Mr Jones: Examen Mental

Emma Jocelyn Paredes Calleja

Examen mental

“Mr. Jones”

Paciente: Mr. Jones

Diagnóstico: Trastorno Bipolar I grave con características psicóticas y trastorno de la personalidad narcisista

Hombre adulto, edad aparente de 40 años con apariencia acorde al esperado para su edad. Tez blanca, cabello canoso largo, ojos cafes, alto y de complexión delgado. Al inicio se presenta en condiciones apropiadas de aliño y limpieza, con una vestimenta limpia, se nota preocupación por combinar las prendas y dar una buena imagen a los demás, y estas son acorde a él. Lo mencionado anteriormente se presenta en estados de manía, durante estados de depresión, se observa despreocupación por la vestimenta y por la higiene personal, así como un desinterés por la interacción social.

Mr. Jones es un hombre impulsivo, intenso, embaucador y con un carácter fascinante que atrae a la gente por su encanto y vitalidad.

El paciente, en episodios de manía, muestra un comportamiento efusivo, eufórico e intrusivo, se pone a bailar, gritar y saltar en cualquier lugar sin importar lo que piensen de él. Tiene un carácter que atrae a las personas por su encanto, carisma y vitalidad. Posee sentimientos de grandeza y cree conocer la vida de todos. Hay aumento de autoestima y de conductas sexuales, mantiene una actitud atenta y seductora con las mujeres. Se muestra muy sociable, con la capacidad de entablar una conversación fácilmente con extraños. Por el otro lado, durante los episodios de depresión, se observa  con un estado de ánimo bajo la mayor parte del día, donde su contacto con los demás se ve empobrecido. Muestra retraso psicomotor en estados de depresión pero en estados de manía hay un aumento de la actividades y participación en múltiples actividades, las cuales pueden llegar ser de alto riesgo. Es distraído en ambos estados, se le dificulta enfocar su atención. Puede estar ubicado en espacio, tiempo y persona cuando se encuentra maníaco pero muestra características psicóticas cuando está depresivo, mostrando poco contacto con la realidad y alucinaciones. Presenta una amnesia selectiva, olvidando información de origen traumático. Se observa que su pensamiento va a gran velocidad por la fuga de ideas que se expresa y por el flujo del discurso casi continuo y acelerado. Durante la depresión, hay una disminución de la capacidad para pensar o concentrarse, muestra frustración por ser incapaz de hacer operaciones simples, pero es capaz de hacer cálculos mentales rápidamente en episodios maníacos, dando la impresión de ser hábil con las operaciones y del mismo modo cuenta con habilidades musicales avanzadas. El paciente presenta alucinaciones de tipo visual y auditivas. Durante su manía, es eufórico y excesivamente alegre, con un humor expansivo. Mantiene un exceso de optimismo y grandiosidad que lo llevan a realizar actividades imprudentes. En su estado deprimido, la mayor parte del día se presenta una disminución del interés en actividades del día a día.  Su lenguaje es rápido y difícil de interrumpir, habla continuamente con un tono de voz alto y ejerce presión por mantener la conversación, siendo esta en ocasiones dominante e intrusiva. El discurso se caracteriza por chistes y juegos de palabras, irrelevancias divertidas y manierismos extravagantes. Antes de caer en episodio de depresión, rechaza la ayuda que le ofrecen y la mayor parte del tiempo se muestra escasamente cooperador. Su juicio está impedido, el paciente no evalúa los posibles riesgos que puede traer su conducta. Comete gastos excesivos e innecesarios y regala su dinero, lo cual lo conduce a la ruina. La conducta sexual elevada lo lleva a tener encuentros indiscriminados con extraños. Al principio no reconoce que tiene un trastorno bipolar y tampoco reconoce que necesita tratamiento y no se preocupa por ser constante con su medicamento.  

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