevas ideas al definir a todas las personas que conoció así como las situaciones y lugares que visitó; la capacidad de dar explicaciones mágicas cuando le preguntan sobre alguna situación; aplicar su mensaje personal a cada una de las historias que contaba; captar la atención de la gente al dirigirse a los sentimientos y ser conciso para dejar que las palabras e imágenes hablen por si solas pues va contando poco a poco la historia y te permite percibir cada detalle de la misma.

Para poder conocer si Edward Bloom dramatizaba la realidad o creaba ficción basta recordar la parte en la que se muestra su funeral, pues es ahí en donde su hijo Will ve a varios amigos de su padre los cuales estaban presentes en sus historias. Ahí Will se da cuenta de que su padre no había mentido en sus historias, simplemente había exagerado algunos detalles como con Karl el gigante, quien en realidad era un hombre muy alto o las siamesas que en realidad eran gemelas idénticas.

El límite impreciso entre lo real y lo ficticio es la razón que inicialmente aleja a Will de su padre hasta que después logran encontrar un punto de equilibrio para unirse al final. El límite es difícil de explicar pero cuando rebasa lo tangible y existente es cuando podemos hablar de ficción o de la simulación de la realidad.

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