EL XI MANDAMIENTO

“EL XI MANDAMIENTO”

LA SORTIJA. En el tema de la sortija entendí que el universo se mueve según nos movemos nosotros y que los adultos hemos perdido la alegría y la sensibilidad que tienen los niños, ellos pueden ver y percibir mucho más cosas que los adultos, y que si conserváramos esa esencia habría personas más felices.

Que si quiero lograr algo en la vida debo tener constancia y dedicación, sin enojarme, ni desesperarme, no importando cuantas veces falle, lo importante es seguir haciéndolo hasta obtener el resultado deseado.

EL PROLOGO. Nos habla acerca de las creencias y la ignorancia que tenemos y cuando nos aferramos a estas nos limitan, ya que nos cerramos al conocimiento y a toda posibilidad de crecimiento. La ignorancia nos hace estúpidos, pues desperdiciamos esta vida que dios nos dio y por lo tanto no sabemos qué hacer con ella, ni para que estamos aquí y ni siquiera a dónde vamos.

CUIDANDO LA IMAGEN. Nos habla de que si nos pusiéramos a hacer cuentas del tiempo aprovechado en nuestro beneficio y en beneficio de la gente es mínimo, comparado con el tiempo desperdiciado, pues no hacemos nada o nos la pasamos lastimando, sufriendo y siendo infelices. Cada persona es lo que hace y piensa.

Habla acerca de los miedos, cada que creamos miedo por alguna situación, vamos creando también nuevas creencias y nuevas formas de protegernos para evitar ser lastimados. Cuando algo o alguien nos lastima generalizamos, pensamos que todos son igual y que nos van a hacer lo mismo y nos cerramos a tener otras experiencias, y a la posibilidad de saber que no todo es igual y que existen otras posibilidades.

Buscamos siempre cuidar nuestra imagen, culpando a otros de nuestras acciones, poniendo pretextos, excusas, dando explicaciones para salir siempre limpios y bien librados, sin embargo estamos yendo en contra de nuestra propia naturaleza, en contra de nosotros mismos, pues eso nos daña, podemos engañar a otros pero no a nosotros mismos.

BUENOS PROPOSITOS, MALOS METODOS. Por lo regular nos preocupamos más por TENER, que por SER y esto nos lleva a crear un mundo falso, mintiendo, negando, disimulando y poniéndonos una máscara para aparentar lo que no somos, nos ponemos una armadura, para evadir responsabilidades y nos hace duros e insensibles, para no sentir dolor si nos quieren lastimar y para no sentir compasión por los que lastimamos. Pero a la vida no podemos engañarla, y tarde o temprano, nos pasa la factura de nuestros actos y llega un momento que esos secretos almacenados, las emociones y sentimientos negativos explotan de nuestro cuerpo y podemos lastimar y herir a los demás o se manifiestan por medio de alguna enfermedad, afectándonos nosotros mismos.

QUERER TENER RAZON. A habido ocasiones que me cuento o cuento historias para justificar acciones que sé que están mal, porque así me hacen sentir, sin embargo me meto en mi razón y defiendo esas acciones a capa y espada como la si fuera la única verdad.

LA MASCARA Y LA CORAZA. Hay momentos en que aparento cosas que no soy, para no dar mal ejemplo, pero realmente no soy honesto al 100%.

CUANDO EL AMOR ES VERDADERO, ES COMPASIVO Y CURA. Esto es algo que he experimentado, pues he aprendido a perdonar y a pedir perdón, a escuchar, a ser tolerante, paciente. Me he curado de varios malestares que tenía, he aprendido a confiar en los demás y en mí mismo, pues he aprendido a amarme y amar a los demás.

LAS LECCIONES DE LA VIDA. La vida nos va poniendo lecciones, por medio de tropiezos, errores que cometemos y esos mismos nos sirven para aprender, pero muchas veces no aprendemos la lección y los seguimos cometiendo. Nos preocupamos demasiado por cosas materiales y situaciones que no tienen importancia y olvidamos las cosas que realmente valen la pena, como el solo hecho de respirar, de observar lo grandioso de la naturaleza. Entendí que el amor, nos puede dar alegría, nos puede curar, porque es el sentimiento más puro que tiene el ser humano. Por lo tanto hay que cultivarlo, cuidarlo día con día, como si fuera un jardín para que de flores bellas. Hay que vivir y disfrutar cada día, expresar el amor que tenemos a nuestros seres queridos y no hasta que lleguen los problemas, enfermedades o hasta la muerte. Los errores nos dejan mucha enseñanza, pues si observamos con detenimiento podemos encontrar porque fallamos y hacer algo para no repetirlo.

Hay que aprender a desprenderse de lo que no sirve y aprender a usar lo que si sirve y nos funciona.

REGLAS DEL DECALOGO.

SEA CONTROLADOR Y AUTORITARIO. Muchas veces la aplique principalmente con mi familia, sin darme cuenta de las emociones y sentimientos que generaba con ellos, como inseguridad, miedo, enojo, resentimiento, pues pensaba que era la forma adecuada y que todo debía hacerse como yo dijera.

PRETENDA SABERLO TODO. También hubo ocasiones en que pretendía hacer creer que todo lo sabía y si alguien me llevaba la contraria buscaba la forma de demostrar que los que no sabían eran ellos.

TENER RAZON HASTA MORIR. El querer tener la razón durante mucho tiempo de mi vida, fue creando una vida llena de conflictos, con mi familia y con la gente que me rodeaba, pues el no aceptar los puntos de vista de los demás me generaba problemas.

NO ESCUCHE. Hubo muchos momentos en mi vida, que no escuche lo que mis hijos o mi esposa me pedían, me lo expresaban de distintas maneras, pero ponía oídos sordos o los oía, pero no los escuchaba.

EXPERTO CRITICO DE LOS DEMAS. En algún momento de mi vida si he criticado la forma de actuar o de hablar de algunas personas. Pero he entendido que si en lugar de criticar sus defectos, veo sus cualidades y se las expreso, puedo puedo contribuir a que estas personas le saquen el mayor provecho a esas cualidades. Tambien me di cuenta que muchas veces me preocupo mas por otras personas, que por mi mismo, dedico mas dinero, tiempo y atención a otras personas mas que a mi.

POSTERGUE. He pospuesto muchas cosas que para mi son importantes, me he quedado como colgado del mismo trapecio, pero de hoy en adelante estoy decidido a saltar al otro trapecio pues se que es una puerta abierta a nuevas oportunidades y posibilidades.

SUBESTIMESE. Hubo un tiempo que me subestime, pensé y sentía que no valia, porque lo que hacia no me salía bien y que el éxito y la felicidad solo era para otras personas y no para mi, pues no era lo suficiente. Me hacia la victima y culpaba a otras personas de lo que me pasaba.

NO CUMPLA SU PALABRA. Con esta regla me identifique mucho mas, pues he dejado pendientes muchas cosas que me e propuesto, como cuidar mi salud, dejar los

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