El Oso Polar

INTRODUCCIÓN

En el informe que se presenta a continuación describe todas las características de los osos polares, animales mamíferos que a pesar de su apariencia pueden ser muy peligrosos para el hombre, ya que son cazadores por naturaleza, es por esta razón que se ahondara en el tema a lo largo de este informe.

Estos mamíferos viven en el Ártico ya que por sus características corporales y capacidad de adaptación en el nado, buceo, termorregulación corporal y evitar el sobrecalentamiento de su propio cuerpo, permite que pueda sobrevivir en este tipo de clima, apartado de la presencia humana.

En los últimos años se han visto afectados por el calentamiento global, que está perjudicando su desarrollo y supervivencia, ya que la falta de hielo y de temperaturas bajas están provocando que afecte su termorregulación y no pueden evitar el sobre calentamiento corporal y agotamiento físico, al tener que atravesar grandes distancias nadando, lo que lleva como consecuencia de todo esto es a la muerte.

CARACTERÍSTICAS

El oso polar o también llamado oso blanco (Ursus maritimus) es un gran mamífero del orden Carnívora, familia Ursidae y mayor depredador terrestre del planeta. Vive en el medio polar y zonas heladas del hemisferio Norte.

El macho adulto pesa en promedio 460 kilogramos, pero su agilidad es tal que puede saltar grietas de hilo de más de 3,65 m. de anchura. Los machos casi desarrollados miden de 2,40 a 2,60 m. de longitud (las hembras 1,80), pero algunos llegan a los 736 kg., 3,30 m. de largo y 1,35 de alto en la cruz.

Hay 19 tipos diferentes de osos polares que han sido identificados y caracterizados por los investigadores. En este momento cinco de esas especies están clasificadas como vulnerables debido a la disminución de su población total.

Presenta un perfil más alargado que el de otros osos y las patas más desarrolladas para nadar largas distancias. Las orejas y la cola son muy reducidas, para que de este modo les ayude a mantener mejor el calor corporal. Algo a lo que ayuda sobremanera la gruesa capa de grasa subcutánea y su denso pelaje translúcido que no blanco formado por pelos hueco, ideales para un buen aislante térmico. Bajo el pelaje de estos osos polares se encuentra la piel, que es negra para atraer mejor la radiación solar y aumentar así el calor corporal.

Aunque de costumbres cazadoras, el oso polar come un poco de todo: huevos, algas, virutas, desperdicios de estaciones balleneras e incluso cadáveres de su propia especie, de todas sus comidas favoritas son las crías de focas y renos, llegan a comer unos 30 kilos de comida al día, y los cachorros 1 kilo. Los osos no toman agua, ya que en su ambiente es salada y ácida. Sacan los fluidos que necesitan de la sangre de sus presas. También se ha descubierto recientemente que pueden llegar a ser caníbales, en especial los machos, ya que si sufren demasiada hambre, no tienen problemas en comerse a otros osos en especial jóvenes o muertos generalmente. Cuando sale a tierra dispuesto a pasar el periodo letárgico, suele adoptar dietas similares a su próximo pariente, el oso pardo, hartándose de hierbas, líquenes y bayas. Tampoco desecha animales pequeños como lemmings, y en Alaska, cuando ocurre la remonta del salmón, se dedica a capturar este pez en remansos y torrenteras.

Los osos polares son animales solitarios excepto cuando están listos para aparearse. El período de apareamiento de los osos polares es entre abril y mayo, pero los óvulos no se fertilizan y comienzan a desarrollar hasta septiembre, período que se llama implantación diferida. Durante este tiempo, la hembra trata de almacenar la mayor cantidad de grasa posible.

Sólo las hembras preñadas buscan refugio durante el invierno dando a luz una o dos crías de osos polares durante el invierno en un refugio excavado en el hielo. El resto de los individuos siguen siendo activos a pesar de la oscuridad y frío extremo que reinan en las zonas polares y vagabundean a la búsqueda de comida. Las madres viven de la grasa que han acumulado en su cuerpo durante el invierno, mientras que los cachorros se alimentan de la leche materna.

Las crías nacen en octubre, tras una gestación corta dentro de una cueva que la madre excava en una pila de nieve. Al nacer estos oseznos polares miden apenas treinta centímetros de altura y pesan 700 gramos , quedan protegidos de las temperaturas exteriores de -10 C. gracias al calor de la piel materna y de la propia guarida. En cinco meses crecen rápidamente, de tal manera que al inicio del verano pueden seguir perfectamente a la madre hambrienta por el ayuno. Pasan otros 5 meses junto a ella, aprendiendo a localizar comida y a resguardarse de los machos adultos. Algunos llegan a convivir con su madre hasta dos años y medio de edad. Maduran sexualmente entre los 3 y los 4 años, y pueden vivir un máximo de 30.

CARACTERÍSTICAS DEL LUGAR DONDE VIVE.

El oso polar habita en lo conocido como el circulo Ártico, y en unas regiones un poco más al sur, por el lado de Canadá y Alaska; en sí su hábitat comprende un territorio que abarca el Océano Ártico, una parte de Canadá, Alaska (por Estados Unidos), Dinamarca (por Groenlandia), Noruega, y la Unión Soviética.

En las últimas décadas ha habido avistamientos de osos polares en lugares que están más cerca de las civilizaciones humanas. Los osos polares tienen una gama muy amplia de lugares para deambular, en estas áreas donde viven. Se cree que existen más variedades de osos polares que de cualquier otro carnívoro de gran tamaño en el mundo.

Hay muchos osos polares que viven en zoológicos de todo el mundo. Al parecer lo hacen muy bien en cautiverio.

ADAPTACIÓN

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