Droga En Los Jovenes

DROGA EN LOS JÓVENES.

Por qué tanta descomposición social?

En los últimos años se ha venido notando un acelere en la descomposición social no solo en nuestro país sino a nivel mundial, a diario vemos crímenes, robos, fraudes y violaciones cometidos en su mayoría por personas en cuyo interior existe un conflicto, personas que en un principio formaron parte de una familia, pero que dentro de ellas no hallaron el espacio que necesitaban y lo buscaron en el lugar menos indicado quedando inmersas en el alcohol y las drogas, haciendo parte ahora del grupo de personas a las que la sociedad no le interesa saber cómo viven, que piensan ni nada por el estilo.

Tenemos una percepción tan desligada a estos sucesos que pareciera que el problema no es con nosotros si no afecta a un integrante de nuestra familia y por tanto no debemos hacer nada y le dejamos todo el trabajo al estado, y este a su vez ataca el problema con tímidos programas sociales que parecieran no tener efectos positivos en la sociedad.

Se dice que para corregir o para enseñar hay que dar ejemplo y eso es justamente lo que le falta a la sociedad en general, de nada sirve invertir grandes sumas de dinero creando nuevos centros penitenciarios, aumentando el poder de la fuerza pública si el estado y las cabezas visibles de las familias no tenemos buenos principios ni valores éticos y morales que sirvan de ejemplo a nuestros sucesores.

El problema de la descomposición social se debe a muchos factores pero en especial a dos, que por cierto uno va ligado al otro, estos dos factores son las drogas y la descomposición familiar partiendo que la familia es la base de toda sociedad.

Para nadie es un secreto que las drogas hacen un gran aporte a la desintegración social que se vive en nuestro país. Existen evidencias que indican que son muchos los delitos que se cometen bajo los efectos de cualquier sustancia psicoactiva ya que estas sustancias pueden estimular la excitabilidad, la irritabilidad o las disposiciones violentas por parte de quien la consume, ya que las sensaciones que experimentan con estas sustancias psicoactivas son innumerables y diferentes en cada individuo, pues tal es su efecto que hacen que la persona se desconectan del mundo real dándole paso a la paranoia, las alucinaciones, nerviosismo, relajación o por lo contrario puede hacerles sentir una sensación de fuerza y energía haciéndoles creer que son superhéroes.

Siendo más propensos los jóvenes que no tienen clara su visión, que cuentan con mucho tiempo libre o que padecen algún problema como baja autoestima, problemas familiares, económicos en fin.

La pregunta que surge de analizar lo anterior es; ¿estamos preparados para combatir este mal en nuestro entorno y más específicamente en nuestros hogares?, ¿Son inmunes nuestros jóvenes a este tipo de situaciones? ¿Tenemos el conocimiento para detectar cuando este flagelo está asechando a algún integrante de nuestra familia? Son muchos los interrogantes que surgen después de analizar la situación detenidamente.

Pero primero que todo para poder identificar cuándo este flagelo de la drogadicción nos asecha, es importante conocer de qué forma se presenta y cuáles son sus etapas.

El consumo de estas drogas tiene tres etapas;

Inicialmente esta la ETAPA DE LA INICIACIÓN O ETAPA DEL ENAMORAMIENTO; etapa del USO, es cuando el joven decide experimentar por uno u otra razón y lo hace el fin de semana y no tiene ninguna consecuencia negativa (ni deterioro escolar, ni colapso familiar), en esta etapa el no gasta dinero pues aun no compra la droga por que los amigos se la proveen.

Seguidamente esta la ETAPA DE LA AFIRMACIÓN; etapa

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