El Psicoanalista
DisasterHxEnsayo20 de Noviembre de 2013
3.414 Palabras (14 Páginas)234 Visitas
El Psicoanalista
Primera parte: Una Carta Amenazadora
Era un día común para el doctor Frederick Starks, como todos los días de su vida, atendiendo a sus pacientes, en su pequeño consultorio, que se encontraba en su casa, pacientes que solo se quejaban de su familia, sus amigos, su trabajo.
Era el día de su cumpleaños, y el penúltimo día que daba consulta, ya que se aproximaban las vacaciones de verano, y como cada año se tomaba dos semanas para irse a su casa de verano.
Pero este era un año diferente, ya que llegaba a los 53 años de edad, y era a la edad que llegaban sus familiares, tenía pensado que era el último año de su vida.
Era la última consulta del día, atendiendo a Roger Zimmerman, un desafortunado que tenía una vida rutinaria junto a su madre invalida que toda la vida se encargó de manipularlo. Zimmerman se había vuelto dependiente de del doctor Starks, lo veía 50 minutos 5 días a la semana, y estaba acostumbrado a ser el último paciente del día, cuando de repente se escuchó el timbre de la sala de espera, Frederick no recordaba tener un paciente en espera por lo que se precipito, y por supuesto Zimmerman se molestó, porque a él le gustaba ser el último paciente del día. El doctor Starks se incorporó, termino la sesión y Zimmerman salió molesto de la consulta. Permaneció escuchando mientras salía el enfurecido paciente, y esperando a que alguien más entrara, pero como no fue así, salió a percatarse de quien se encontraba ahí, y no encontró en el asiento un sobre, pero nadie respondía a su llamado por lo que lo recogió y decidió leerla, solo leyó la primera parte que decía : Feliz 53° cumpleaños, bienvenido al primer día de su muerte; por su puesto era una carta anónima de un psicópata que se hacía llamar por Rumplestiltskin, o señor R, en esta carta el autor expresaba su furia, diciéndole que pertenecía a algún momento de su pasado, reclamándole que él era el único responsable de su mala suerte, y diciéndole que él le había arruinado la vida, y que estaba decidido a arruinar la suya. En la carta expreso que deseaba matarlo, pero que era una manera muy fácil de deshacerse de él, y que no se estaría enfrentando a ningún desafío, ya que lo tenía perfectamente vigilado, y tenía su rutina exacta, y sabía a qué hora estaba seguro y a qué hora no, además de que para el doctor Starks sería una muere sin sufrimiento y para él no estaba garantizada su satisfacción. Por lo que decidió que prefería que su suicidara. Lo metió en un juego, le dio 15 días para descubrir quien era él, si lo conseguía, tenía que publicar en la portada del New York Times el nombre del psicópata. Si no lo hacia iba a ver como poco a poco iba a destruir a sus familiares, a los cuales anoto en otra hoja del paquete, eran 52, y la única forma de evitarlo era descubriéndolo o suicidándose. Tenía la oportunidad de hacer tres preguntas, que el considerara necesarias para poder descubrir la identidad de Rumplestiltskin, estas tres preguntas tenía que publicarlas en el periódico, y el señor R las respondería de igual manera al día siguiente, pero con la condición de que tenían que ser respondidas con un sí o con un no.
Frederick, no pudo dormir esa noche, pensando en que él no tenía enemigos de tal magnitud, y no tenía la mínima idea de quién podía ser, la única pista que tenía era que en la carta decía que le había arruinado la vida desde que atendió a su madre, provocando la partida de su padre. No tenía idea de quien se trataba.
Intento hablar con sus familiares, con quienes no tenía contacto décadas atrás, por lo que estos no lo tomaron muy enserio, y solo consiguió enterarse de que una de sus sobrinas lejanas había sido violada esa mañana, por lo que dedujo que era actuación de Rumplestiltskin.
Al día siguiente, a la hora en que se tenía que presentar Zimmerman en la consulta, no apareció, por lo que salió y se encontró con una mujer que se hacía llamar Virgil, Frederick pidió disculpas ya que no la podía atender, pero esta se excusó diciendo que conocía a Zimmerman y que él no iría a la consulta, ya que según esto él había decidido terminar su tratamiento esa tarde, excusando que se encontraba en la estación del metro y que Zimmerman mantuvo una conversación con el señor R. la chica se adentró a la consulta, diciendo que venía de parte del señor R, y que si había decidido adentrarse al juego, Frederick le pidió que dijera que quería, o llamaría a la policía. Le explico que el señor R era su jefe, y que ella iba a ser su guía hacia el infierno.
Más tarde descubrió que el señor R había provocado que Zimmerman se suicidara en las vías del metro, impulsado psicológicamente por él, diciéndole que reaccionara y se diera cuenta de que su vida no valía la pena. Datos que le dio Virgil, pero él creía que había sido empujado.
Después de la investigación judicial una testigo declaro que ella había visto como se aventaba, pero Virgil le había dicho que le habían pagado para que dijera eso, por lo que el doctor Frederick lo dijo en la policía, pero no le creyeron ya que habían encontrado una carta de suicidio en su casa, de Zimmerman.
En esta carta decía que se arrepentía de su vida y que le pedía perdón a todos, menos al doctor Starks, por lo que se le hizo llegar una copia, aunque él no entendía por qué, ya que él no había estado involucrado.
El doctor Starks decidió empezar su propia investigación, elaboro un historial de todos sus pacientes veinte años atrás, y empezó a descartar personas con traumas diferentes al de Rumplestiltskin.
Más tarde fue acusado de violación, cosa que obviamente él no había cometido, y fue avisado por la asociación de psiquiatría, pero era una denuncia anónima, según porque era parte del tratamiento de la paciente, pero era otra trampa del señor R, más tarde recibió una carta en la que se le proporcionaba un numero de un abogado, el de la presunta víctima, con el que tenía que hablar para esclarecer el caso, pero no logro nada, ya que el abogado Merlín, también era contratado por el señor R. Con esto recibió un gran golpe a su reputación, su vida laboral estaba acabada.
Después de esta acusación se percató de que sus cuentas bancarias habían sido canceladas, por lo que llamo al banco y le informaron que habían sido canceladas electrónicamente. Una pista más, el señor R era muy bueno con el mundo cibernético.
El doctor Starks decide acudir con la detective Riggins para conseguir más pistas, pero solo logro que le proporcionaran el teléfono de un investigador más, resultando ser su antiguo maestro el Doctor Lewis, lo hace viajar y es quien lo escucha y lo ayuda a orientarse dentro de su investigación, pero al otro día desapareció, y le dejo una carta que decía que se tenía que ir de modo inesperado, y que no creía regresar a tiempo para verlo, y que evaluara las alternativas de que pasaría si ganara o perdiera el juego; suplicándole que no se volviera a poner en contacto con él.
Aparentemente el Frederick había avanzado en su investigación. Pero los días se le acabaron así que se decidió a que debía abandonar su vida, fingió la muerte para que Rumplestiltskin no lo encontrara. Metiéndose al mar embravecido.
Publico en el Times, un anuncio que decía: señor R, usted gana. Y dejo una carta de suicidio, diciendo que lo hacía porque estaba solo y no soportaba el vacío de su vida, y no quería causar más daños. Que era acusado de cosas que él no había cometido, pero que si era culpable de cometer errores con las personas que amaba. También dejo donativos, para unas fundaciones, como el cáncer, pedía perdón a sus amigos, comprensión a sus familiares y le daba las gracias al señor R por haberlo ayudado a llegar a ese decisión, y le deseaba que muy pronto de igual manera encontrara su camino hacia el infierno, porque allí lo estaría esperando.
Segunda parte: el hombre que nunca existió
Frederick desapareció por completo de New York, y se fue a Nueva Hampshire. Vivió en un motel por algún tiempo. Después decidió caminar y pensó en alquilar una habitación. Después fue a comprar ropa, en un sitio de ropa del Ejercito de Salvación, en donde compro un abrigo desgarrado y un pantalón demasiado grande, que ni el encargado de la tienda se lo quería vender, por el mal estado y el mal olor que tenía la ropa, pero era lo que el necesitaba para comenzar su nueva vida.
Caminaba por las calles pasando desapercibido por todos. Ya que había adquirido una personalidad de un vagabundo, adoptando el nombre de Richard Lively. Pasaba las noches bajo los puentes y pasaba los días de albergue en albergue buscando subsistir.
Después de todo esto había adquirido algo que jamás creyó tener, odio, odio hacia el hombre que le había robado su vida, y lo convirtió en eso, por lo que se dio a comenzar una nueva investigación, esta vez para encontrar a este hombre y vengar lo que le había hecho, su único objetivo era matarlo.
Después, cansado de su aspecto, en el baño del metro decide quitarse la ropa de vagabundo, y ponerse lo que traía en la mochila.
Su vida empezó a tomar forma. Logro trabajos parciales, como cajero y reponiendo los estantes de un supermercado.
Mas adentrado en su investigación viajo a otras ciudades para buscar más sobre el que arruino su vida, y logro encontrar el rastro de la madre de Rumplestiltskin, Claire Tyson, una mujer que había atendido hacia veinte años, que había muerto en Nueva York y que las autoridades decidieron dar en adopción a sus tres hijos, de su padre biológico y sus padres adoptivos. La razón por la que Rumplestiltskin lo odiaba.
...