El estres y sintomas

El estrés.

DEFINICION

Es una obstinación orgánica del cuerpo en el que ingresan en expansión varios componentes de protección para enfrentar un contexto que se descubre como amenazador o de petición aumentada.

Selye(1974) define que “El estrés es una respuesta inespecífica del cuerpo ante cualquier demanda”. Estrés es el manera de un organismo de protestar a un desafío, Selye observó que individuos enfermos a quien experimentaba, independiente de la molestia que padecieran, presentaban señales comunes a lo cual  llamó conjunto de síntomas el síndrome de estar enfermo.

Selye (1956). Considera que “El estrés ha sido entendido como  reacción  o respuesta del individuo estímulo, interacción entre las características del estímulo y los recursos del individuo”. También puede ser determinado pues que es un  transcurso que se inicia ante un acumulado de suplicas circunstancial que recoge el individuo, a las cuáles debe dar una réplica adecuada, colocando en partida sus recursos de resistencia. Cuando la petición del ambiente (laboral, social, etc.) es descomunal frente a los recursos de resistencia que se poseen, se van a despliegar una serie de reacciones adaptativas, de movilización de recursos, que implican activación fisiológica. Esta reacción de estrés incluye una serie de reacciones emocionales negativas (desagradables), de las cuáles las más importantes son: la ansiedad, la ira y la depresión.

El estrés excita enfermedades físicas concretas, preocupación y angustia, que pueden desembocar en trastornos mentales; desórdenes familiares y sociales; así como la pérdida de la dimensión espiritual, tan necesaria para salir a flote en las dificultades.

Seyle(1950).Identificó en tres fases. La primera fase (alarma) constituye el aviso claro de la presencia de un agente estresante, el cuerpo reconoce el estrés y se prepara para la acción, ya sea de agresión o de fuga. La segunda fase (resistencia) es cuando el cuerpo repara cualquier daño causado por la reacción de alarma. Sin embargo, si el estrés continúa, el cuerpo permanece alerta y no puede reparar los daños Si continúa la resistencia se inicia la tercera fase (agotamiento), se caracteriza por la fatiga, la ansiedad y depresión, que pueden aparecer por separado o simultáneamente. La exposición prolongada al estrés agota las reservas de energía del cuerpo y puede llevar en situaciones muy extremas incluso a la muerte.

SINTOMAS

El estrés logra declarar  mediante distintas señales según  el individuo o las circunstancias a las que nos desafiemos. Asimismo, la energía o la costumbre pueden variar.

A nivel físico, logra afectar a nuestro cuerpo formando que veamos cualquiera de los siguientes síntomas:

• Frecuencia cardiaca acelerada o irregular.
• Respiración alterada, dificultad para respirar o dolor en el pecho.
• Excesiva sudoración.
• Fuertes dolores de cabeza, mareos o temblores.
• Dolor estomacal.
• Deseo fuerte de orinar.
• Tensión muscular que deriva en contracturas y dolor de espalda.

A nivel psíquico, se pueden derivar del estrés distintos síntomas por los que nuestra mente puede verse alterada:

• Cambios de humor, tensión, irritabilidad y mal carácter.
• Dificultad de concentración y toma de decisiones.
• Alteraciones del sueño y cansancio excesivo.
• Preocupación excesiva
• Disminución de la memoria y lentitud de pensamiento.
• Miedo o pánico que puede llegar a paralizanos.
• Actitudes violentas.
• Depresion, tristeza, pensamiento catastrófico y ganas de llorar.

Estos indicios pueden dar lugar múltiples conductas, reacciones y actitudes anormales e inusuales en nuestra persona como un aumento o disminución de la comida, beber o fumar con mayor frecuencia, inclinaciones nerviosas, dificultades sexuales, variaciones de carácter, gestos nerviosos, entre otros, que a la larga nos pasarán factura.

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