Juego Y Desarrollo

Juego y Desarrollo

¿Por qué es sano jugar?

El juego implica una serie de procesos que contribuyen al crecimiento integral del infante. Se consideran diversas funciones que tiene el juego en la vida infantil:

1) Educativa: El niño aprende a estar atento a una actividad durante un tiempo, desarrolla su creatividad, imaginación e inteligencia gracias a la curiosidad de descubrir su entorno y a él mismo, el sentimiento de realización y aprendizaje motivan al niño a aplicar sus ideas en la vida real.

2) Física: El juego provoca el desahogo de energía física, desarrolla habilidades motrices al enseñar al infante la coordinación de movimientos e intenciones cuando éste intenta lograr las metas del juego.

3) Emocional: El juego resulta un escape emocional en el niño, ya que utilizando la imaginación actúa según el personaje que él quiera ser y puede desarrollar una actividad sin tener responsabilidades totales o limitaciones en sus acciones, formando su personalidad e individualidad a su vez adquiere confianza e independencia. El decide sus propias reglas, nadie se impone ni lo reprime.

4) Social: El infante se va haciendo consciente de su entorno cultural, va entendiendo el funcionamiento de la sociedad y las acciones de los seres humanos. Aprende a cooperar, compartir, aprende las reglas del juego limpio a ganar y a perder.

A lo largo del crecimiento infantil hay diversos cambios de actitudes los que se ven reflejados en la manera en que juega el niño. Se observan diversas conductas:

1) Conducta desocupada y de espectador: Observa objetos y acciones cercanos a él sin participar. (2 – 2 años y medio)

2) Juego paralelo: Elige los mismos juguetes que los niños que lo rodean, pero no hace esfuerzos por intervenir con los otros. ( 3 años)

3) Juego asociativo: Forma libre de juego en grupo y se da el intento inicial de actividad colectiva. ( 3 años y medio a 4 años)

4) Juego cooperativo: Actividad colectiva organizada donde participan en grupo para con una meta específica. ( 4 años a 5 años y medio)

5) Juego grupal: El niño ya puede asociarse y hacer amigos al encontrar semejanzas en gustos e intereses. (5 a 7 años)

Los adultos también pueden jugar…

Las estructuras del juego permanecen a lo largo de nuestra vida. Muchas disciplinas como la antropología, la sociología, la psicología, se han dado la tarea de investigar más ampliamente acerca del juego para dar a conocer la importancia en nuestras vidas. La alternancia del juego (actividad lúdica) y del trabajo (actividad obligada), ayuda que el adulto acepte mejor este último, la actividad realizada con gozo y placer resulta ser más eficaz que cuando se estima desagradable, dejando una menos sensación de fatiga, aburrimiento y obligación.

Juego simbólico: Propio del estadio pre operacional (2- 6 o 7 años) el niño simula situaciones, objetos y personajes. El infante comprende y asimila el entorno que lo rodea, aprende y practica sobre roles establecidos en la sociedad adulta, al imitar situaciones verbalizan y desarrollan el lenguaje, favorece la imaginación y la creatividad.

Los niños reflejan la vida que los rodea a través de tres tipos de argumentos o temas, cuánta más variada es la realidad conocida, más variados son los argumentos que utilizan. Los argumentos típicos y ejemplos de las tres categorías son: jugar a las casitas, a superhéroes, a los gatitos. La selección y el desarrollo del argumento del juego demuestran que el niño comprende cada vez mejor la vida de los adultos.

La relación con los otros en el juego simbólico va evolucionando desde el juego paralelo presente entre 2 a 4 años (los niños juegan juntos pero no hay relación entre ellos, sólo se observan y a veces modifican comportamientos por imitación) hasta el juego compartido, desde los cuatro años

...