CURLE. "El Campo Y Los Dilemas De Los Estudios Por La Paz".

El estudio de la paz se enfoca en la relación entre individuaos, grupos, naciones o incluso unidades mayores, basadas en la cooperación. Analiza las condiciones bajo las que en vez de cooperación hay hostilidad mutua y violencia, y trata de descubrir técnicas que puedan transformar estas relaciones en pacificas.

Sin embargo, el estudio de la paz no es el estudio de la pacificación, o de la supresión de la disidencia, o del mantenimiento de un statuo quo penoso para los menos privilegiados. Algunos mantendrán que paz consiste simplemente en la ausencia de la violencia manifiesta, aunque otras formas de violencia puedan estar haciendo tanto daño como formas mas patentes y usarse a veces en nombre del mantenimiento de la paz o de la ley y del orden. El estudiante de la paz, no debe de intentar reconciliar al amo y al esclavo, sin haber trabajado antes para abolir la esclavitud.

Quienes se consideran implicados en estudios de la paz pueden agruparse en dos líneas: la funcional y la ideológica. La línea divisoria pasa entre quienes están interesados en el conocimiento científico y quienes están interesados en la acción. Los activistas están interesados en cambiar situaciones que consideran como susceptibles al conducir a la guerra y a la violencia, en cambio, los investigadores puros tienden a pensar que basta con conocer los hechos y contar con cierta información, para evitar las guerras y la violencia.

Pero la principal división ideológica entre quienes se hallan comprometidos en estudios por la paz atañe a su interpretación de la paz. Para algunos, aunque creo que hoy en día cada vez menos, la paz es simplemente la antítesis de la guerra. La mayor diferencia, sin embargo, esta entre quienes ven la paz como la ausencia de violencia manifiesta, y quienes la equipararían más bien con la justicia social. Los primeros estarían a favor de mantener el statuo quo pretextando que mientras no haya violencia abierta, las cosas no van tan mal. Los otros, sostendrían que el statuo quo se mantiene por medio de la injusticia y que de hecho, se ejerce una violencia constante sobre los derechos, e incluso sobre las vidas de los seres humanos. Quienes piensan de este modo, se dividirían a su vez, entre quienes sostiene que esta “violencia estructural”, solo puede ser derrocada mediante la resistencia y si es necesario, la contra violencia, y los que creen en técnicas de no-violentas de cambio social.

En primer lugar, el estudio de la paz no debería confinarse al análisis de los medios para prevenir o acabar con las guerras. En segundo lugar, el estudio de la paz, no deberían considerarse exclusivamente en el nivel internacional. Y por último, el apoyo a un statuo quo que permite y fomenta tales condiciones hostiles es una admisión tacita de la violencia.

Desarrollé un enfoque basado en lo que he denominado relaciones pacificas y hostiles entre individuos, grupos o naciones. Relaciones

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