ANTECEDENTE HISTÓRICO DE LA ESCUELA INTEGRAL DE EDUCACIÓN BÁSICA “JUSTO SIERRA” DE LA COMUNIDAD DE CHAMACUERO

ANTECEDENTE HISTÓRICO DE LA ESCUELA INTEGRAL DE EDUCACIÓN BÁSICA “JUSTO SIERRA” DE LA COMUNIDAD DE CHAMACUERO.

Desde el año de 1999 en la Sección XVIII se comenzó a plantear la posibilidad de trabajar con un tipo de escuelas diferentes que estuvieran acordes al momento que se está viviendo, que rescataran la situación comunitaria y política y en el 2003 se decide ponerlas en marcha.

Se sacó una convocatoria para los maestros y escuelas que estuvieran interesados en formar parte de este proyecto y a los interesados se les dio un curso en la Escuela Normal de Educación Física, para esto ya se había hecho un convenio entre secretaría y la sección XVIII. Después de este curso se informo que se iban a abrir ocho escuelas una por cada región de las que se manejan en la Sección XVIII. Entre ellas tocó que formará parte la Escuela “Justo Sierra” de la comunidad de Chamacuero.

Cuando la Escuela de Chamacuero supo que podía formar parte de este proyecto lo hizo del conocimiento de la comunidad para plantear que si aceptaba se tenía que buscar un trabajo y una organización diferente a la que se venía trabajando y afortunadamente se aceptó y comenzó la carrera para trabajar de la mejor manera el Programa de las Escuelas Experimentales de Educación Básica.

Cuando la Escuela de Chamacuero comenzó con este programa solamente tenía 4 aulas y unas letrinas y con esto sabíamos que la infraestructura era insuficiente para desarrollar un trabajo pleno; de tal forma que se comenzó con la gestión para resolver necesidades que eran apremiantes para el desarrollo integral de los educandos como era contar con un espacio que funcionara como comedor y tener unos baños apropiados. Se comenzó con un colectivo docente de 6 profesores y un cuerpo estudiantil de 220 alumnos.

Se comenzó a realizar la gestión en otras escuelas, en la presidencia, y con organizaciones que pudieran solventar algunas necesidades de la Escuela, se contó con poco apoyo y las carencias eran muchas; pero no así los ánimos de la comunidad y del colectivo docente.

La comunidad se solidarizó con la escuela y comenzó a aportar lo que tenía para poder construir los espacios que se requerían; Así que hubo gente que comenzó a donar tabiques, varilla, cemento, arena y se hicieron los cimientos para un aula y después se gestionó con la presidencia que donó fajas y se construyo un aula de madera y un tejaban con techo de lámina negra; el cual duró poco pues hubo un viento y lo voló.

Después los señores se metieron a una reunión de cabildo y lograron sacar la construcción de 2 aulas y ellos pondrían la mano de obra.

Ya también con el trabajo de la escuela y de los talleres funcionó el taller de elaboración de tabicón; lo que permitió la construcción de dos espacios más. De tal manera que con el paso de los años, trabajo, entusiasmo, dedicación, comunicación, gestión contamos con una escuela que si bien es cierto no cuenta con una estructura totalmente equipada si cuenta con los espacios para poder llevar a cabo un trabajo decente y de calidad.

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