“El ejemplo del olivo”

“El ejemplo del olivo”

        Los olivos crecen por centenares de años. Hasta cuando finalmente el tronco envejecido y en muchas ocasiones, surgen nuevos tallos.

¡Existe un olivo que probablemente es el olivo más antiguo del mundo se encuentra en la aldea de Al Walaja en el distrito de Belén. Los expertos lo datan entre 4.000 y 5.000 años y todavía produce fruto hoy día!

Esta semana en tesoros de la biblia. El ejemplo del olivo que usa Pablo como ilustración al pacto abrahámico.

¿Qué representan las distintas partes del olivo simbólico?

• El árbol: El cumplimiento del propósito de Jehová relacionado con el pacto abrahámico.

• El tronco: Jesús, que es la parte principal de la descendencia de Abrahán.

• Las ramas: Los 144.000, que son la parte secundaria de la descendencia de Abrahán.

Las ramas “desgajadas”: Los judíos que rechazaron a Jesús.

Las ramas “injertadas”: Los cristianos ungidos de otras naciones.

En su carta a los romanos, el apóstol Pablo usa esta ilustración de manera maravillosa de como Jehová cumple parte de una promesa que Él hizo a Abrahán siglos antes:

Génesis 22:18 Y mediante tu descendencia ciertamente se bendecirán todas las naciones de la tierra debido a que has escuchado mi voz’”.

Pablo compara a los miembros de la descendencia de Abrahán con las ramas de un olivo cultivado. Este árbol simboliza el cumplimiento del propósito divino al pacto abrahámico.

También menciona la raíz antes de hablar del árbol, dice que “la raíz es santa” Rom. 11:16. 16 Además, si la [parte que se toma como] primicias es santa, también lo es la masa; y si la raíz es santa, también lo son las ramas.

¿Quién serán la raíz?

Jehová Dios es el “Santísimo”. Con frecuencia se le llama “el Santo de Israel”, particularmente en el libro de Isaías. El apóstol Pedro aconseja a los cristianos ungidos y dice: “De acuerdo con el Santo que los llamó, háganse ustedes mismos santos también en toda su conducta”.

No cabe duda que Jehová, es la raíz del olivo simbólico, pues él es quien le da vida al Israel espiritual

El tronco corresponde a Jesús, la parte principal de la descendencia de Abrahán. Y el conjunto de ramas representa “el número pleno” de quienes forman la parte secundaria de dicha descendencia.

En la ilustración del olivo, los judíos que nunca aceptaron a Jesús son comparados a ramas que, al haber sido “desgajadas”, o arrancadas, del árbol perdieron la oportunidad de formar parte de la descendencia de Abrahán.

¿Quiénes serían los reemplazos? Serían personas en las que nunca habrían pensado los judíos, quienes tan orgullosos se sentían de tener por antepasado a Abrahán. Pero no olvidemos que Juan el Bautista ya les había advertido que, si Jehová lo deseaba, podía crear descendientes de Abrahán hasta de las propias piedras. Las ramas “desgajadas”: Los judíos que rechazaron a Jesús. (4:00)

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