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ceciliasilva19 de Mayo de 2015
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CUESTIONES EPISTEMOLÓGICAS DE LA DIDÁCTICA: algo está pendiente.
“Profesora...no logro darme cuenta cuál es la diferencia entre didáctica y
pedagogía...¿ de qué se ocupan? Qué estudia cada una?....” (Intervención de un alumno de profesorado donde
se cursan en forma paralela o correlativa Pedagogía General y Didáctica General, 2000)
INTRODUCCIÓN
En los inicios de mis estudios relacionados con las Ciencias de la Educación esta cuestión no
ofrecía, o al menos no se reconocía, una confusión conceptual. “Tanto la didáctica como la
pedagogía parecían tener clara su identidad, su ubicación en el campo de las ciencias de la
educación y desde estas en el contexto mayor de las ciencias sociales.” (Barco, S., 1989:7).
La pedagogía se definía como la reflexión acerca de la educación y la didáctica era su
sección tecnológica, la que comprendía el estudio de los métodos y las técnicas de la
enseñanza.
La pregunta del alumno, más allá del fugaz desequilibrio y confusión que me provocó por lo
inesperada (que intenté superar sin que se “notara”) me hizo pensar “oh!! la incertidumbre de
la práctica”. En ese momento esbocé una respuesta que sin embargo, no me conformó. Así
sobrevinieron en primer lugar interrogantes: ¿la pregunta era superficial? ¿carente de
fundamento?. Reconocí que el alumno estaba solicitando precisiones acerca de las
disciplinas que implican posicionamientos epistemológicos y una demarcación de objetos
específicos. Más dudas ¿es esto posible?
El propósito de este trabajo es analizar la cuestión epistemológica de la didáctica en particular
desde una perspectiva histórica e intentar “iluminarla” en un sentido amplio.
1. ACERCA DE LA CONSTITUCIÓN DISCIPLINAR DE LA DIDÁCTICA, DESDE
UNA DIMENSIÓN HISTÓRICA.
La didáctica se estructura históricamente para atender los problemas de la enseñanza en el
aula. Díaz Barriga señala como una peculiaridad de la misma que su conformación disciplinar
es previa a la constitución de la pedagogía. Nace en el S XVII y abordó en su origen el
significado de cómo y para qué se forma desde lo valorativo y lo religioso, formando parte
del proyecto social (la Reforma) que conforma el sentido de una educación general para
todos, cuya meta es que todos lleguen al conocimiento. Comenio retoma la proclama de
Lutero y posteriormente, la Enciclopedia y el Iluminismo convierten la conquista de la Razón
en el centro de este planteamiento que culmina con el ideario de la Revolución Francesa. La
Didáctica, como disciplina que estudia la enseñanza se constituye en un elemento
fundamental en la utopía que la modernidad le asigna a la escuela”. (Díaz Barriga, 1995).
Según Dilthey (1949), en el SXVIII se produjo el movimiento desde una didáctica científica
a una pedagogía científica, de Comenio a Herbart. Herbart desarrolló la primera constitución
disciplinar de la pedagogía y en su obra “Pedagogía General derivada del fin de la educación”
(1806), dedica un capítulo a la instrucción, subsumiendo de esta manera a la disciplina
didáctica.
Las ideas referidas a la instrucción fueron vistas con escepticismo hasta fines del SXIX, en
que los seguidores de Herbart revivieron los denominados “pasos formales” para la
enseñanza, produciéndose una resurrección de las teorías herbartianas, pero
fundamentalmente en lo referido a su teoría instructiva, es decir, a las cuestiones didácticas
que aparecen en su obra. Esta extracción de la didáctica de la teoría educacional planteó una
dirección rígida y esquemática de la enseñanza.
Este enfoque llega al SXX en el que se extiende el denominado “paradigma alemán” sobre
la disciplina pedagógica, que clasifica a la didáctica como una ciencia aplicada de la
pedagogía y así “se procede de una clasificación general entre las disciplinas llamadas
teóricas- tal es el caso de teoría pedagógica, filosofía de la educación, historia de la
educación, entre otras- y las llamadas aplicadas, como pueden ser la didáctica, la orientación
vocacional y la psicotécnica.” (Díaz Barriga: 1998,7)
Esta postura da lugar a la formulación de diversos textos de pedagogía, en los que la didáctica
general es presentada como una rama de la Pedagogía: la Pedagogía Tecnológica (Nassif,
1958, Pedagogía General), instalándose así la prescripción y la normatividad de la didáctica
como disciplina de la enseñanza
1
, como una cuestión central en los textos didácticos y en el
tratamiento del problema epistemológico de la didáctica.
En la primera mitad del siglo XX hay un relativo desplazamiento de las reglas de acción para
la enseñanza conforme a pasos y medios determinados, hacia otras experiencias didácticas
(Montessori, Decroly, Freinet, Kilpatrick), las que fueron articuladas por un proyecto
pedagógico social, en el que la obra de J. Dewey representó un enfoque integrador. “Asi, la
normatividad de la didáctica pudo funcionar como bisagra o realización intersticial de los
postulados de las utopías pedagógicas y las prácticas educativas”(Davini,M.C.,1996:47). En
realidad, estos aportes fueron eclipsados por nuevas tecnologías de la enseñanza que
ignoraron las dimensiones intencionales dejando, como efecto de muchos años de un
enfoque tecnicista y prescriptivo de la didáctica, opacada e inclusive casi ausente en los
debates, la cuestión de la relación disciplinar de la pedagogía y la didáctica.
Nuevamente, desde Alemania, la didáctica es “reinventada” (Klafki,1995) como una ciencia
humana y se extiende una concepción en la que el análisis didáctico comienza a suponer una
combinación de deliberaciones históricas, sociales y culturales. En el marco de estos aportes
se proponen nuevas formas de interpretar la teoría y la práctica de la enseñanza,
desarrollándose los fundamentos de esta relación como constituyentes de la misma disciplina
didáctica, quebrándose, en cierta medida la tradición largamente sostenida, de la didáctica
como brazo aplicativo de la pedagogía.
2
Desde la matriz de origen reconocida en la Didáctica Magna de Comenio, los pasos formales
de Herbart, las iniciativas alternativas, el auge del tecnicismo, las contribuciones de diversas
corrientes que intentan recuperar la subjetividad en la organización de las experiencias en el
aula, el papel de las cuestiones ideológicas y políticas en las relaciones de poder, la
contextualización de las acciones en el aula, puede concluirse en esta primera parte que tal
como lo señala A. Camilloni (1996), la didáctica es, actualmente una disciplina en búsqueda
de identidad. “Es mal momento para establecer la identidad a partir de las diferencias
relativas con respecto de otras disciplinas y quizás sea hora, más bien de ocuparse de
establecer vínculos armoniosos en la familia..."
2. UNA APROXIMACIÓN EPISTEMOLÓGICA SUPONE UNA ELECCIÓN.
Para ubicarse en la epistemología de los estudios que se relacionan con la didáctica y la
enseñanza, es necesario plantearse en primer término, el problema de la epistemología en
general y se ha de distinguir qué es una epistemología interna, estableciendo sus
características distintivas y su relación con las disciplinas epistemológicas especializadas.
(Larrosa,1990).
1 A. Camilloni distingue lo prescriptivo como un listado de acciones para alcanzar cada objetivo que se plantee.
En cambio una disciplina normativa, frente a la realidad asume ciertos valores y se propone transformarla desde
ellos.
2 La evolución histórica planteada se refiere al desarrollo disciplinar de la didáctica en Europa Continental,
fundamentalmente desde la perspectiva alemana por considerar que es la que con mayor fuerza influenció en
los enfoques didácticos latinoamericanos hasta que la propuesta tecnicista de los EEUU deja su impronta desde
mediados del SXX. Asimismo en los países anglosajones los enfoques difieren, incluso la valoración de la
didáctica es negativa, y según D. Hamilton (1999) en el discurso anglosajón sobre la pedagogía se refleja el uso
del término “didáctica” en Europa Continental.
La distinción entre ambas estaría dada por lo que Larrosa denomina “contextos de
pertinencia de los problemas”. Los problemas epistemológicos se analizan en función de su
inserción en un contexto de pertinencia y este proceso permitirá distinguir entre problemas
construidos en las epistemologías internas y problemas construidos en las disciplinas
epistemológicas especializadas. Un problema será epistemológico cuando en el dominio
respecto a su pertinencia se incluyen teorías, métodos, conceptos, estrategias de
investigación; cuando se relaciona con conocimientos preexistentes que se constituyen en sus
condiciones cognitivas; cuando en su planteamiento y solución se utilicen herramientas
intelectuales usuales en las disciplinas epistemológicas especializadas y/o en las
epistemologías internas y cuando
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