CRISIS DEL 29

OMAR JAVIER CORZO CRUZ

RELACION ENTRE LA CRISIS ECONOMICA DE 1929 Y LA CRISIS DEL 2008.

La crisis económica de 1929 puede verse relacionada en gran medida con la crisis del 2008, en la cuales se suscita una gran problemática acerca de cómo un sistema económico mal diseñado con fines para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos puede afectar negativamente a la macroeconomía, dando origen a una crisis incontrolable. Cabe mencionar que la mala regulación por parte de los gobiernos da cabida a una desenfrenada cadena de problemáticas que originan una desestabilización económica en los bancos.

Si comparamos la crisis de 1929 con la crisis de 2008, vemos que en lugar de acciones, lo que se vendió en esta nueva crisis eran casas. Al igual que en 1929, cuando se pensaba que las acciones no podían bajar de precio, de igual forma en 2008 se pensaba que las casas no podían bajar de precio, sin embargo ocurrió cuando el mercado de la oferta supero la demanda. Los bancos se olvidaron de que lo importante al brindar crédito no es tener un activo como respaldo, sino tener a un deudor con ingresos suficientes que signifiquen una buena capacidad de pago. Casas, acciones, todo lo que se pueda comprar y que tenga un precio puede bajar de precio en algún momento cuando están sujetos a la oferta y la demanda.

La crisis financiera es, entre otros motivos, por exceso o mala regulación e intervencionismo del Estado. En un entorno de libre mercado y de libre competencia, además de responsabilidad personal, los banqueros cuidarían mucho a quien prestar y en qué condiciones. Estaría en juego su ganancia o bancarrota. Pero las malas regulaciones del Estado para promover créditos de manera irracional e irresponsable, las intervenciones para rescatar bancos quebrados, con el dinero de todos, distorsionan el mercado financiero y de capitales y son las que generan las crisis.

En la década de 1920 la gente no era significativamente rica en EUA. Se anunciaba prosperidad en los EUA debido a que se había popularizado el uso del crédito como nunca antes. Crédito para comprar coche y otras tantas cosas que antes no se tenían. Fue un tiempo de desenfreno crediticio.

En aquella época se quiso abrir la bolsa de valores a cualquier persona y la gente podía pedir prestado para comprar acciones. Las acciones subían porque la gente compraba y la gente compraba porque las acciones subían. Los bancos prestaban sin medir los riesgos, igual que en la crisis del 2008.

Las ganancias eran tan altas y tan inmediatas que empezó una verdadera locura y todo el mundo quiso meterse a ganar dinero en la bolsa, aunque no supiera nada acerca de ella, y el que no lo hacía era socialmente visto como alguien que está fuera de moda, un engendro extraño. Fue un tiempo de consumismo, donde la gente se vio llena de avaricia, el negocio parecía

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