Obsolescencia planificada y percibida
trixioooo22 de Abril de 2014
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Foucault; 'Los Anormales', una genealogía de lo monstruoso 1
Dr. Adolfo Vásquez Rocca - Universidad Andres Bello - Universidad Complutense de Madrid
Resumen
Este artículo busca dar cuenta del concepto de Anormal desarrollado por Foucault y sus alcances médicos, jurídicos y políticos. Dictado en el Collège de France entre enero y marzo de 1975, el curso sobre Los Anormales prolonga los análisis que Michel Foucault consagró desde 1970 a la cuestión del saber y el poder; poder disciplinario, poder de normalización, biopoder. A partir de múltiples fuentes teológicas, jurídicas y médicas, Foucault enfoca el problema de esos individuos 'peligrosos' a quienes, en el siglo XIX, se denomina 'anormales'. Define sus tres figuras principales - los monstruos, que hacen referencia a las leyes de la naturaleza y las normas de la sociedad, los incorregibles, de quienes se encargan los nuevos dispositivos de domesticación del cuerpo, y los onanistas, que dan pábulo, desde el siglo XVIII, a una campaña orientada al disciplinamiento de la familia moderna. Los análisis de Foucault toman como punto de partida los peritajes médico legales que aún se practicaban en la década de 1950. Esboza a continuación una arqueología del instinto y el deseo, a partir de las técnicas de la revelación en la confesión y en la dirección de conciencia. Plantea de ese modo las premisas históricas y teóricas de trabajos que retomará, modificará y reelaborará en su enseñanza en el Collège de France y en obras posteriores.
Foucault, Abnormal. A Genealogy of the Monstrous
Abstract
This article seeks to explain the concept of Abnormal developed by Foucault and scope medical, legal and political. Taught at the Collège de France between January and March 1975, the course on The Abnormal extends Michel Foucault analyzes since 1970 devoted to the issue of knowledge and power, disciplinary power, power of normalization, biopower. From multiple sources theological, legal and medical, Foucault focuses on the problem of those individuals 'dangerous' who, in the nineteenth century, is called 'abnormal'. Define the three main figures - the monsters, referring to the laws of nature and rules of society, the incorrigible, who are in charge of the new devices domestication of the body, and masturbators, that feed from the eighteenth century, a campaign aimed at disciplining the modern family. Foucault analyzes take their point of departure the forensic expert who still practiced in the 1950s. Outlined below an archeology of instinct and desire, from the technical disclosure in confession and spiritual direction. Thereby raises the historical and theoretical premises of jobs resume, modified and reworked in his teaching at the Collège de France and later works.
Palabras clave
Anormales, monstruo, incorregible, loco, biopolítica, cuerpo, razón, psiquiatría, jurídico, político, genealogía, poder, medicina, locura, ética, clínica, encierro, hospital, instinto, crimen, anti-psiquiatría, domesticación, sexualidad.
Keywords
Abnormal, freak, incorrigible, crazy, biopolitical body, reason, psychiatry, law, politics, genealogy, power, medicine, madness, ethics, clinic, prison, hospital, instinct, crime, anti-psychiatry, domestication, sexuality.
1.- Anátomo-política: las disciplinas del cuerpo y las regulaciones de la población, hacia la biopolítica.
En la obra de Foucault no sorprende hallar un interés “histórico”, así como una fascinación “romántica”, por las zonas marginales de la sociedad. En efecto, su mirada, tras haberse detenido en la locura, y después en la cárcel, la criminalidad y la delincuencia, se vuelve hacia la sexualidad. “Foucault había instalado su observatorio en las zonas del ser viviente donde las distinciones tradicionales del cuerpo y del espíritu, del instinto y de la idea, parecen absurdas: la locura, la sexualidad, el crimen. Desde allí su mirada giraba como el haz de luz de un faro y se posaba sobre la historia y sobre el presente, dispuesta para los descubrimientos menos tranquilizadores”2.
El tranquilo sueño de la razón no dejará de generar monstruos. Monstruos que son consecuencia de la domesticación, del conformismo y de la seguridad garantizada por el ejercicio del poder. Foucault dará una doble función a este ejercicio: En primer lugar, una anátomo-política del cuerpo humano que obedece a la mecánica de las disciplinas. El principal objetivo de ellas es la comprensión del cuerpo como máquina. Estos procedimientos intentan conseguir docilidad política y utilidad económica de los individuos. En segundo lugar, destaca una biopolítica de la población. En este caso se considera al cuerpo individual en tanto forma parte de la especie. Esta operación queda a cargo de una serie de intervenciones y controles reguladores del individuo en tanto partícipe de los avatares propios de la especie humana: nacimiento, muerte, migración, reproducción, etc. Por lo tanto, el cuerpo es considerado como soporte de los procesos biológicos. Los mecanismos de poder ya no tienen allí por objeto la muerte, sino actúan como administradores de la vida. Las disciplinas del cuerpo y las regulaciones de la población constituyen los dos polos alrededor de los cuales se desarrolló la organización del poder sobre la vida.
2.- La historia de la locura en la época clásica; la constitución de la psiquiatría como saber e higiene del cuerpo social.
La microfísica del poder, como la genealogía de lo monstruoso requieren ser complementadas por la exposición que Foucault hace de la historia de la locura en la época clásica, y en particular, por el desarrollo de la psiquiatría como disciplina normativa e inquisidora.
La psiquiatría, tal como se constituyó entre fines del siglo XVIII y principios del XIX, sobre todo, no se caracterizó como una especie de rama de la medicina general. La psiquiatría funciona -a principios del siglo XIX y ya avanzado éste, quizás hasta alrededor de 1850- no como una especialización del saber o la teoría médica, sino mucho más como una rama especializada de la higiene pública. Antes de ser una especialidad de la medicina, la psiquiatría se institucionalizó como dominio particular de la protección social, contra todos los peligros que pueden venir de la sociedad debido a la enfermedad o a todo lo que se puede asimilar directa o indirectamente a ésta. La psiquiatría se institucionalizó como precaución social, como higiene del cuerpo social en su totalidad nunca hay que olvidar que la primera revista en cierto modo especializada de la psiquiatría en Francia fue los Annales d'hygiène publique. Es una rama de la higiene pública y, por consiguiente, habrán de darse cuenta de que la psiquiatría, para poder existir como instrumento del saber, es decir, como saber médico fundado y justificable, tuvo que efectuar dos codificaciones simultáneas. En efecto, por una parte debió codificar la locura como enfermedad; tuvo que patologizar los desórdenes, los errores, las ilusiones de la locura; fue preciso llevar a cabo análisis (sintomatología, nosografía, pronósticos, observaciones, historiales clínicos, etcétera) que aproximaran lo más posible esa higiene pública, e incluso la precaución que estaba encargada de asegurar, al saber médico y, en consecuencia, permitieran el funcionamiento de ese sistema de protección en nombre de este saber. Pero, por otra parte, podrán advertir que fue necesaria una segunda codificación, simultánea de la primera. Al mismo tiempo hubo que codificar la locura como peligro, como esencialmente portadora de riesgos y, por ello, la psiquiatría, en la medida en que era el saber de la enfermedad mental podía funcionar efectivamente como la higiene pública. En términos generales, la psiquiatría, por un lado, hizo funcionar toda una parte de la higiene pública como medicina y, por el otro, hizo funcionar el saber, la prevención y la curación eventual de la enfermedad mental como precaución social, absolutamente necesaria si se querían evitar cierta cantidad de peligros fundamentales y ligados a la existencia misma de la locura3.
Esa doble codificación va a tener una muy prolongada historia a lo largo del siglo XIX. Puede decirse que los tiempos fuertes de la historia de la psiquiatría en ese siglo, pero también en el siglo XX, se producirán justamente cuando las dos codificaciones estén efectivamente ajustadas, o bien cuando haya un único tipo de discurso, un único tipo de análisis, un único cuerpo de conceptos, que permitan constituir la locura como enefermedad y percibirla como peligro. Así, al comienzo del siglo XIX, la noción de monomanía va a permitir clasificar dentro de una gran nosografía de tipo perfectamente médico (en todo caso, completamente isomorfo a todas las otras nosografías médicas) y, por lo tanto, codificar dentro de un discurso morfológicamente médico toda una serie de peligros. De tal modo, encontraremos la descripción clínica de algo que será la monomanía homicida o la monomanía suicida. De igual manera, dentro de la psiquiatría, el peligro social se codificará como enfermedad. A causa de ello, la psiquiatría podrá funcionar efectivamente como ciencia médica encargada de la higiene pública. Asimismo, en la segunda mitad del siglo XIX, encontraremos una noción tan masiva como la monomanía, que en cierto sentido desempeña el mismo papel con un contenido muy diferente: la de degeneración4. Con ella tenemos una manera determinada de aislar, recorrer y recortar una zona de peligro social y darle, al mismo tiempo, un status de enfermedad,
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