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Movimiento 1968


Enviado por   •  2 de Julio de 2013  •  3.038 Palabras (13 Páginas)  •  255 Visitas

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México: el Movimiento Estudiantil de 1968, A. Gutiérrez Torres

En la historia de México existen hechos políticos de asesinatos colectivos que revelan la naturaleza autoritaria del poder, la falta de democracia y de libertades políticas y cuyo recuerdo aviva al pueblo a participar en la actividad política, a reelaborar su historia, cantar nuevas canciones y en fin, a tomar su pasado como punto de partida para impulsar el cambio político. La represión a los estudiantes en el mítin de la Plaza de las Tres Culturas es uno de ellos. En efecto, la sociedad vivía asfixiada por la antidemocracia, el grupo en el poder no permitía la existencia de verdaderos partidos de oposición, las elecciones eran manipuladas para que siempre triunfara el PRI, no existía libertad de prensa, de manifestación, ni se permitía a los obreros ejercer sus derechos de huelga, sindicalización y organización.

En los años cuarenta México entra a una nueva etapa al comenzar los movimientos estudiantiles que luchaban en contra de las políticas educativas de las autoridades como fue el intento de clausura del politécnico o el intento de imitar a las universidades estadounidenses con la implantación de sus modelos administrativos, dando como resultado el movimiento por la defensa de las instituciones, como las normales rurales en las que se pretendía eliminar el internado movilizando a más de 120 mil estudiantes comprometidos con la lucha por una educación técnico-popular de acuerdo a las necesidades que tuviera la nación. A finales de la década de los sesenta a la sociedad mexicana se le imponía una doble moral; se prohibía la edición de libros que “ofendieran” las concepciones trasnochadas de políticos, curas y maestros (al extremo de despedir a Arnaldo Orfila de la dirección del Fondo de Cultura Económica por haber editado el libro Los hijos de Sánchez del antropólogo Oscar Lewis). El mismo presidente Díaz Ordas era un anticomunista recalcitrante que gobernaba con arbitrariedad e intolerancia.

Como en otras sociedades, en México la lucha de clases vivía momentos de intensidad y de tragedia: en Morelos se asesinó al líder campesino Rubén Jaramillo y a su familia por órdenes del Presidente López Mateos; la insurgencia obrera y campesina estaba desarticulada por la represión; en las cárceles había numerosos presos políticos como Valentín Campa y Demetrio Vallejo; el ejército era utilizado como instrumento para reprimir las luchas campesinas y las huelgas obreras; la injusticia condujo a levantamientos armados como los dirigidos por los profesores rurales Genaro Vázquez Rojas y Lucio Cabañas Barrientos en el estado de Guerrero. “Se declara la huelga por el comité ejecutivo de la Facultad de Ciencias Políticas de la UNAM, el 24 de julio de 1968 los granaderos invaden la Vocacional 5 después de que junto con alumnos de la Vocacional 2 provocados por las pandillas de los araños y cuidadelos lapidan el edificio de la preparatoria Issac Ochoterena que tiene incorporación a la UNAM”. Eran estos los encabezados que se leían en los diarios del 1968, en donde los granaderos van a provocar a los estudiantes sin imaginar el movimiento que se despertaría.

Virtualmente todas las escuelas públicas de la UNAM, Chapingo, Normal, IPN, y algunas privadas como la Iberoamericana se declaran en huelga; las sociedades de alumnos son rebasadas por los Comités de Lucha a nivel local y el Consejo Nacional de Huelga, integrado por representantes elegidos en cada escuela con la finalidad de orientar las acciones contra del gobierno. En el movimiento estudiantil se sintetiza la lucha de lo nuevo, de una nueva clase política contra la vieja sociedad política que se niega a reformarse y mucho más a morir arrastrando las almas de quienes cayeron en la batalla en pos de un cambio, que son consecuencia de los problemas estructurales en la economía, la falta de libertad política, la existencia de una doble moral enmascarada de hipocresía, la continua represión de un sistema en manos del monopolio mas tradicional y represivo nacido en las entrañas de un partido de traiciones a los principios revolucionarios.

La juventud de finales de los sesenta cargaba bajo sus hombros una enseñanza tradicional fuertemente influenciada por la iglesia a conveniencia del gobierno, para evitar movimientos como el que estaba por despertar. Los jóvenes, con las contradicciones de su entorno, comienzan a reflexionar y cuestionarse el rumbo no sólo de su sociedad sino de la política que se estaba desarrollando en el país. El descubrimiento y comercialización de la píldora anticonceptiva colocó por primera vez a las mujeres en la posibilidad de controlar su cuerpo, de hacer el amor con quien quisieran sin el temor de quedar embarazadas, constituyó una verdadera revolución en las relaciones sociales y en la moral de la época. El rock con representantes como Elvis, Jannis Joplin, los Beatles, los Rolling Stones y los interpretes nacionales se convierten en el himno y bandera de esta explosión contracultural.

En el panorama internacional se tenía un reciente recuerdo de la revolución cubana, el comienzo de la mistificación de Ernesto Che Guevara por su muerte trágica en la aventura boliviana, el repudio a los Estados Unidos por el intervencionismo en Latinoamérica así como en Vietnam, la defensa de la reivindicación de los derechos de los negros a cargo de las Panteras Negras, etc. La tranquilidad de la nación mexicana es interrumpida por las jornadas de lucha estudiantil con manifestaciones, brigadas, mítines relámpagos en los puntos estratégicos de la ciudad como mercados, escuelas, transporte público, fabricas, en las terminales autobuses; esta urbe luce sus paredes y camiones con las consignas del pliego petitorio, apoderándose de la atención de la sociedad por medio de la prensa donde se refleja la lucha entre el gobierno descalificando, amenazando o calumniando a los estudiantes o en muy pocos casos abriendo un foro para la discusión.

La iglesia se alinea con el gobierno condenando a los participantes del movimiento, lo cual era otra forma de mantener el control del pensamiento de los jovenes o de los padres de estos, siendo una forma de dominación en el entorno familiar, puesto que era la iglesia quien determinaba si las conductas eran buenas o malas. En México como en Francia e Italia el movimiento estudiantil tenía como eje motriz la política impugnándole al gobierno su malaforma de actuar frente a la nación y reivindicando una serie de medidas de carácter democrático. El 2 de Octubre de 1968 en Tlatelolco hubo un parteaguas en la historia de los movimientos sociales cuando se tendió una emboscada en contra de quienes el gobierno califico como “enemigos de México” al pretender justificar su proceder. Se calculan 500 los muertos, más de 300 los encarcelados y un número

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