Ensayo Funes El Memorioso
wendyrtz18 de Marzo de 2014
723 Palabras (3 Páginas)867 Visitas
Funes el Memorioso.
“La memoria es la inteligencia de los tontos.” tal sentencia de Albert Einstein me hace pensar en Funes el Memorioso, llevando a la discusión de que la memoria no garantiza la inteligencia o el aprendizaje, inclusive: ¿Será un don el que alguien pueda memorizar y recordar todo tal cual lo percibieron sus sentidos, será memorizar aprender?
Sin memoria no hay aprendizaje pero ¿estará implícito que al memorizar se aprenda emocionalmente? Werner Wolf dice: “El aprendizaje se logra con la experiencia, se perfecciona con la práctica y las cosas aprendidas dejan huella que se relacionan entre sí”. Funes me hace pensar que aún cuando el lograba memorizar desde lo más evidente hasta el detalle más insignificante no lograba aprender desde esta parte emocional, sensitiva, ya que teniendo esta extensa película de recuerdos en su cabeza difícilmente se centraba en sus emociones, o en el interés por darles sentido, él simplemente memorizaba.
Al tener el “don” de mantener datos acumulados de manera, casi como un ordenador, uno deja de ser humano para convertirse en una máquina de almacenaje. Esto me recuerda a días de escuela donde compañeros se metían horas y horas a la biblioteca a memorizar páginas de libros que posiblemente no entendían pero que si lograban citar en las pruebas se sentirían más inteligentes, más sabios, sentirían que habían aprendido algo. Pero que una vez que salieran a enfrentarse con la vida su percepción cambiaria, pues aún con todo este conocimiento adquirido no sabrían cómo actuar, no sabrían cómo practicarlo.
El memorizar algo sin darle sentido es casi como no saberlo, no aprenderlo, pues de qué sirve conocer, reconocer y recordar el detalle de las pinceladas de un cuadro pintado por Da Vinci si no tiene una relación directa con la emoción de algún recuerdo o saber un poema de Sabines, si no son más que letras bien distribuidas en párrafos con ritmo y métrica que carecen de emotividad. Me parece inservible una memoria de exquisités magnánima si no puede ser utilizada para crear nuevas experiencias, nuevas percepciones, nuevos paisajes, si no tienen corazón.
Funes al tener esta capacidad de memorizar tan aguda deja de lado la percepción pues como en la evolución de una especie lo que no se necesita se va ignorando y termina desapareciendo. La percepción, para una persona que debe esforzarse por memoriza y aprender, es de suma importancia, pues en el proceso el relacionar lo que se desea memorizar con alguna emoción ayuda a procesar dicha información almacenándola de manera que pueda evocarse con el estímulo adecuado.
Funes al mantener toda la información en su aparato psíquico acaba matándolo pues deja de funcionar al no cumplir con su función principal que es dar salida a todo aquello que no es de utilidad.
Dudo que una persona como Funes carezca de sentido humano pero al memorizar todo y recordarlo a detalle se pierde el sentido de la belleza de aprender, de, incluso, repetir experiencia por el hecho de ya haberlas vivido y de no permitirse vivirlas nuevamente, porque, aún cuando recordar sea volver a vivir, no se vive igual si se está en un punto de la vida diferente con emociones diferentes y percepciones de vida distintas. Darse la oportunidad de volver a experimentar, de volver a vivir es permitirse darse cuenta que se puede estar equivocado, es aprender algo nuevo, repetir experiencias es casi como dedicar una misma canción a diez personas diferentes, estando en otra situación emocional esa canción adoptará sentidos distintos, significados diferentes.
Memorizar todo tal cual se va presentando carece de sensibilidad perceptiva, no se necesitan agudizar los sentidos pues no es necesario, es no tener que esforzarse, hablo desde mi experiencia al decir que aquellos que nada les cuesta nada de esfuerzan y nada les sabe, esto me hace pensar que al no tener
...