Contribuciones

Clasificación de las contribuciones en el Sistema Tributario Mexicano.

El fundamento del pago de las contribuciones lo tenemos en el artículo 31, fracción IV de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos en el cual nos dice que es obligación de los mexicanos contribuir para el gasto público.

Las contribuciones tienen la finalidad de, en lo principal, solventar los gastos del Estado para que se encamine a alcanzar todos aquellos objetivos encaminados al bien común o beneficio colectivo. La ley, a través del Código Fiscal de la Federación, establece una clasificación de estas contribuciones en su artículo 2 las cuales se enumeran a continuación:

I. Impuestos,

II. Aportaciones de seguridad,

III. Contribuciones de mejoras y

IV. Derechos.

Impuestos.

El artículo 2 del anterior ordenamiento jurídico citado nos da un concepto de impuesto diciendo que: “…son las contribuciones establecidas en la ley que deben pagar las personas físicas y morales que se encuentran en la situación jurídica o de hecho prevista por la misma y que sean distintas de las señaladas en las fracciones II, III y IV de este artículo.”

Las fracciones a la que se refiere al concepto anterior son las aportaciones de seguridad, contribuciones de mejoras y derechos, lo cual no hace comentar que el concepto que nos brinda la ley del impuesto es muy ambiguo ya que en el supuesto planteado pueden encajar los otros tipos de contribuciones: las cuatro son establecidas por la ley, todas las pueden pagar personas físicas o morales siempre que encajen en el supuesto, solo la distinción de las fracciones dejar clara la separación entre los conceptos.

Raúl Rodríguez Lobato nos brinda otro concepto de impuesto: “… es la prestación en dinero o en especie que establece el Estado conforme a la ley, con carácter obligatorio, a cargo de personas físicas o morales para cubrir el gasto público y sin que haya para ellas una contraprestación o beneficio especial , directo o inmediato.”

Atendiendo al concepto anterior, en la actualidad el pago del impuesto es en dinero, salvo ciertas excepciones. Todo impuesto está regulado por la ley, si no fuese así, no estaríamos obligados a pagarlo y todos debemos contribuir a su pago para solventar los gastos generados por el Estado, lo cual tendrá beneficios a todos los que lo pagamos, aunque no sean muy perceptibles.

Aportaciones de seguridad social.

El mismo artículo 2, fracción II del citado Código Fiscal nos brinda un concepto de esta: “… las contribuciones establecidas en la ley a cargo de personas que son sustituidas por el Estado en el cumplimiento de las obligaciones fijadas por la ley en

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