TECNICA DEL JUEGO MELANIE KLEIN

LA TÉCNICA DEL JUEGO DE KLEIN (Hanna Segal)

Antes de Melanie Klein, se pensaba que los niños no tienen conciencia de su enfermedad ni de su necesidad de ayuda; por consiguiente, era imposible esperar cooperación por parte de ellos. Sin embargo, Klein observo que la forma de expresión natural del niño es el juego y que, por consiguiente, puede ser utilizado como medio de comunicación con los pequeños. Para el niño el juego no es «simplemente juego»: es también trabajo. No se trata tan sólo de una forma de explorar y controlar el mundo externo, sino de un medio por el cual controlar y expresar sus angustias a través de la manifestación y elaboración de las fantasías. Mediante el juego, el niño dramatiza sus fantasías y elabora así sus conflictos.

Tras esto, Melanie Klein concluyó que, dadas las condiciones adecuadas, el libre juego del niño, así como todas las comunicaciones verbales de que sea capaz, pueden cumplir una función similar a la asociación libre en los adultos.

Melanie Klein comprendió la importancia del juego en la niñez y señaló que su inhibición era un síntoma fundamental que denotaba una inhibición de la vida de la fantasía y del desarrollo general. Melanie Klein comprendió la importancia del juego en la niñez y señaló que su inhibición era un síntoma fundamental que denotaba una inhibición de la vida de la fantasía y del desarrollo general.

En 1923 sus principios y técnicas del psicoanálisis infantil estaban plenamente elaborados. Proporcionaba al niño un encuadre psicoanalítico adecuado y la habitación se hallaba adaptada de un modo especial para el niño. También habla sobre la elección de los juguetes, la cual es de gran importancia porque el juego libre del niño funciona de manera similar a la libre asociación en el análisis de adultos, por tanto así como en el análisis de adultos el analista y los juguetes no debe sugerir el tema de las asociaciones.

Melanie Klein sostenía que el juego del niño expresa sus preocupaciones, conflictos y fantasías; su técnica estribaba en analizar el juego tal como se analizan los sueños y las asociaciones libres, interpretando las fantasías, conflictos y defensas. Los dibujos de los niños y las asociaciones que éstos les inspiran a menudo son especialmente reveladores.

En cuanto a la conciencia de enfermedad, descubrió que aunque los niños casi nunca tienen «conciencia de enfermedad» en el sentido adulto, experimentan ansiedades intensas y son por lo menos tan conscientes como un adulto de su propia necesidad de ayuda. Klein consideraba que los niños, a causa de su ansiedad y de la dependencia general en que se hallan, desarrollan una rápida y sólida transferencia con el analista.

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