Apego

Continuando con el estudio de la bioenergética acupuntural y apoyados siempre en el ideograma que representa al hombre manejado por las fuerzas celestres, las terrestres y las propiamente humanas y con el fin de ir haciendo el tema de la MTC lo menos denso y pesado posible podemos afirmar que existe dentro de la acupuntura china un conjunto de canales o vasos a través de los cuales podemos manejar o manipular cada una de estas fuerzas. Repetimos: fuerzas celestes, fuerzas telúricas o de la naturaleza y las fuerzas propiamente humanas.

En este orden de ideas podemos afirmar, en primera instancia, que existen unos canales o meridianos dentro de la acupuntura que nos conectan con la línea celeste y a través de cuya manipulación podemos hacer nacer al hombre como tal. En estos canales está la información de nuestro origen y nuestro destino.

Estos canales son los conocidos como vasos maravillosos o extraordinarios que en número de 8 básicamente controlan las energías sobrantes del cuerpo físico manejadas por los conocidos como meridianos regulares (con los que estamos más familiarizados).

Estos meridianos forman 8 haces luminosos o vasos maravillosos a través de los cuales se da paso a la forma física con la intermediación del San Jiao y el Maestro Corazón (Xin Bao).

Luego, el ser humano es un ser de luz conformado en la materia y en camino de retorno hacia su origen celeste siendo la enfermedad una desarmonía con su medio externo y con su ser interno.

Los ocho vasos maravillosos o extraordinarios son los verdaderos «caminos de la transformación espiritual » , son meridianos verdaderamente alquímicos, es decir, transformadores sobre todo a nivel espiritual. A través de ellos podemos catalizar la parte espiritual del ser humano. Son los vasos que conectan con las fuerzas celestes por excelencia.

Los Vasos Extraordinarios actúan como reservorios de la energía y Sangre en el cuerpo, absorbiendo excesos y completando deficiencias.

Ellos tienen relación directa con el cerebro y la columna vertebral, tienen que ver con el control hormonal, con el sistema esqueletal, con los genitales, con el sistema circulatorio, con la producción de sangre y el sistema hepático y biliar.

Sus influencias en el complejo cuerpo-mente-espíritu son profundas, poco conocidas y difíciles de comprender.

Pero nuestra tarea, precisamente se encamina a llevar este conocimiento a un nivel tal que permita su comprensión y nos facilite nuestra tarea de terapeutas bioenergéticos.

Y cuáles son esos 8 vasos maravillosos o extraordinarios con los cuales podemos «trabajar» la parte espiritual del hombre?

Son los siguientes: (Debemos fijarlos bien en nuestro conocimiento de ahora en adelante)

El Dumai o Vaso Gobernador muy conocido ya por nosotros

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