El concepto de violencia

La violencia (en sus diferentes tipos) es un tema que siempre dará mucho de qué hablar, debido a que como seres humanos tenemos cierta tendencia a permitir que nuestros sentimientos (ya sean negativos o positivos) gobiernen nuestras acciones.

Normalmente la violencia se manifiesta como una liberación o consecuencia de nuestros sentimientos negativos, es raro encontrarla como una liberación o consecuencia de nuestro sentimientos positivos (a excepción de trastornos sexuales, psicosis, entre otros).

LA VIOLENCIA

La violencia es una acción ejercida por una o varias personas en donde se somete que de manera intencional al maltrato, presión, sufrimiento, manipulación u otra acción que atente contra la integridad tanto físico como psicológica y moral de cualquier persona o grupo de personas.

La violencia es la presión síquica o abuso de la fuerza ejercida contra una persona con el propósito de obtener fines contra la voluntad de la víctima. Esta actúa como un virus, se esparce rápido y los síntomas son bastante notorios, se contagia de unas personas a otras mediante la observación y al igual que cualquier epidemia cobra muchas vidas, ya sea de manera directa o indirecta.

Nuestras vidas se encuentran rodeadas de violencia, ya sea en la familia, trabajo, política o en tu comunidad, a pesar de que estamos conscientes de que la violencia no genera ningún bien para la sociedad, nosotros la permitimos ya sea ignorándola, consintiéndola o generándola.

Existen diferentes tipos de violencia, pero hay algo que todas ellas tienen en común, que las consecuencias que generan son negativas, cuando una persona emplea la violencia para conseguir un fin, llega a generar odio y rencor en las personas afectadas, y esto crea cadenas de sentimientos negativos, la violencia genera odio y rencor, el odio y el rencor generan violencia en forma de venganza y a su ve esta genera odio y rencor, y así se forman cadenas de sentimientos negativos que pueden acabar en tragedias

Los humanos estamos expuestos a la violencia en todo momento, responder a la violencia con violencia es bastante sencillo, el verdadero reto es aprender a sobrellevarla, no permitiendo que ella nos afecte ni que nos llegue, pero al impedir su efecto sobre nosotros también debemos asegurarnos de no generar más violencia, no olvidemos que “Vengándose uno se iguala a su enemigo; perdonándolo, se muestra superior a él”

El ser humano comparte el instinto agresivo con los animales, y es un impulso que nos cuesta controlar porque a pesar de ser seres racionales y evolucionados, no podemos dejar de lado nuestros impulsos animales. Muchas personas violentas intentan justificar sus actos con los impulsos agresivos de nuestro instinto, pero por más argumentos que puedan cimentar hay una diferencia entre la agresividad y la violencia

En cambio la violencia es el abuso y el

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