ESCLAVOS DE LA PASION

ENSAYO

“ESCLAVOS DE LA PASION”

Como seres humanos consideramos en muchas ocasiones equivocadamente, que el término “PASIÓN” se asocia solo con el amor y todo aquello que tenga cierta relación con sexo o euforia, sin embargo, la pasión va más allá de despertar satisfacción en nosotros; ésta también representa sentimientos negativos que pueden llevarnos a actuar deliberadamente frente a ciertas situaciones de peligro o amenaza sin medir las consecuencias. En efecto, la pasión es un sentimiento de gran intensidad y breve duración, que se caracteriza por la alteración del ánimo hasta el punto de que prácticamente anula la inteligencia y la voluntad.

La pasión a menudo provoca en nuestro cuerpo un alto grado de alteración cuando sentimos rabia, ira o cualquier otro sentimiento negativo. El mas común es la ira, la cual abarca sentimientos como la rabia y el odio, que en la mayoría de lo casos nos impulsan a actuar sin conciencia; nos desinhibimos y perdemos el control de nuestros actos.

La ira, además de ser un escape a nuestras frustraciones, también puede llevarnos a la furia, la cual es un estado más elevado y peligroso que altera nuestra conciencia y nos lleva a tomar ciertas decisiones aceleradas sin un análisis previo o sin reflexión, lo cual puede traernos serios problemas.

De todos los estados del animo de los que la gente desea liberarse, la furia parece ser el mas intransigente, lamentablemente la ira es el estado de ánimo que peor dominamos. Es considerada la mas seductora de las emociones negativas.

Cuando experimentamos una situación desalentadora o desagradable, damos lugar a sentimientos de odio, rabia, venganza y frustración que abren paso a la ira, la cual se apodera de nuestra capacidad de control y damos rienda suelta a nuestras emociones, que puede resultar peligroso, o por el contrario, proporcionarnos libertad y descanso emocional; en estos casos es muy importante el dominio propio o templanza, como los romanos y la iglesia cristiana lo llamó, es decir, el sentir de manera proporcional a las circunstancias y mantener el equilibrio de las emociones; con esto no quiero decir que para ser felices debamos evitar los sentimientos negativos, sino que éstos no ocupen gran lugar en nuestra vida y distorsionen nuestros buenos estados de ánimo.

Sin duda, la sensación de encontrarse en peligro es un detonante de ira muy eficaz, el peligro puede ser provocado no solo por una amenaza física sino también por una amenaza a la autoestima o la dignidad, sin embargo, existen maneras de mantener la calma y disminuir la ira; éstas pueden ser la compasión, la catarsis, la distracción de la atención o simplemente la respiración profunda. Pero no seré tan puntual explicando las diferentes formas de canalizar la ira, creo que cada persona llega al límite donde es

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