LA IMPORTANCIA QUE TIENEN LAS HUMANIDADES

Unidad 1. Fundamentos pedagógicos para la enseñanza de las Humanidades

Presentación de la unidad

La presente unidad está compuesta por tres apartados temáticos encaminados a establecer una relación clara, efectiva y redituable entre la enseñanza de las Humanidades y la Nueva Escuela Mexicana; los procesos socioeducativos y estrategias de enseñanza y aprendizaje en Humanidades; y la reflexión y análisis sobre la construcción del ser humano y el sentido de la vida como medio transformador de la realidad. 

En el primer apartado abordaremos brevemente el significado de las humanidades y el humanismo, lo que permitirá definir nuestra perspectiva humanista en Educación Media Superior.

Posteriormente, reconoceremos en los Principios y Orientaciones Pedagógicas de la Nueva Escuela Mexicana su relación con los fundamentos y perspectivas de las humanidades, para, finalmente, vincular la enseñanza de las Humanidades y los Principios Pedagógicos de la Nueva Escuela Mexicana a los procesos socioeducativos en su dimensión de estrategias de enseñanza y de aprendizaje. De esta manera, trataremos de responder cómo los procesos de enseñanza y de aprendizaje pueden mejorar la formación en Humanidades en los procesos educativos actuales. 

Finalmente, comenzaremos nuestra reflexión en torno a la construcción y constitución de lo humano y el sentido de la vida, con el objetivo de identificar cómo las humanidades pueden contribuir a la transformación de la realidad. 

Objetivo y competencias

Objetivo: Reconocer los principios pedagógicos de la Nueva Escuela Mexicana aplicados a la enseñanza y aprendizaje en humanidades.

Competencias: Adquisición de aprendizajes teóricos y conceptuales de la pedagogía humanista y la Nueva Escuela Mexicana.

• Desarrollo de facultades necesarias para la práctica de una pedagogía humanista.
• Desarrollo de facultades pedagógicas vinculadas a estrategias de aprendizaje basadas en la articulación de los principios de una pedagogía humanista con la propuesta de la Nueva Escuela Mexicana.

Temas:

I. La enseñanza de las Humanidades y la Nueva Escuela Mexicana
a) ¿Qué son las Humanidades?
b) Propuesta pedagógica de la Nueva Escuela Mexicana para las Humanidades
c) La enseñanza de las Humanidades y los Principios Pedagógicos de la Nueva Escuela Mexicana

II. Procesos socioeducativos y estrategias de enseñanza y aprendizaje en Humanidades
a) ¿Qué son los procesos de enseñanza y de aprendizaje?
b) ¿Qué implica enseñar y aprender en Humanidades?
c) La enseñanza y el aprendizaje en los procesos educativos actuales

III. Reflexión y análisis sobre la construcción del ser humano y el sentido de la vida como medio transformador de la realidad
a) Debate en torno a lo que es el ser humano
b) Debate acerca de la finitud
c) El ser en sí y el ser para sí
d) ¿Cómo contribuyen las humanidades a la transformación social?

I La enseñanza de las Humanidades y la Nueva Escuela Mexicana

Sin las humanidades la vida no tiene sentido

Para iniciar la Unidad I, reflexionemos a partir de las siguientes preguntas: ¿Para qué sirven las humanidades?, ¿cuál es el sentido de su estudio?, ¿son las humanidades una actividad práctica?, ¿cuál es la relación del desarrollo e innovaciones tecnológicas con las humanidades?

En esta primera sección comenzaremos con una introducción al respecto de la importancia de aprender y enseñar las humanidades. Las reflexiones que aquí elabores serán de utilidad para realizar las siguientes actividades. Ahora, revisa con atención el siguiente vídeo:

1. ¿Qué son las humanidades?

Aunque no hay consenso al respecto de qué son las humanidades, éstas pueden comprenderse como el conjunto de estudios relativos al hombre como ser intelectual y creador. El humanismo enfatiza en la comprensión de los valores humanos. Kristeller (1990: 3) señala que las humanidades surgen a la par del renacentismo de los siglos XV y XVI. Con humanistas se designó a quienes se ocupaban de las disciplinas o artes llamadas liberales: la gramática, la retórica, la poesía, la historia y la filosofía moral; todas ellas basadas en la lectura de los autores clásicos que habían escrito en griego y latín.

El humanismo no nos es dado por el simple hecho de ser humanos. Como la educación, el humanismo cultiva al hombre y busca desarrollar en él las más altas y distintivas potencialidades de su ser. En este sentido, el humanismo se adquiere, no se hereda. No debe confundirse humanismo con erudición o cultura: las humanidades nos humanizan porque sólo en ellas y a través de ellas nos integramos a una de las formas más notables de comunidad cultural o espiritual (Arnold, 1985: 42).

Las humanidades nos legaron la perspectiva de comprensión del mundo, a través del estudio gramatical de textos e imágenes. Acogida por el iluminismo, las humanidades se asociaron al espíritu reflexivo, crítico y libre de las creaciones culturales.

A partir del siglo XIX las humanidades se distinguen de las ciencias sociales porque más que afanarse a la construcción de teorías explicativas, se posicionaron como fuente de reflexión de la experiencia humana en todas sus dimensiones.

La aspiración máxima del humanismo en la educación es la formación integral de la personalidad, del ser y su plena realización como ser humano, y el cultivo de la sensibilidad para desarrollar sus verdaderas potencialidades creadoras; busca propiciar que el estudiante aprenda a pensar, sentir, actuar y desarrollarse como persona (Sánchez y Pérez, 2017: 267).

Algunas de las cualidades de las humanidades son las siguientes (Saladino, 1994: 43):

• Cultivo del intelecto tanto como de los valores
• Desarrollo del pensamiento reflexivo y crítico
• Incesante búsqueda de la verdad
• Búsqueda constante de la realización del ser y la felicidad
• Reconocimiento de la diversidad y la universalidad
• Alientan la duda metódica
• Reconocen la fragilidad y la finitud de la condición humana 

b) Propuesta pedagógica de la Nueva Escuela Mexicana para las Humanidades

La Nueva Escuela Mexicana (NEM) asume la educación desde el humanismo como fundamento de los procesos del Sistema Educativo Nacional, desde el cual se establecen los fines de la educación y los criterios para nuevas formas de enseñanza y aprendizaje, vinculados a los nuevos horizontes de avance social, económico, científico, tecnológico y de la cultura en general, que conducen al desarrollo integral del ser humano en la perspectiva de una sociedad justa, libre y de democracia participativa.

La NEM, en sus Principios y Orientaciones Pedagógicas, pone especial énfasis en una educación en valores, en la dignidad humana, la integridad, la honestidad, el respeto a los individuos, la no violencia y la procuración del bien común, con lo que se busca contribuir al desarrollo integral del individuo para que ejerza plena y responsablemente sus capacidades. Coloca al estudiante en el centro de los procesos educativos, como un sujeto moral autónomo (más no aislado), con personalidad, dignidad y derechos.

En cuanto al fomento de la identidad por México, la educación cívica se vincula con el aprecio por la cultura, el conocimiento de la historia y el compromiso con los valores plasmados en la Constitución Política. Al respecto del aprecio por la cultura ‒dimensión de la vida social que ofrece al ser humano la oportunidad de reflexionar sobre sí mismo‒, busca dignificar los rasgos distintivos, espirituales y materiales, intelectuales y afectivos; los modos de vida, los sistemas de valores, las tradiciones y las creencias que caracterizan a una sociedad (SEMS, 2019: 3).

En cuanto a la responsabilidad ciudadana, la NEM impulsa la aceptación de derechos y deberes personales y comunes, que se sintetizan en los valores cívicos: honestidad, respeto, justicia, solidaridad, reciprocidad, lealtad, libertad, equidad y gratitud, entre otros. Estos valores son importantes porque alientan la conciencia social al favorecer el bienestar social; la participación ciudadana como mecanismo de transformación social; la empatía por quienes están en situación de vulnerabilidad; y promueven una cultura de la paz, el respeto irrestricto a la dignidad y los derechos humanos de las personas con base en el marco de la diversidad para el fortalecimiento de una sociedad equitativa y democrática (SEMS, 2019: 3-4).

c) La enseñanza de las Humanidades y los Principios Pedagógicos de la Nueva Escuela Mexicana

La educación, desde el paradigma humanista, postula a la persona como el eje central del modelo educativo. En esta perspectiva, los estudiantes encuentran, en la adquisición de saberes y habilidades, la base para su desarrollo individual y la responsabilidad de utilizarlos en favor de su comunidad. En este sentido, promueven la participación en la búsqueda del bienestar social, fomentan la convivencia armónica y resuelven los conflictos priorizando el consenso en una cultura de paz y con un hondo sentido comunitario (SEMS, 2019: 7-9).

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