La historia

HISTORIA Y RELATO

En toda narración podemos diferenciar tres aspectos o niveles de análisis, uno es la HISTORIA, otro, el RELATO; y el tercero, la NARRACIÓN.

La historia es el contenido de la narración, es decir, la sucesión cronológica de los hechos, lo que es contado. Mientras que el relato es la particular forma de organizar dichos acontecimientos en el discurso. En consecuencia, una misma historia puede ser relatada de muchas maneras diferentes; se puede cambiar la forma en que se cuenta (sintetizada, ampliada, en orden cronológico, alterando el orden, repitiendo algunas partes, etc.) pero sin alterar la historia. Por ejemplo, existen muchos relatos de un mismo suceso, el último terremoto en Chile: se lo cuenta brevemente en un programa de radio, se lo desarrolla con más detalle en un diario, se comunica el hecho en un noticiero televisado y una persona lo puede relatar a un amigo. Cada versión es un RELATO DIFERENTE (con distinto orden, suprimiendo datos, aportando detalles, etc.) pero todas cuentan la misma HISTORIA.

Además, tenemos que distinguir lo que es la NARRACIÓN de la historia. Un hecho puede ser narrado desde distintas perspectivas o puntos de vista. La narración depende, justamente, de quién cuenta la historia. Siguiendo con el ejemplo del terremoto de Chile, podemos imaginar que la perspectiva será diferente si el hecho lo cuenta un especialista alemán en sismos, que no vivió el hecho a si lo cuenta un ciudadano chileno que estuvo en el lugar de los hechos. En otras palabras, la narración es la perspectiva desde la cual se cuenta.

Veremos a continuación los recursos del relato y los tipos de narradores que existen.

• Recursos del relato:

El relato se puede organizar según:

1- ORDEN

Hay dos formas básicas de organizar temporalmente la historia:

- Orden cronológico

- Con alteraciones en la cronología: En este caso, la historia no sigue el orden cronológico, sino que se introducen retrospecciones (retrocesos en el tiempo) y/o prospecciones (anuncios del futuro de la historia). Cuando el narrador cuenta un hecho anterior a los hechos que relata (infancia del personaje, recuerdos, etc.) se trata de una retrospección. En cambio, cuando introduce adelantos o pistas que anuncian lo que sucederá más adelante en la historia, realiza prospecciones. Generalmente, éstas son descubiertas por el lector con posterioridad, al llegar al hecho que se anunció.

2- DURACIÓN

El relato puede dedicarle más o menos tiempo al hecho que se narra. De esta manera, es posible encontrar:

- Pausas: La historia se detiene pues no se relata ningún hecho, sólo se describe un lugar o un personaje, o bien, el narrador opina sobre algún tema.

- Elipsis: Se omite una parte de la historia.

- Escena: coincide el tiempo de la historia con el tiempo del relato. Es cuando se presentan diálogos.

- Resumen o síntesis: se relata brevemente largas extensiones de tiempo (años, meses)

3- FRECUENCIA

La

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