Consumidor Consumido

Consumidor consumido

Las sociedades de consumo alimentan la gran maquinaria de la economía, fueron diseñadas con este fin. El ser humano es fácilmente manipulable como masa social, de forma que el capitalismo y la publicidad ponen en juego toda clase de mecanismos para crear el deseo o la necesidad de compra en el individuo, de tal forma que el individuo piensa que lo compra porque de una u otra forma realmente lo necesita.

Estos mecanismos son muy variados y todos tienen como objetivo hacernos consumir siempre más:

 No es casualidad que en la actualidad los aparatos electrónicos se queden obsoletos, se rompan con poco uso o a escasos años de comprarlos. Lo más frecuente cuando acudimos a reparar un aparato electrónico es que comprar uno nuevo sea más barato que repararlo. Esto es la obsolescencia programada: bienes fabricados para no durar.

 Las modas en todo tipo de objetos desde la ropa a teléfonos móviles: a esto se le llama obsolescencia percibida. Significa que probablemente tu teléfono o tus pantalones sean perfectamente funcionales, sin embargo al cabo de cierto tiempo la misma sociedad de consumo y la publicidad inducen en tí la idea de que se han quedado obsoletos y debes sustituirlos por otros nuevos.

 La publicidad en cualquier medio y espacio que nos haga pensar qué puede ser lo siguiente que compremos. Hay miles de cosas que si no supiéramos que existen, jamás echaríamos de menos

 La enorme disponibilidad y diversidad de productos personalizados: uno para cada persona porque cada persona es diferente. Esto me recuerda a numerosas marcas de cosméticos pero se aplica a toda clase de productos, incluso a los alimenticios.

 Las ofertas, rebajas y precios más bajos también contribuyen al consumo masivo, con la particularidad de que el consumidor piensa que con ello ahorra dinero cuando lo que está es gastándolo. El consumidor no percibe en este caso que posiblemente tampoco necesitaba realizar esta inversión.

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