Textos de Kliksberg: “Qué es ser pobre” y “Destinos marcados”.

Redacción:

Textos de Kliksberg: “Qué es ser pobre” y “Destinos marcados”.

Los textos de Kliksberg abordan el tema de la pobreza en América Latina.

“Qué es ser pobre”, nos explica la marginación y estigmatización que sufren los pobres por parte del resto de la sociedad. El considerar a “un pobre” como “menos persona” o como perteneciente a una categoría inferior, es la causa por la cual se origina la intolerancia y la violencia entre las clases sociales.

Kliksberg nos plantea cinco realidades que deberíamos aceptar para enfrentar la problemática de la pobreza:

-La pobreza mata y enferma. Esto se debe a la falta de cobertura médica y, fundamentalmente, a la desnutrición y las enfermedades que sufren los pobres como consecuencia.

-La desocupación es mucho más que un tema económico. Más allá de los problemas económicos que implica perder un trabajo, existen otras complicaciones que ocurren y deberían tenerse en cuenta, tales como enfermedades psicológicas y tensiones familiares, en los hogares afectados por el desempleo.

-Discriminación. Con frecuencia los pobres, y sobre todo los jóvenes pobres, son “criminalizados” de antemano. Esto dificulta la posibilidad de obtener trabajo y refuerza el círculo vicioso de desempleado-pobre-delincuente-desempleado.

-La culpa es de los pobres.  Un argumento que actúa como mecanismo para aliviar la conciencia social respecto a la realidad de la pobreza, es el que considera al pobre como responsable individual de su situación. La desidia, la indolencia, la vagancia, la falta de iniciativa serían las características de la persona en situación de pobreza, como si ser pobre fuera una elección libre e independiente, realizada por un individuo con determinados rasgos de personalidad. Lo que en realidad determina la situación de pobreza es el hecho de que dos terceras partes de la población latinoamericana no han tenido acceso a salud y educación, factores determinantes para acceder a una vida digna.

-La pobreza es inevitable. Nuevamente aquí, la única explicación para la pobreza en América Latina, un continente excepcionalmente dotado de riquezas naturales y condiciones geoeconómicas altamente favorables es que nunca hubo políticas de Estado que priorizaran la salud, la educación y una redistribución de la riqueza justa e inteligente.

Según Kliksberg, el primer desafío es asumir la pobreza como problema colectivo y que implica devolver al pobre la plenitud de su dignidad como hombre. Una vez que esto sea reconocido por toda la sociedad, es responsabilidad del gobierno implementar inmediatamente políticas públicas activas y sostenidas, que lleven a la solución del problema. También la sociedad civil acompañará desde la solidaridad con sus organizaciones, tales como Cáritas, Red Solidaria, AMIA, entre muchas otras.

El segundo artículo de Kliksberg, “Destinos marcados”, profundiza más el tema de la discriminación social producida por el “accidente de nacimiento”. Éste se entendería como el hecho de que un niño que nace en un área pobre urbana o rural, con padres de limitada educación, bajos ingresos, condiciones de vivienda precarias y acceso casi nulo a educación, este niño estaría predestinado a una vida de pobreza y discriminación. La falta de una nutrición adecuada en los primeros años de vida traerá como consecuencia una salud fragilizada y deficiente desarrollo de sus capacidades intelectuales y cognoscitivas.

Por otro lado, es probable que se vean obligados a formar parte de la mano de obra infantil. Entonces, con condiciones económicas desfavorables, con escasez de recursos en todo nivel, y con una familia probablemente desarticulada y disfuncional, como resultado de la condición de pobreza, estos niños y jóvenes carecen de toda posibilidad de realización como personas. Ninguno completará sus estudios, por lo tanto no podrá conseguir trabajo dentro del sistema económico formal. Subsistirá en la informalidad, trabajos precarios, marginalidad, situación de calle, etc. Es muy probable que no constituyan una familia, o si lo hacen, éstas reproducirán el mismo círculo vicioso de escasas oportunidades para salir de la pobreza que las familias de sus progenitores.

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