LA ISLA SINIESTRA

ANALISIS DE LA PELICULA LA ISLA SINIESTRA

La historia se sitúa en 1958, en Estados Unidos en un hospital psiquiátrico para pacientes que han cometido crímenes, lo especial es que este hospital se encuentra ubicado en una isla cercana a las costas de Boston, un lugar de difícil acceso y del que es casi imposible escapar porque da hacia unos acantilados y siempre está vigilado.

Dos agentes federales Teddy Daniels y Chuck Avle interpretados respectivamente por Di Caprio y Mark Rufallo llegan a esta isla-hospital-cárcel con la misión de investigar la desaparición de una paciente, una mujer con alto grado de agresividad que asesinó a sus hijos. El ambiente del hospital nos parece enrarecido, sentimos que se nos oculta información o que algo malo ocurre. El agente Daniels al ponerse en contacto con estos pacientes que sufren debido al encierro que al parecer es mas interior. Se ve enfrentado a sus propios fantasmas, y a través de flashbacks recuerda una misión en los campos de concentración nazi, donde vivenció la muerte de inocentes en forma fría (casi literalmente por las escenas de cadáveres apilados congelándose) y a su vez se ve enfrentado por primera vez en este clima deshumanizado a matar a soldados alemanes, quizás de manera crepsucular debido a su rabia e impotencia contra estos. Además sufre de jaquecas que le producen gran dolor y sueños, uno de ellos de gran simbolismo, bellamente filmado, donde él abraza a su mujer entre cenizas que parecen copos de nieve, y al tocarla se desangra y se desintegra.

Acá el relato va cambiando, ya que misteriosamente aparece la mujer que estaban buscando. Y el agente Daniels le cuenta a su colega que en realidad el buscaba ingresar a ese lugar para investigar prácticas de experimentación con drogas que enajenan, o procedimientos quirúrgicos que pueden borrar la memoria.

Acá aparece y para los que estamos insertos en el tema de la salud mental una clara crítica a la psiquiatría que en esos años recién conocía los primeros neurolépticos, y efectivamente se usaba la psicocirugía (y áun se utiliza) para los casos más graves. De hecho el director de la clínica dice que él es mas partidario del uso de la "cura por el habla" (psicoanálisis).

El viaje del agente interpretado por Di Caprio se vuelve cada vez más denso e irreal, y aparecen alucinaciones visuales y la suspicacia extrema que se vuelve cada vez más delirante.

Es acá donde el espectador se cuestiona si lo que piensa Daniels es verídico, si su locura es provocada por las drogas que le administran para la migraña y le han descubierto en su plan de desenmascarar el fin de la institución o si realmente se ha atormentado por los recuerdos de la guerra y la ausencia de su esposa, que habría muerto en un incendio provocado por un paciente internado ahí de cuya existencia no aparecen registros. Acá el espectador debe

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