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REGULACION


Enviado por   •  26 de Marzo de 2014  •  1.814 Palabras (8 Páginas)  •  155 Visitas

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EL DESARROLLO DE LA REGULACIÓN PERSONAL

ENSAYO LARGO

A continuación explicaré como es que la regulación personal se va desarrollando, comenzare recalcando que el apoyo y cuidado a los recién nacidos y a los preescolares es fundamental, estos cuidados se basan en un proceso continuo de paciencia y de adaptación.

Dentro de estos procesos de paciencia y de adaptación puedo mencionar el comportamiento, para construir el ritmo día-noche, hasta aprender a estar tranquilos y satisfechos, una vez que las necesidades básicas han sido cubiertas, así como posteriormente deberá desarrollar la capacidad de manejar emociones de forma constructiva manteniendo atención.

El vivir y el aprender exige que las personas reaccionen ante los acontecimientos de un mundo cambiante y una vez que se logra, deben aprender a regular las reacciones de cada acción.

A la capacidad del niño para funcionar de manera cada vez más independiente en contextos personales y sociales, se le llama capacidad de autorregulación ya que va asimilando de una manera paulatina el hecho de que es una persona independiente a sus cuidadores, pero esto va a depender en gran mayoría del contexto en el que se desarrolle.

Pero antes de llegar a la autorregulación como tal, los niños deben pasar por algunos elementos que no podemos pasar por altos, gracias a ellos nos daremos cuenta cómo es que los niños van desarrollando esta capacidad como tal.

En primera instancia, las relaciones que el niño mantiene con sus cuidadores, están sumamente arraigadas a las relaciones del niño con otras personas, esto quiere decir que de la manera en que el niño logre desarrollarse con sus cuidadores, será la forma en que se desarrolle con otras personas, aunque está no siempre será facilitadora de buenas relaciones, sino dependerá de las mismas que haya mantenido de pequeño.

El paso inicial en los primeros años de vida de los niños consiste en establecer una o más acciones de regulación con ellos y luego, dejarles la responsabilidad de la regulación en los aspectos cotidianos como dormir, caminar y tranquilizarse.

Aún a pesar de la gran variedad de contextos de crianza, el niño nace preparado para adaptarse a la transición. Algunos de los problemas iniciales de sueño y llanto en los niños pueden ser graves desafíos para los padres, ya que estos crean tensión entre los miembros de la familia, impulsan percepciones negativas sobre el infante y en algunas ocasiones los padres se desilusionan y dudan de sus habilidades de crianza.

Estos problemas pueden intensificarse si el niño tiene bajo peso al nacer o si fue prematuro, esto no es como tal que pase en todos los niños con estas características, pero se han observado estos pequeños rasgos, por muy pequeños que sean.

Si se llegara a profundizar todavía más acerca de los ritmos del día y de la noche, y acerca del llanto, mejoraría la manera en cómo se conciben los problemas para hacer que el niño duerma o deje de llorar, ayudaría a comprender mejor la magnitud de la tarea que quiere realizar, así como a identificar diferencias individuales sobre él como responden los niños en el tiempo de transición y a encontrar respuestas para apoyar con éxito estas transiciones.

Ahora también ayudaría a ir diferenciando e ir a la par con los tiempos de sueño del infante, ya que no es el mismo tiempo al nacer que como van pasando los meses. Las pautas de alimentación también influyen sobre las señales nocturnas, pues los bebés alimentados con biberón logran periodos de sueño más largos un poco antes que los bebés alimentados al pecho.

Aunque esto pueda ser más cómodo y atractivo a los padres, cuyo sueño se ve afectado, pero esto no es del todo lo más recomendable, ya que los niños que no son amamantados, sueles ser más propensos a enfermarse, debido a que los ritmos de otros sistemas, como la hormona del crecimiento, el cortisol, la temperatura del cuerpo, etc., se estructuran durante el sueño, aunque muchos sospechan que el desarrollo y la organización del sueño ayuda a instrumentar el ritmo día-noche.

En los cuidadores existe una muy importante preocupación de que los bebés duerman de forma muy profunda, ya que el miedo está en que no reaccionen cuando no reciban el suficiente aire y que los niveles de oxígeno se reduzcan demasiado, es por esto que no se recomienda que se coloque a los bebés boca abajo mientras duerme.

Algunas madres duermen con el bebé, con la idea de que lo protegen ante la idea de problemas como el síndrome de muerte súbita del infante (SMSI). Pero esto no es muy confiable ya que en ocasiones el infante ha dejado de respirar y la madre no se da cuenta, por lo profundo del sueño.

Por el contrario, los periodos cortos de sueño característicos de la temprana infancia pueden ser protectores para los bebés cuyos sistemas que regulan la respiración, la deglución y la limpieza de las vías respiratorias todavía no están maduros.

Ahora referente al llanto, los seres humanos desde que nacemos lloramos sin razón, y más aún los bebes siguen llorando después de que los tomaron en brazos, los alimentaron e hicieron lo posible porque se sintieran cómodos, aun aunque en ocasiones se logre identificar los distintos llantos, como llanto de hambre, llanto de dolor, llanto por irritación entre otros.

Más aun de lograr identificar lo que puede causar el llanto, lo que sus cuidadores quieren saber cómo detenerlo y tranquilizar al infante.

Los niños inhibidos desde pequeños –lactantes o preescolares – se muestran tímidos en la vida social, son desconfiados y se alarman

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